Ya murieron 7 obreros por Coronavirus en el Ingenio LedesmaEl Ingenio Ledesma atraviesa la peor situación desde que comenzó la pandemia, con cinco obreros fallecidos en las últimas horas, desde el emporio de los Blaquier informaron que son 128 los casos positivos. A través de los propios trabajadores y sus familias se ha tomado conocimiento que cuatro empleados del sector azúcar han fallecido a causa del coronavirus en la últimas 36 horas y un obrero de frutales el pasado jueves.
Estas muertes se suman al obrero de la papelera fallecido el pasado 16 de julio y al trabajador del Lote Paulina del 30 de julio, escalando los decesos en el complejo agroindustrial. Es un régimen social que persigue la ganancia a costa de las vidas obreras, es un sistema sanitario en ruinas que golpea las mayorías populares, son gobiernos nacionales y provinciales que se niegan a tocarle los bolsillos a estos monstruos empresariales. Les dicen esenciales, pero para ellos las vidas trabajadoras no valen nada.
Horas y horas esperando que de medicina laboral de la empresa y el COE (Comité Operativo de Emergencia) den una respuesta ante los síntomas, a los aislamientos por contacto estrecho. Por eso resulta urgente que los trabajadores constituyan comisiones de seguridad e higiene para que ellos mismo cuiden su salud, junto a la exigencia que se pare la producción de inmediato en el ingenio azucarero, donde circula el virus y se ha convertido en un verdadero foco infeccioso, para realizar una desinfección profunda y testeos masivos para evitar la propagación del virus.
Trabajadores que deben ser licenciados debido a que padecen enfermedades graves, cardíacos, diabéticos y con afecciones pulmonares muchas veces producto de la misma contaminación que provoca la patronal, padecimientos de los cuáles la empresa tiene pleno conocimiento ya que posee su historia clínica e intencionalmente no otorga las licencias.
A esta altura ya no son solo los contagiados de covid-19 sino el conjunto de la población ramaleña que se ve impedida de acceder a atención médica, recetas, un sistema de salud público degradado que está colapsado mientras los médicos y enfermeras están desbordados con un stress insoportable.
Mientras tanto se señala con el dedo acusador y se pone la responsabilidad sobre los trabajadores, inclusive se utiliza desde la patronal como excusa para sancionar por tener corrido un mísero tapabocas. Son los propios trabajadores y trabajadoras que tuvieron que comprar sus propios elementos de prevención. Este maltrato muestra que la clase empresarial no vive ni padece lo que el sistema capitalista genera en los cuerpos de las y los obreros, ellos viven lujosamente gracias al sudor de su trabajo.
Esto genera que Los Blaquier se encuentren entre los 50 más ricos del país, solo declarado poseen un patrimonio de 490 millones de dólares. Sin embargo, ningún gobierno estuvo dispuesto a tocarles un poco de su riqueza.
Por eso es que gobernar para los Blaquier no es exclusivo del gobierno radical de Morales sino del actual gobierno nacional, que vino hace una semana a colaborar con la gestión radical y no hubo un solo pronunciamiento a los contagios y la situación dramática que padece el Departamento de Ledesma. Por eso es que el anunciado proyecto de Alberto Fernández de impuesto a las grandes fortunas nunca llegó, mientras siguen negociando el pago de la deuda externa.
A contrapelo del desprecio de la patronal por las vidas obreras, son innumerables los gestos de solidaridad entre los propios trabajadores, sea con un mensaje, asistiendo con mercaderías y estando presente con los compañeros y las compañeras.
Medidas de emergencia que sean tomadas por las masas de obreros y obreras resultan cada vez más urgente, tales como afectar el sistema privado de salud y las obras sociales en un sistema único estatal gestionado por los propios trabajadores de la salud como se propone desde la izquierda.
Solo desde el PTS-FIT los concejales de Libertador Gral. San Martín, ingresaron el proyecto de ordenanza para que Ledesma S.A.A.I pague impuestos municipales y con esos recursos en parte poder combatir la pandemia del COVID 19. Estas medidas implican afectar intereses de los dueños del país porque las vidas trabajadoras están en juego, dependen de una lucha sin cuartel contra los empresarios y sus gobiernos.
