Patagonia

¿Don Jaime de Nevares estaba vinculado con la Triple A?

Por Aldo Duzdevich

La Academia y el periodismo en general desde hace años usan como principal fuente de información sobre la Triple A un libelo - típico producto de intoxicación de los servicios de inteligencia - titulado "Historia de la Triple A" de Horacio Paino, un delirante que, entre otras falsedades, dice en su libro que el obispo de los DDHH Don Jaime de Nevares era el jefe de la Triple A en Neuquén.

Cuando me refiero a la Academia hablo del colectivo de investigadores, expertos y académicos que se dedican al estudio de diversas disciplinas. En nuestro país la Academia esta mayoritariamente compuesta por profesores universitarios, alumnos avanzados, investigadores del CONICET, y otros organismos públicos y privados dedicados a la producción de conocimiento.

En la Academia, las discusiones deben estar basadas en evidencia empírica, argumentos lógicos y teorías bien fundamentadas. Sus miembros deben estar comprometidos con la objetividad, siempre sujetos a una crítica constante y a la revisión de sus propios trabajos y los de sus colegas.

En referencia a la investigación histórica, el reconocido historiador Edward Hallett Carr sostiene: "Las fuentes no son nunca neutrales, y la verdadera tarea del historiador es verificar la autenticidad de las fuentes, poniendo siempre en duda cualquier testimonio que no sea corroborado por otras evidencias."

Toda esta introducción viene a cuento que lo producido por nuestra Academia y gran parte del periodismo sobre Triple A adolece de un grave error que parte de la escasa veracidad de la principal fuente utilizada para sus trabajos de investigación que es lo escrito por Horacio Paino.

He leído una veintena de trabajos y publicaciones académicas de diversos autores y todos citan como fuente principal y casi única el mencionado libelo de Horacio Paino. Quiero suponer que como la edición impresa es difícil de conseguir la gran mayoría de los académicos no lo leyó y lo cita desde las citas de otros autores.

Cualquier estudiante de primer año de historia que se tome el trabajo de leerlo y analizar su validez como fuente, confrontando con algunos datos públicamente conocidos, podrá rápidamente darse cuenta de la vulgaridad de falsedades allí expuestas .

El libro

Horacio Paino fue un militar retirado, condenado por delitos comunes, y declarado dos veces (la segunda por el Fiscal Julio Strassera) inimputable por graves trastornos psicológicos. Luego de cumplir una condena, ingresó a trabajar en el Ministerio de Bienestar Social que dirigía Jose Lopez Rega, de donde fue exonerado por malversación de fondos .

El 12 de febrero de 1976 (un mes antes del golpe), estando preso por delitos comunes realizó una denuncia ante legisladores nacionales sobre el funcionamiento de la Triple A. Y en 1984, en coincidencia con el inicio del juzgamiento a las Juntas Militares, publicó su libro la Historia de la Triple A, cuyas incongruencias paso a detallar.

El la pagina 55 Paino muestra un diagrama de la Organización a nivel nacional de la Triple A. En el centro figura MBS (Ministerio de Bienestar Social) . Y luego cinco cuadritos : Chaco CNU ; Formosa CNU; Córdoba, Lacabane UOM-CNU; Buenos Aires, UOM; y Neuquén : Obispo Jaime de Nevares.

Digamos que en efecto la CNU (Concentracion Nacional Universitaria) está probado que operó como "franquicia" de la Triple A en La Plata y Mar del Plata. Por lo tanto, no suena irreal que también pudiese operar en Córdoba, Chaco y Formosa, lo mismo se puede pensar de algún sector de la UOM.

Pero decir que justamente un obispo absolutamente comprometido con la defensa de los DDHH, como Don Jaime de Nevares, dirigía la Triple A en Neuquén, habla no solo de un absurdo total, sino de una profunda ignorancia. Cualquier lector de los diarios sabia en 1984 quien era de Nevares. Incluso en ese año, Don Jaime de Nevares era integrante de la CONADEP. y una figura reconocida nacional e internacionalmente por su vinculo con las Madres de Plaza de Mayo y demás organismos de DDHH.

Cualquier académico serio que llegue a la pagina 55 del breve libelo de Paino, esta inclusión de de Nevares debería ser suficiente motivo para relativizar y/o desecharlo porque, evidentemente, no admite ninguna lógica su mención como miembro de la Triple A. Sin embargo, en los largos textos que he consultado, sus autores no hacen mención a este disparate escrito por Paino.

Incluso, un juez poco fiable como Oyarbide, que llevo la Causa Triple A, tomó como prueba el libro de Paino, y tampoco cuestiona la mala información. Y si ese libelo fue suficiente prueba para detener y procesar a varios de los allí nombrados, incluso, con el mismo criterio Oyarbide, podría haber citado a Don Jaime como imputado.

