Patagonia
Nadando hasta el glaciar Perito MorenoEl bonaerense cruzó el lago frente a la cara sur del glaciar Perito Moreno sin ningún tipo de soporte o protección térmica. Fueron 1,8 Km. en 24 minutos. El nadador expresó: No conocía el glaciar Perito Moreno, la primera vez que lo vi fue desde el agua y fue increíble.
Ayer a las 8:30, el bonaerense Rubén González pudo concretar el esperado cruce del brazo Rico del lago Argentino, desde la orilla SO, en paralelo a la cara sur del imponente glaciar Perito Moreno, a una distancia de seguridad de 200 metros de la pared. El nadador de aguas frías y abiertas recorrió una distancia de 1,8 Km. en 24 minutos, sin ningún tipo de soporte o protección térmica, con poco viento y una temperatura del agua cercana a los 8 grados. González fue entrenado y acompañado por la reconocida nadadora María Inés Mato, quien hace un par de años atrás fue la primera en realizar esta hazaña.
Inicialmente, acompañados por una embarcación y personal de Prefectura Naval Lago Argentino, Mato y González fueron hasta la zona para hacer un reconocimiento de las condiciones climáticas. En el lugar, sin un minuto que perder, Mato le aconsejó a González entrar al agua y hacer un entrenamiento para ver cómo se sentía. Luego de completar la hazaña, el nadador bonaerense comentó que la idea era nadar y probar frente al glaciar cómo estaban las condiciones, como me sentí cómodo y seguro, seguí adelante y pude completar el cruce completo, que era el gran objetivo de este viaje.
En este sentido, María Inés Mato agregó: Fue una decisión acertada, porque completado el cruce las condiciones empeoraron y ya no hubiéramos podido hacerlo. En ese caso, la opción era volver a intentarlo mañana.
La anécdota japonesa
Como dato de color, una embarcación con un grupo de turistas japoneses pasó al lado, justamente en el momento del cruce de González y, sin poder dar crédito a sus ojos, por unos minutos el glaciar pasó a un segundo plano. Los flashes de las cámaras le daban la espalda al glaciar, como pocas veces, retratando la hazaña del nadador de la provincia de Buenos Aires, auspiciado por el municipio de La Matanza.
Luego de la recuperación térmica, a minutos de salir del agua, Rubén González aseguró: Disfruté mucho el cruce, había un témpano gigante que tuve que esquivar. Al principio desde tierra me preocupó tener que sumar metros y tener que esquivarlo, pero desde el agua fue un momento increíble.
El bonaerense agregó: No conocía el glaciar Perito Moreno, la primera vez que lo vi fue desde el agua y fue increíble.
Acompañado por Alejandro Bórquez, subsecretario de Deportes de la Municipalidad de El Calafate, Rubén González se trasladó luego a las pasarelas, donde recibió el reconocimiento de turistas de diversas nacionalidades que se habían enterado del cruce a través de guías de turismo mientras viajaban hacia el parque nacional.
Diversos turistas le pidieron sacarse fotos con ellos, a lo que González accedió agradecido por el reconocimiento.
Como adelanto, el nadador manifestó: Tengo varios desafíos más en mente, no quiero adelantar ninguno antes de hablar con todo el equipo que me acompaña, pero definitivamente tengo ganas de sumar y encarar nuevos desafíos en esta disciplina.
Por último, el nadador agradeció el apoyo recibido: A la diputada nacional por el FPV de la provincia de Buenos Aires, María Esther Balcedo, que me apoyó en este viaje y en el cruce del Beagle; a la diputada nacional Ana María Ianni; a la Municipalidad de El Calafate y a la Subsecretaría de Deportes local; al Municipio de La Matanza, a todos muchas gracias.
Fuente: La Opinión Austral
El bonaerense cruzó el lago frente a la cara sur del glaciar Perito Moreno sin ningún tipo de soporte o protección térmica. Fueron 1,8 Km. en 24 minutos. El nadador expresó: No conocía el glaciar Perito Moreno, la primera vez que lo vi fue desde el agua y fue increíble.
Ayer a las 8:30, el bonaerense Rubén González pudo concretar el esperado cruce del brazo Rico del lago Argentino, desde la orilla SO, en paralelo a la cara sur del imponente glaciar Perito Moreno, a una distancia de seguridad de 200 metros de la pared. El nadador de aguas frías y abiertas recorrió una distancia de 1,8 Km. en 24 minutos, sin ningún tipo de soporte o protección térmica, con poco viento y una temperatura del agua cercana a los 8 grados. González fue entrenado y acompañado por la reconocida nadadora María Inés Mato, quien hace un par de años atrás fue la primera en realizar esta hazaña.
Inicialmente, acompañados por una embarcación y personal de Prefectura Naval Lago Argentino, Mato y González fueron hasta la zona para hacer un reconocimiento de las condiciones climáticas. En el lugar, sin un minuto que perder, Mato le aconsejó a González entrar al agua y hacer un entrenamiento para ver cómo se sentía. Luego de completar la hazaña, el nadador bonaerense comentó que la idea era nadar y probar frente al glaciar cómo estaban las condiciones, como me sentí cómodo y seguro, seguí adelante y pude completar el cruce completo, que era el gran objetivo de este viaje.
En este sentido, María Inés Mato agregó: Fue una decisión acertada, porque completado el cruce las condiciones empeoraron y ya no hubiéramos podido hacerlo. En ese caso, la opción era volver a intentarlo mañana.
