Minería

Mineralo-Estados: Svampa educa al Presidente

Por Maristella Svampa.

Ayer vi el reportaje televisivo que un periodista de C5N le hizo al presidente y cuando le preguntaron sobre minería, dijo un par de cosas que ameritan un llamado de atención, no solo porque buscó provincializar la problemática, sino porque estableció una diferencia entre provincias "con conflicto" y provincias "sin conflicto".

Dijo entonces que en Catamarca y San Juan no había conflicto y que en San Juan, citando a Hensel -hoy secretario nacional de minería- se había logrado un control de calidad en la producción minera.

Alguien le tiene que avisar el presidente que San juan y Catamarca son un mineralo-Estado y eso no constituye un modelo de buen gobierno.

El concepto de mineralo-Estado es desarrollado por nuestro amigo William Sacher, para leer el caso de Canadá, líder internacional del sector y modelo que busca expandir más allá de sus fronteras. Con este fin el gobierno proporciona apoyo político, financiero y moral a las empresas dentro de su territorio y en otros donde se instalan.

El mineralo-Estado en San Juan y Catamarca implica la consolidación de espacios gubernamentales vinculados con la actividad minera, la participación de funcionarios de gobierno en empresas de servicios ligadas al sector, yuxtaponiendo lo público y lo privado, el aparato de difusión y propaganda público y privado al servicio de la megaminería.

Pero, más allá de las caracterizaciones, alguien le tiene que avisar al presidente que durante la gestión provincial de Hensel en minería en San Juan hubo dos derrames en Veladero de solución cianurada.

Que la Barrick sigue impune.

Que hay 5 ríos contaminados.

Que hay conflicto y asambleas muy movilizadas como la de Jachal.

Que en Catamarca, con la Alumbrera se consolidó una economía de enclave, que lejos está de contribuir al "desarrollo provincial".

Que sigue siendo la provincia más pobre del noroeste, con mayor cantidad de empleados público y personas con la AUH.

Que desde hace años hay resistencias en Andalgalá, Tinogasta, entre otras localidades.

Va como muestra una carta de la asamblea de Jachal, de 2017, anunciando el tercer derrame en Veladero.

Tomado del muro de Facebook de la investigadora y ambientalista.