Política

¿Se quebró la oposición política?: el caso Gutiérrez y el rol de los radicales a futuro

El gobierno argentino salió al cruce por el comunicado que la principal coalición opositora, Juntos por el Cambio, emitió en relación al asesinato de Fabián Gutiérrez, exsecretario de la actual vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. "Lo que ha sucedido fue una utilización política de un crimen común", aseguró Gustavo López, vicepresidente del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM).

Gutiérrez, que trabajó para Fernández de Kirchner hasta 2010, apareció muerto a cuchilladas. La investigación indica que se trató de un crimen común, no político, pero la oposición macrista aprovecho la noticia para culpar al oficialismo. Juntos por el Cambio sacó un documento donde insinuaba que el gobierno estaba implicado en el crimen.

López calificó ese documento de Juntos por el Cambio como "un quiebre político importante". Sin embargo, subrayó que dentro de la oposición "hay sectores dispuestos a jugar dentro del sistema democrático mientras otros utilizan herramientas fuera de la ley para sacar rédito político". El sector más intransigente de la oposición "pone en tensión el pacto democrático" y apuntó a la necesidad de "entablar un dialogo fuerte con los sectores democráticos de este partido para aislar" a los más extremistas.

Gutiérrez había estado detenido ilegalmente por el ya fallecido juez Carlos Bonadío en una causa judicial cuestionada por juristas y políticos.

Por último, López se refirió a la Unión Cívica Radical, que conforma Juntos por el Cambio, y a la que perteneció hasta 2003.

"Cuando la UCR dejó de tener un proyecto presidencial, terminó como furgón de cola de la derecha. Perdió su razón de ser porque se alió a aquellos que había combatido", lamentó.