Rucci

A José Ignacio Rucci lo mató la organización Montoneros. Además de una investigación y fallo judicial que les adjudica el crimen, existe gran cantidad de testimonios de ex militantes montoneros muy reconocidos, e incluso en la revista Evita Montonera (Órgano oficial de la organización) N.º 5 de Julio 1975 se adjudican el atentado que en su momento no reconocieron.

Sin embargo, Paino inventa que ese mediodía se encontró en el Ministerio de Bienestar Social con un tal David García Paredes llorando con una escopeta Itaka en la mano diciendo que había matado a Rucci. Agrega, para fortalecer su relato, un reportaje a otro mitómano como Juan Carlos Juncos, un delincuente común preso en Neuquén y que en 1983, con la finalidad se ser trasladado a una cárcel en Capital Federal, se adjudico haber participado como chofer de la Triple A del crimen de Rucci.

Otra de las falsedades está en la pagina 91, donde Paino escribe : "Mis ojos estaban siempre atentos a la figura de una empleada de la oficina de prensa del Ministerio llamada Marta Bazán, que había hecho una carrera poco menos que meteórica y que según muchos componentes de la "Tripleta" tenía íntimas relaciones con un jefe naval. La orden de su ascenso en el Ministerio de Bienestar Social había venido directamente de López Rega por lo que en un primer momento se pensó que era su amante. Luego se supo que no."

Efectivamente, existió una Marta Bazán trabajando en el Ministerio de Bienestar Social vinculada al jefe naval jefe de la ESMA Ruben Jacinto Chamorro. Pero eso fue en 1979 cuando el ministro era el vice almirante Julio Juan Bardi, cuatro años después que López Rega fuese eyectado del gobierno en julio de 1975.

Marta Bazán era una reconocida militante montonera, esposa de Bernardo Levenson (también cuadro montonero), secuestrada por los marinos el 20 de octubre de 1976, sometida a servidumbre, trabajo esclavo y a mantener relaciones forzadas con sus captores en la ESMA.

Esta claro que hasta octubre de 1976 Marta Bazán era una activa militante montonera, que en 1974/75 nunca pudo haber estado trabajando en Bienestar Social, recomendada por López Rega y con "intimas relaciones con un jefe naval". Como en otros temas, Paino mezcla nombres y/o informaciones que tienen algún dato real pero que no coinciden con el espacio-tiempo de su relato.

En las paginas 93 y 94 Paino narra una emboscada de Montoneros -frente al monumento de los Españoles - a tres vehículos de la Triple A en los que mueren dos de sus supuestos integrantes : Ángel Carro y Tristán Páez Squer . No existen en los diarios de la época ninguna noticia de tamaño enfrentamiento en esa zona ni tampoco de la existencia de esas dos personas muertas.

Hubo si un atentado de Montoneros al Comisario Juan Ramon Morales (custodia de López Rega) sucedido el 2 de abril de 1975 en la intersección de Dorrego y Huergo. En la emboscada resultó muerto un custodio de Morales, el oficial Joaquín Duran y el Tte Coronel Horacio Vicente Colombo, que ocasionalmente salía de la Dirección de Remonta y enfrentó al grupo comando.

Según el diario La Razon resultaron heridos Morales, su chofer de apellido Calderon y otro oficial de policia F. Berse. Este hecho, además de los diarios, está relatado en el revista Evita Montonera N.º 4 . Salvo la existencia de dos muertos y la cercanía de la zona, nada tiene de real el supuesto atentado de Montoneros relatado por Paino.

Asesinos

La Triple A y/o la federación de bandas conocida con ese nombre genérico existió y cometió cerca de 500 asesinatos hasta 1976. Los nombres de las personas asesinadas figuran en las crónicas periodísticas de la época, pero además la Secretaria de DDHH y algunas ONG ha confeccionado listados que son públicos y se pueden consultar fácilmente por la web.

De los 25 nombres mencionados por Paino como asesinados por la Triple A, salvo el de Rodolfo Ortega Peña, ningún otro figura en los listados públicos que podemos consultar hoy. O sea, Paino ni siquiera se tomo el trabajo de consultar algún diario de la época para poner nombres reales que le hubiesen dado cierta veracidad a su relato.

Otro nombre que menciona Paino como mandado a asesinar por López Rega es el del cantautor Jorge Cafrune, que murió en un sospechoso accidente el 1 de febrero de 1978, tres años después que el ex ministro de Bienestar Social se fuera fuera del país.

Obviamente que este tipo de bandas tenían un red de informantes, sobre todo entre personajes del submundo del delito. Pero Paino describe al Servicio de Información del Ministerio de Bienestar Social como una organización compuesta por un jefe por manzana, mas jefes de sector, y jefes de zona. La ciudad de Buenos Aires tiene aproximadamente 20 mil manzanas. Razón por la cual la cantidad de informantes organizados rondaría las 25 mil personas, la misma cantidad de agentes de policía que hoy tiene la ciudad.