Fuente: La Izquierda Diario
El Ingenio Ledesma atraviesa la peor situación desde que comenzó la pandemia, con cinco obreros fallecidos en las últimas horas, desde el emporio de los Blaquier informaron que son 128 los casos positivos. A través de los propios trabajadores y sus familias se ha tomado conocimiento que cuatro empleados del sector azúcar han fallecido a causa del coronavirus en la últimas 36 horas y un obrero de frutales el pasado jueves.
Estas muertes se suman al obrero de la papelera fallecido el pasado 16 de julio y al trabajador del Lote Paulina del 30 de julio, escalando los decesos en el complejo agroindustrial. Es un régimen social que persigue la ganancia a costa de las vidas obreras, es un sistema sanitario en ruinas que golpea las mayorías populares, son gobiernos nacionales y provinciales que se niegan a tocarle los bolsillos a estos monstruos empresariales. Les dicen esenciales, pero para ellos las vidas trabajadoras no valen nada.
Horas y horas esperando que de medicina laboral de la empresa y el COE (Comité Operativo de Emergencia) den una respuesta ante los síntomas, a los aislamientos por contacto estrecho. Por eso resulta urgente que los trabajadores constituyan comisiones de seguridad e higiene para que ellos mismo cuiden su salud, junto a la exigencia que se pare la producción de inmediato en el ingenio azucarero, donde circula el virus y se ha convertido en un verdadero foco infeccioso, para realizar una desinfección profunda y testeos masivos para evitar la propagación del virus.
Trabajadores que deben ser licenciados debido a que padecen enfermedades graves, cardíacos, diabéticos y con afecciones pulmonares muchas veces producto de la misma contaminación que provoca la patronal, padecimientos de los cuáles la empresa tiene pleno conocimiento ya que posee su historia clínica e intencionalmente no otorga las licencias.
A esta altura ya no son solo los contagiados de covid-19 sino el conjunto de la población ramaleña que se ve impedida de acceder a atención médica, recetas, un sistema de salud público degradado que está colapsado mientras los médicos y enfermeras están desbordados con un stress insoportable.
Mientras tanto se señala con el dedo acusador y se pone la responsabilidad sobre los trabajadores, inclusive se utiliza desde la patronal como excusa para sancionar por tener corrido un mísero tapabocas. Son los propios trabajadores y trabajadoras que tuvieron que comprar sus propios elementos de prevención. Este maltrato muestra que la clase empresarial no vive ni padece lo que el sistema capitalista genera en los cuerpos de las y los obreros, ellos viven lujosamente gracias al sudor de su trabajo.
Esto genera que Los Blaquier se encuentren entre los 50 más ricos del país, solo declarado poseen un patrimonio de 490 millones de dólares. Sin embargo, ningún gobierno estuvo dispuesto a tocarles un poco de su riqueza.
Por eso es que gobernar para los Blaquier no es exclusivo del gobierno radical de Morales sino del actual gobierno nacional, que vino hace una semana a colaborar con la gestión radical y no hubo un solo pronunciamiento a los contagios y la situación dramática que padece el Departamento de Ledesma. Por eso es que el anunciado proyecto de Alberto Fernández de impuesto a las grandes fortunas nunca llegó, mientras siguen negociando el pago de la deuda externa.
A contrapelo del desprecio de la patronal por las vidas obreras, son innumerables los gestos de solidaridad entre los propios trabajadores, sea con un mensaje, asistiendo con mercaderías y estando presente con los compañeros y las compañeras.
Medidas de emergencia que sean tomadas por las masas de obreros y obreras resultan cada vez más urgente, tales como afectar el sistema privado de salud y las obras sociales en un sistema único estatal gestionado por los propios trabajadores de la salud como se propone desde la izquierda.
Solo desde el PTS-FIT los concejales de Libertador Gral. San Martín, ingresaron el proyecto de ordenanza para que Ledesma S.A.A.I pague impuestos municipales y con esos recursos en parte poder combatir la pandemia del COVID 19. Estas medidas implican afectar intereses de los dueños del país porque las vidas trabajadoras están en juego, dependen de una lucha sin cuartel contra los empresarios y sus gobiernos.
Fuente: La Izquierda Diario