La anécdota japonesa
Como dato de color, una embarcación con un grupo de turistas japoneses pasó al lado, justamente en el momento del cruce de González y, sin poder dar crédito a sus ojos, por unos minutos el glaciar pasó a un segundo plano. Los flashes de las cámaras le daban la espalda al glaciar, como pocas veces, retratando la hazaña del nadador de la provincia de Buenos Aires, auspiciado por el municipio de La Matanza.
Luego de la recuperación térmica, a minutos de salir del agua, Rubén González aseguró: Disfruté mucho el cruce, había un témpano gigante que tuve que esquivar. Al principio desde tierra me preocupó tener que sumar metros y tener que esquivarlo, pero desde el agua fue un momento increíble.
El bonaerense agregó: No conocía el glaciar Perito Moreno, la primera vez que lo vi fue desde el agua y fue increíble.
Acompañado por Alejandro Bórquez, subsecretario de Deportes de la Municipalidad de El Calafate, Rubén González se trasladó luego a las pasarelas, donde recibió el reconocimiento de turistas de diversas nacionalidades que se habían enterado del cruce a través de guías de turismo mientras viajaban hacia el parque nacional.
Diversos turistas le pidieron sacarse fotos con ellos, a lo que González accedió agradecido por el reconocimiento.
Como adelanto, el nadador manifestó: Tengo varios desafíos más en mente, no quiero adelantar ninguno antes de hablar con todo el equipo que me acompaña, pero definitivamente tengo ganas de sumar y encarar nuevos desafíos en esta disciplina.
Por último, el nadador agradeció el apoyo recibido: A la diputada nacional por el FPV de la provincia de Buenos Aires, María Esther Balcedo, que me apoyó en este viaje y en el cruce del Beagle; a la diputada nacional Ana María Ianni; a la Municipalidad de El Calafate y a la Subsecretaría de Deportes local; al Municipio de La Matanza, a todos muchas gracias.
Fuente: La Opinión Austral
Ayer a las 8:30, el bonaerense Rubén González pudo concretar el esperado cruce del brazo Rico del lago Argentino, desde la orilla SO, en paralelo a la cara sur del imponente glaciar Perito Moreno, a una distancia de seguridad de 200 metros de la pared. El nadador de aguas frías y abiertas recorrió una distancia de 1,8 Km. en 24 minutos, sin ningún tipo de soporte o protección térmica, con poco viento y una temperatura del agua cercana a los 8 grados. González fue entrenado y acompañado por la reconocida nadadora María Inés Mato, quien hace un par de años atrás fue la primera en realizar esta hazaña.
Inicialmente, acompañados por una embarcación y personal de Prefectura Naval Lago Argentino, Mato y González fueron hasta la zona para hacer un reconocimiento de las condiciones climáticas. En el lugar, sin un minuto que perder, Mato le aconsejó a González entrar al agua y hacer un entrenamiento para ver cómo se sentía. Luego de completar la hazaña, el nadador bonaerense comentó que la idea era nadar y probar frente al glaciar cómo estaban las condiciones, como me sentí cómodo y seguro, seguí adelante y pude completar el cruce completo, que era el gran objetivo de este viaje.
En este sentido, María Inés Mato agregó: Fue una decisión acertada, porque completado el cruce las condiciones empeoraron y ya no hubiéramos podido hacerlo. En ese caso, la opción era volver a intentarlo mañana.
La anécdota japonesa
Como dato de color, una embarcación con un grupo de turistas japoneses pasó al lado, justamente en el momento del cruce de González y, sin poder dar crédito a sus ojos, por unos minutos el glaciar pasó a un segundo plano. Los flashes de las cámaras le daban la espalda al glaciar, como pocas veces, retratando la hazaña del nadador de la provincia de Buenos Aires, auspiciado por el municipio de La Matanza.
Luego de la recuperación térmica, a minutos de salir del agua, Rubén González aseguró: Disfruté mucho el cruce, había un témpano gigante que tuve que esquivar. Al principio desde tierra me preocupó tener que sumar metros y tener que esquivarlo, pero desde el agua fue un momento increíble.
El bonaerense agregó: No conocía el glaciar Perito Moreno, la primera vez que lo vi fue desde el agua y fue increíble.
Acompañado por Alejandro Bórquez, subsecretario de Deportes de la Municipalidad de El Calafate, Rubén González se trasladó luego a las pasarelas, donde recibió el reconocimiento de turistas de diversas nacionalidades que se habían enterado del cruce a través de guías de turismo mientras viajaban hacia el parque nacional.
Diversos turistas le pidieron sacarse fotos con ellos, a lo que González accedió agradecido por el reconocimiento.
Como adelanto, el nadador manifestó: Tengo varios desafíos más en mente, no quiero adelantar ninguno antes de hablar con todo el equipo que me acompaña, pero definitivamente tengo ganas de sumar y encarar nuevos desafíos en esta disciplina.
Por último, el nadador agradeció el apoyo recibido: A la diputada nacional por el FPV de la provincia de Buenos Aires, María Esther Balcedo, que me apoyó en este viaje y en el cruce del Beagle; a la diputada nacional Ana María Ianni; a la Municipalidad de El Calafate y a la Subsecretaría de Deportes local; al Municipio de La Matanza, a todos muchas gracias.
Fuente: La Opinión Austral