De eso no se habla: nadie tiene propuestas para los 100.000 pobres ni los casi 13.000 indigentesLos precandidatos que se medirán el domingo casi no han planteado propuestas concretas para encarar las dos tareas más complejas que deberán enfrentar si llegan a la Gobernación de Chubut: bajar los altos indicadores de pobreza y contener la indigencia, que golpea a toda la provincia pero tiene su epicentro más preocupante en el Valle -a partir de los altísimos niveles revelados en Trelew y Rawson-. Los salarios provinciales perdieron frente a la inflación 17,3% de su poder adquisitivo desde 2016.
Qué modelo de provincia productiva y laboral se quiere desarrollar para mejorar los ingresos y la asistencia del Estado para cambiar el actual panorama en el terreno de la pobreza y la indigencia constituye el gran tema ausente en la campaña proselitista que vienen desarrollando los precandidatos de todos los partidos participantes en las PASO que se concretarán el próximo domingo 7 de abril.
Allí está la clave para buscar salidas a los acuciantes problemas de pobreza y desocupación que involucran a los chubutenses, que tienen en sus manos la hora de las urnas para decidir y elegir Justamente las propuestas vinculadas con esa realidad son las que brillan por su ausencia en una provincia rica en recursos naturales y con preocupantes indicadores sociales afectados por la crisis económica.
En Chubut ya no alcanza con tener un trabajo formal con ingreso mensual para escaparle a la pobreza, menos aún si se trata de los trabajadores estatales. Así quedó demostrado en el aumento salarial anunciado para los policías provinciales, quienes a pesar del incremento quedarán por debajo de la línea de pobreza.
Cómo bajar la pobreza y contener la indigencia, más allá de lo complicado que resulta disociar estos panoramas de las políticas nacionales, aparece como una carencia absoluta en las propuestas de campaña de los candidatos con miras a las PASO y las generales provinciales; ni qué hablar si se tiene en cuenta que uno de los contendientes es el actual gobernador Mariano Arcioni quien tiene responsabilidades ejecutivas en Chubut desde el fallecimiento de Mario Das Neves.
El duro golpe de la pobreza
Sólo en los aglomerados urbanos de Trelew/Rawson y Comodoro Rivadavia/Rada Tilly hay casi 100.000 pobres, así lo reveló el INDEC en su reciente medición de los datos correspondientes al segundo semestre del 2018. Es la cifra más para Chubut desde las nuevas publicaciones del organismo estadístico.
Los 99.367 pobres informados por el INDEC para la segunda mitad del año pasado se reparten en 50.216 personas bajo la línea de pobreza en Comodoro Rivadavia y Rada Tilly, a los que se suman los 49.151 pobres localizados en las ciudades de Trelew y Rawson.
En el segundo semestre de 2016 los pobres chubutenses eran 72.333 personas, descendieron a 63.360 en la segunda mitad de 2017 y cerraron el año pasado con los casi 100.000 ya mencionados.
Como consecuencia de la densidad poblacional de ambos aglomerados urbanos, las mediciones porcentuales arrojan datos completamente diferentes. En Trelew/Rawson los pobres alcanzan al 35,3% de la población mientras que en Comodoro Rivadavia/Rada Tilly el indicador involucra al 22% de la población.
Lo cierto es que a uno y otro lado del Chubut la pobreza creció fuertemente en la segunda mitad del año pasado, con un aumento de 7,8 puntos porcentuales en el Valle y 7,1% en el petrolero sur provincial.
Desolador panorama de la indigencia
La indigencia chubutense hunde en los bajos fondos de la supervivencia a 12.736 habitantes que no pueden comer ni alimentarse adecuadamente todos los días, a los que el Estado en todas sus vertientes debe asistir para facilitarle la subsistencia alimentaria y de hábitat; aunque muchas veces esa tarea la termina cumpliendo la solidaria caridad social, en ocasiones reconvertida en ONGs o comedores barriales.
Esa cifra correspondiente al segundo semestre del año pasado, se incrementó en 3.092 el número de personas que pueden comer diariamente respecto de la primera mitad del 2018; pero es casi un 50% mayor a los 8.465 indigentes registrados en la provincia en el segundo semestre del 2016. Los indigentes chubutenses se reparten en 6.725 localizados en Comodoro/Rada Tilly y otros 6.011 aferrados a sus miserias en Trelew/Rawson.
Mientras la indigencia de Comodoro/Rada Tilly saltó del 2,3 al 2,9% entre el segundo semestre del 2016 y el mismo período del 2018; en Trelew/Rawson el crecimiento fue mucho más significativo y pasó del 2,5 al 4,3% de la población.
Pérdida del poder adquisitivo
Aunque la faceta laboral será abordada en un artículo posterior, para muchos de los políticos en campaña los problemas de Chubut se resuelven generando empleo, pero los datos estadísticos muestran que los salarios promedios del sector privado chubutenses perdieron 17,3% de su poder adquisitivo desde 2016.