Solo alguna dictadura con veinte o treinta años en el poder puede armar una red de informantes manzana por manzana. Pero Paino supone haberlo armado en seis meses.

Intoxicar

Horacio Salvador Paino principal testimonio sobre el cual giran las investigaciones históricas, periodísticas y judiciales sobre la Triple A, fue un vulgar delirante, periférico de los servicios de inteligencia, que fue utilizado con fines de intoxicar la información sobre el accionar de esa federación de bandas de derecha genéricamente llamada Triple A.

Su aparición en los medios de prensa, a fines del 75 e inicios del 76 haciendo declaraciones desde la cárcel donde purgaba una condena por defraudación, coincide con la agresiva campaña de deterioro del gobierno constitucional en preparación del golpe del 24 de marzo. Reaparecerá nueve años después en 1984 con la publicación de su libelo "Historia de la Triple A" de editorial desconocida. Luego se perderá definitivamente su rastro y paradero.

Lo único comprobable de su relato es que por unos meses trabajó en el Ministerio de Bienestar Social que dirigía López Rega y allí conoció algunos funcionarios y personajes que integraban la custodia, y a partir de esos datos armó su relato sobre la Triple A.

¿Esto quiere decir que la Triple A no existió, o que López Rega no tuvo nada que ver con los crímenes de los que se acusan a su entorno directo? De ningún modo. La seguidilla de crímenes de septiembre de 1974 (luego del fallecimiento de Perón) auto adjudicados por comunicados públicos de la Triple A existieron y se cometieron con algún tipo de complicidad o protección policial y/o militar. Pero citar a Paino como principal fuente de investigación es como se dice vulgarmente "comprar carne podrida", y los académicos que lo citan deberían tener la honestidad intelectual de revisar sus trabajos.

De agosto de 1974 a marzo de 1976 hubo en varias ciudades argentinas una seguidilla de horribles crímenes perpetrados contra intelectuales, dirigentes y militantes cercanos a posiciones de izquierda. La opinión mas difundida es que esa banda criminal era dirigida por José López Rega. Pero este argumento entra en contradicción cuando a posteriori de su salida del país en julio de 1975 esas bandas criminales siguieron actuando aún con mas violencia.

Tampoco se puede analizar estos crímenes omitiendo el contexto de extrema violencia desarrollado por las organizaciones guerrilleras de izquierda que tenían como blanco a funcionarios de gobierno, sindicalistas, empresarios y miembros de fuerzas de seguridad y militares.

Todavía ni la investigación histórica, ni la judicial, ha podido profundizar sobre el accionar de estas bandas salvo en sitios puntuales como Córdoba, donde se demostró que el llamado Comando Libertadores de América (equivalente a Triple A ), era dirigido por militares del Tercer Cuerpo de Ejercito, Mar del Plata y La Plata donde opero el CNU (Concentración Nacional Universitaria) con protección de la policía provincial y la inteligencia militar detrás y Bahía Blanca el grupo vinculado al Rector de la UNS Remus Tetu.

Sobre las dudas todavía no aclaradas suelo citar al investigador Gonzalo Chavez quien fue militante montonero hasta los años 80 y además tiene dos familiares asesinados por la Triple A en La Plata. "No está probado que López Rega fuera el jefe máximo de la Triple A, ni tampoco que fuera su fundador (...) todo indica que la Triple A no era una organización estructurada nacionalmente con un jefe en la cúspide. Había, sí, una doctrina represiva nacional única, que orientaba y definía el accionar de los escuadrones de la muerte, conducida por los Comandantes en Jefe de las tres armas. El mando operativo se ejecutaba a través de la inteligencia de las Fuerzas Armadas, que aportaba logística, coordinación territorial".(...) prueba de ello es que cuando Lépez Rega se fue, la Triple A siguió operando". (...)

"Y es que la creación de la Triple A fue parte de la doctrina militar francesa. Está en los manuales de los militares argentinos que fueron adoctrinados en Francia y en las clases de los militares franceses que vinieron a la Argentina. (...) una de las cosas que más llaman la atención de la Triple A es que entre sus víctimas no hay ningún jefe guerrillero. «¿Por qué? Porque esa no era su misión. Su misión era otra: ir por la retaguardia. Porque la doctrina francesa postula que no hay que ir detrás de los combatientes sino golpear a la retaguardia, sacarle el agua al pez».

Es una falacia total adjudicar a Perón algún tipo de responsabilidad en los crímenes de la Triple A . El primero de los asesinatos firmado por la Triple A fue el de Rodolfo Ortega Peña, el 31 de agosto de 1974, al mes de fallecimiento del General Perón. Todavía hay muchas dudas y poca información fehaciente sobre el accionar de esta federación de bandas. Algunas de ellas seguiré desarrollando en próximas notas.

(*) Es autor de La Lealtad- Los Montoneros que se quedaron con Perón y Salvados por Francisco

Fuente: La Mañana de Neuquén