El juez que investiga las valijas que pasaron por Ezeiza estuvo en Lago EscondidoEl juez Pablo Yadarola, actual titular del Juzgado Nacional en lo Penal Económico N°2, vuelve a ocupar el centro de la escena. Esta vez, por ser el magistrado que investiga las presuntas irregularidades en el arribo al país de un avión privado vinculado al empresario Leonardo Scatturice, que llegó con diez valijas que no habrían sido sometidas a controles aduaneros.
Yadarola es un juez de bajo perfil, pero no ajeno a las controversias. Su nombre cobró notoriedad nacional en 2022 al formar parte de la polémica comitiva que viajó a Lago Escondido, propiedad del magnate británico Joe Lewis, en la Patagonia. En aquel viaje también participaron jueces federales, exagentes de inteligencia y altos ejecutivos del Grupo Clarín.
El episodio, revelado por una filtración de chats, derivó en una causa judicial por el presunto delito de dádivas. Aunque Yadarola y el resto de los involucrados fueron finalmente sobreseídos por el juez federal Sebastián Ramos, el caso dejó al descubierto un entramado de vínculos entre el poder judicial, medios de comunicación y servicios de inteligencia.
Una carrera judicial con exposición esporádica
Formado en la Universidad de Buenos Aires (UBA), Yadarola inició su carrera en los tribunales criminales de la Capital Federal y fue escalando posiciones hasta llegar, en 2002, a Comodoro Py, donde fue secretario en el Juzgado Federal N°12, entonces a cargo de Sergio Torres.
En el fuero penal económico, tuvo causas resonantes. Una de ellas fue la investigación por el ingreso en 2007 de una valija con casi 800 mil dólares proveniente de Venezuela, protagonizada por Guido Antonini Wilson. En ese expediente procesó al exministro Julio De Vido y al extitular de la AFIP, Ricardo Echegaray.
En 2018, encabezó operativos junto a la Aduana y agencias norteamericanas para el secuestro de armas de alto calibre ingresadas por correo. Un año más tarde, ordenó el decomiso de bienes millonarios vinculados al narcotráfico, entre ellos una Ferrari que había pertenecido a Diego Maradona.
Yadarola suele definirse como un juez técnico, reservado y ajeno a las operaciones políticas. No obstante, su participación en el viaje a Lago Escondido lo instaló de lleno en la discusión pública.
Del Lago Escondido a las valijas
La causa por las diez valijas no declaradas que habrían ingresado en un vuelo privado propiedad de Scatturice vuelve a ponerlo bajo la lupa. El hecho ocurrió en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza y generó sospechas por un posible uso irregular del sistema aduanero para facilitar el ingreso de equipaje sin control, una violación grave a la normativa vigente.
La designación de Yadarola como juez del caso generó inquietud entre sectores que cuestionan su independencia. La oposición política recordó su paso por Lago Escondido y su cercanía con figuras del poder judicial y mediático.
Pese a las críticas, el juez defendió su accionar en aquel viaje asegurando que "no hubo ninguna dádiva" y que todo el escándalo se originó en "espionaje ilegal" a través del hackeo de teléfonos celulares.
Un expediente con implicancias políticas
El caso de las valijas promete escalar. El avión pertenece a un empresario cercano a la administración nacional y la falta de controles pone en juego responsabilidades en organismos como Aduana y Migraciones.
Algunos sectores temen que la investigación pueda ser condicionada por los vínculos previos del magistrado, mientras que desde el entorno del juez sostienen que su historial lo respalda como un funcionario "técnico y riguroso".
Con antecedentes de peso en causas de contrabando y lavado de dinero, Pablo Yadarola deberá demostrar, una vez más, su imparcialidad en una investigación que podría involucrar a funcionarios, empresarios y estructuras sensibles del Estado.
El juez Pablo Yadarola, actual titular del Juzgado Nacional en lo Penal Económico N°2, vuelve a ocupar el centro de la escena. Esta vez, por ser el magistrado que investiga las presuntas irregularidades en el arribo al país de un avión privado vinculado al empresario Leonardo Scatturice, que llegó con diez valijas que no habrían sido sometidas a controles aduaneros.
Yadarola es un juez de bajo perfil, pero no ajeno a las controversias. Su nombre cobró notoriedad nacional en 2022 al formar parte de la polémica comitiva que viajó a Lago Escondido, propiedad del magnate británico Joe Lewis, en la Patagonia. En aquel viaje también participaron jueces federales, exagentes de inteligencia y altos ejecutivos del Grupo Clarín.
El episodio, revelado por una filtración de chats, derivó en una causa judicial por el presunto delito de dádivas. Aunque Yadarola y el resto de los involucrados fueron finalmente sobreseídos por el juez federal Sebastián Ramos, el caso dejó al descubierto un entramado de vínculos entre el poder judicial, medios de comunicación y servicios de inteligencia.
Una carrera judicial con exposición esporádica
Formado en la Universidad de Buenos Aires (UBA), Yadarola inició su carrera en los tribunales criminales de la Capital Federal y fue escalando posiciones hasta llegar, en 2002, a Comodoro Py, donde fue secretario en el Juzgado Federal N°12, entonces a cargo de Sergio Torres.
En el fuero penal económico, tuvo causas resonantes. Una de ellas fue la investigación por el ingreso en 2007 de una valija con casi 800 mil dólares proveniente de Venezuela, protagonizada por Guido Antonini Wilson. En ese expediente procesó al exministro Julio De Vido y al extitular de la AFIP, Ricardo Echegaray.
En 2018, encabezó operativos junto a la Aduana y agencias norteamericanas para el secuestro de armas de alto calibre ingresadas por correo. Un año más tarde, ordenó el decomiso de bienes millonarios vinculados al narcotráfico, entre ellos una Ferrari que había pertenecido a Diego Maradona.
Yadarola suele definirse como un juez técnico, reservado y ajeno a las operaciones políticas. No obstante, su participación en el viaje a Lago Escondido lo instaló de lleno en la discusión pública.
Del Lago Escondido a las valijas
La causa por las diez valijas no declaradas que habrían ingresado en un vuelo privado propiedad de Scatturice vuelve a ponerlo bajo la lupa. El hecho ocurrió en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza y generó sospechas por un posible uso irregular del sistema aduanero para facilitar el ingreso de equipaje sin control, una violación grave a la normativa vigente.
La designación de Yadarola como juez del caso generó inquietud entre sectores que cuestionan su independencia. La oposición política recordó su paso por Lago Escondido y su cercanía con figuras del poder judicial y mediático.
Pese a las críticas, el juez defendió su accionar en aquel viaje asegurando que "no hubo ninguna dádiva" y que todo el escándalo se originó en "espionaje ilegal" a través del hackeo de teléfonos celulares.
Un expediente con implicancias políticas
El caso de las valijas promete escalar. El avión pertenece a un empresario cercano a la administración nacional y la falta de controles pone en juego responsabilidades en organismos como Aduana y Migraciones.
Algunos sectores temen que la investigación pueda ser condicionada por los vínculos previos del magistrado, mientras que desde el entorno del juez sostienen que su historial lo respalda como un funcionario "técnico y riguroso".
Con antecedentes de peso en causas de contrabando y lavado de dinero, Pablo Yadarola deberá demostrar, una vez más, su imparcialidad en una investigación que podría involucrar a funcionarios, empresarios y estructuras sensibles del Estado.