El mundo

Mohamed Yeslem Beisat: “La causa de Malvinas es la misma que la del pueblo saharaui”

ENTREVISTA DE MARCELO GARCÍA.

Buenos Aires.

Especial para EES 115.

 

 

En pleno siglo XXI existen aún decenas de territorios en el mundo que siguen estando colonizados por otras naciones o por grandes potencias mundiales, y al mismo tiempo existen centenas de pueblos oprimidos en todo el planeta. Esta terrible situación de opresión, muerte y dominación llevó a Naciones Unidas a crear en 1961 el Comité Especial de Descolonización o Comité Especial de los 24, encargado de monitorear e impulsar el proceso de descolonización de los territorios no autónomos. Uno de esos pueblos-nación sojuzgados es el de los saharauis, de la antigua Sahara Occidental, quienes luchan por quitarse el yugo marroquí y poder ejercer libremente su autodeterminación como pueblo africano. En su paso por Buenos Aires, El Extremo Sur dialogó con Mohamed Yeslem Beisat, miembro del Secretariado Nacional Saharaui y Ministro Delegado para América Latina.

 

EES- ¿Cuál es el motivo de su visita a la Argentina?

MYB- He venido a recorrer los organismos oficiales del gobierno, los sindicatos y los partidos políticos buscando acompañamiento y apoyo a la causa Saharaui. Y la verdad es que nos esta yendo muy bien, obteniendo una muy buena receptividad del pueblo argentino. Somos pueblos amigos y nos sentimos muy acompañados por la Argentina.

 

EES- ¿La República Árabe Saharaui Democrática está reconocida por la comunidad internacional?

MYB- Hasta la actualidad hemos conseguido que 81 países reconozcan a la RASD y  desde 1984 somos miembros de la Unión Africana.

 

EES- ¿Es el pueblo saharaui una nación oprimida?

MYB- Sí, indudablemente que sí. Hace más de 100 años fuimos una colonia oprimida por España y ahora estamos siendo invadidos, reprimidos y avasallados por Marruecos. Sahara Occidental fue una colonia española desde 1885 hasta 1975, pero luego fuimos invadidos y oprimidos por Marruecos y Mauritania. En 1979 el Frente Polisario (Frente Popular para la Liberación de Saguia el Hamra y Río de Oro) derrotó a las fuerzas de ocupación de Mauritania y de esa manera recuperamos un tercio de nuestro territorio, pero aún persiste un 75% de tierras ocupadas por Marruecos.

 

EES- ¿Cómo dejaron de ser una colonia española?

MYB- El Ejército Popular de Liberación Saharaui (brazo armador del Frente Polisario) inició la lucha contra el colonialismo español en mayo de 1973, pero cuando murió el general Franco (el 20 de noviembre de 1975), España comenzó a abandonar el que era el Sahara Español, dejando a la deriva y sin organización la región. Fue ahí cuando nos invadieron y entramos en guerra con Marruecos y Mauritania. La República Árabe Saharaui Democrática (RASD) nació el 27 de febrero de 1976, el mismo día que el último soldado español abandonó nuestras tierras.

 

EES- ¿Marruecos construyó en la zona un muro como el de Palestina o el del ghetto de Varsovia?

MYB- El reino marroquí nos ha construido desde 1980, en seis etapas diferentes, un muro asesino con una longitud de 2.720 kilómetros. El muro esta custodiado por 160.000 soldados armados, 240 baterías de artillería pesada, más de 20.000 km de alambre de espinos, miles de blindados, millones de minas antipersonas prohibidas por las convenciones internacionales, radares de seguimiento satelital y unidades de asalto rápido para reprimir a nuestro pueblo. Con este Muro de la vergüenza Marruecos pretende anexar la mayor parte de nuestro territorio, convirtiendo a Sahara Occidental en un ghetto.

 

EES- ¿La violación de los derechos humanos es moneda corriente?

MYB- Lamentablemente nuestro país es constantemente agredido por Marruecos; hay violaciones permanentes de los derechos humanos. Desde hace más de tres décadas, gasta millones de dólares para humillar y oprimir al pueblo saharaui, atentando contra la población de las zonas ocupadas y los campamentos de refugiados, causándonos enormes pérdidas humanas y materiales. Hay violaciones permanentes de los derechos humanos y además los aviones bombardean gran parte del territorio para sembrar la muerte y el terror entre la población rural y diezmar el ganado.

 

EES- ¿Qué busca Marruecos al oprimir a los saharauis?

MYB- En realidad el reino de Marruecos siempre tuvo en mente una ambición expansionista y cuando España dejó de ejercer su dominación sobre el Sahara Occidental, el rey de Marruecos quiso apoderarse de todo nuestro territorio. Pero hemos resistido y reconquistado, a través del accionar del Frente Polisario, un tercio de nuestras tierras originales, donde se ha establecido una misión de paz de la ONU, que inclusive cuenta con Cascos Azules de la Argentina. Pero en el fondo de la ocupación está la apropiación de nuestros recursos pesqueros y las reservas naturales.

 

EES- ¿Qué tipo de riquezas existen en la zona?

MYB- Tenemos muy grandes minas de fosfatos, diversos metales y también contamos con yacimientos de petróleo y gas, pero una de las mayores riquezas que hay en nuestro territorio es la pesca. Las costas de Sahara Occidental (frente al Océano Atlántico) poseen enormes riquezas pesqueras y buena parte de nuestro pueblo vive de ellas. Marruecos se apoderó de casi todas nuestras riquezas naturales, robándonos lo que nos corresponde y utilizándolo para enriquecerse. En los últimos años hemos conseguido frenar muchos inversores europeos que eran engañados por Marruecos, a los que decían que ellos eran los dueños de los recursos naturales, y estamos intentando avanzar en acuerdos con la RASD.

 

EES- ¿Cree que hay similitudes entre el caso saharaui y el de las islas Malvinas?

MYB- Sí, claro. El caso de Malvinas es muy parecido al nuestro por la ocupación inglesa que padecen desde hace mucho los argentinos en las islas. Aunque hay dos diferencias fundamentales con nuestro caso. Por un lado, nosotros debemos soportar un ejército de ocupación altamente sofisticado y armado como les contaba anteriormente. Por el otro, en Malvinas están instalados desde hace muchos años los kelpers, lo cual hace que haya una población de civiles viviendo en el territorio ocupado.