Este dato que se desprende de los relevamientos efectuados por el Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial (Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación) demuestra que la tarea no solamente consiste en generar fuentes de trabajo, sino que los salarios deben mejorar por encima de la inflación para poder llegar a fin de mes.
La depreciación de los salarios privados en Chubut provocó que en el promedio de los últimos años el retroceso fuera de 17,3%; con una pérdida de 9,5% en 2016, una pequeña apreciación de 2,5% en el 2017 y un nuevo derrumbe del poder adquisitivo en el 2018 que significó un retroceso del 10,3%; marcando la pérdida de salarios en los últimos tres años.
El promedio de ingresos privados provinciales fue de 48.323 pesos durante todo el año 2018, con aristas bien diferenciadas en los 18.691 pesos por mes que cobraron en promedio los trabajadores de la ganadería y agricultura (con una pérdida del 19,2%) frente a los 106.643 pesos mensuales que ganaron los obreros petroleros (con una depreciación del 1,8%).
En el medio, los trabajadores de hotelería y restaurantes apenas consiguieron promediar 21.525 pesos por mes (una retracción salarial de 29,9%), los empleados de comercio mayorista y minorista 32.394 pesos mensuales (con una pérdida de 14,8%) y los obreros de la construcción los 40.636 pesos mensuales (con una apreciación del 1,2%).
La canasta familiar llegó en enero a los 38.402 pesos en Comodoro Rivadavia y 35.351 pesos en Trelew y Puerto Madryn (para un grupo familiar de cuatro personas compuesto por dos adultos y dos chicos en edad escolar). Si los salarios provinciales no logran equiparar ese aumento y ganarle a la inflación, la tarea de enfrentar la pobreza y más aún la indigencia será una quimera, pero aún peor es que los políticos en campaña no mencionen estos temas y no tengan propuestas programáticas para encontrar las soluciones.
Los precandidatos que se medirán el domingo casi no han planteado propuestas concretas para encarar las dos tareas más complejas que deberán enfrentar si llegan a la Gobernación de Chubut: bajar los altos indicadores de pobreza y contener la indigencia, que golpea a toda la provincia pero tiene su epicentro más preocupante en el Valle -a partir de los altísimos niveles revelados en Trelew y Rawson-. Los salarios provinciales perdieron frente a la inflación 17,3% de su poder adquisitivo desde 2016.
Qué modelo de provincia productiva y laboral se quiere desarrollar para mejorar los ingresos y la asistencia del Estado para cambiar el actual panorama en el terreno de la pobreza y la indigencia constituye el gran tema ausente en la campaña proselitista que vienen desarrollando los precandidatos de todos los partidos participantes en las PASO que se concretarán el próximo domingo 7 de abril.
Allí está la clave para buscar salidas a los acuciantes problemas de pobreza y desocupación que involucran a los chubutenses, que tienen en sus manos la hora de las urnas para decidir y elegir Justamente las propuestas vinculadas con esa realidad son las que brillan por su ausencia en una provincia rica en recursos naturales y con preocupantes indicadores sociales afectados por la crisis económica.
En Chubut ya no alcanza con tener un trabajo formal con ingreso mensual para escaparle a la pobreza, menos aún si se trata de los trabajadores estatales. Así quedó demostrado en el aumento salarial anunciado para los policías provinciales, quienes a pesar del incremento quedarán por debajo de la línea de pobreza.
Cómo bajar la pobreza y contener la indigencia, más allá de lo complicado que resulta disociar estos panoramas de las políticas nacionales, aparece como una carencia absoluta en las propuestas de campaña de los candidatos con miras a las PASO y las generales provinciales; ni qué hablar si se tiene en cuenta que uno de los contendientes es el actual gobernador Mariano Arcioni quien tiene responsabilidades ejecutivas en Chubut desde el fallecimiento de Mario Das Neves.
El duro golpe de la pobreza
Sólo en los aglomerados urbanos de Trelew/Rawson y Comodoro Rivadavia/Rada Tilly hay casi 100.000 pobres, así lo reveló el INDEC en su reciente medición de los datos correspondientes al segundo semestre del 2018. Es la cifra más para Chubut desde las nuevas publicaciones del organismo estadístico.
Los 99.367 pobres informados por el INDEC para la segunda mitad del año pasado se reparten en 50.216 personas bajo la línea de pobreza en Comodoro Rivadavia y Rada Tilly, a los que se suman los 49.151 pobres localizados en las ciudades de Trelew y Rawson.
En el segundo semestre de 2016 los pobres chubutenses eran 72.333 personas, descendieron a 63.360 en la segunda mitad de 2017 y cerraron el año pasado con los casi 100.000 ya mencionados.
Como consecuencia de la densidad poblacional de ambos aglomerados urbanos, las mediciones porcentuales arrojan datos completamente diferentes. En Trelew/Rawson los pobres alcanzan al 35,3% de la población mientras que en Comodoro Rivadavia/Rada Tilly el indicador involucra al 22% de la población.
Lo cierto es que a uno y otro lado del Chubut la pobreza creció fuertemente en la segunda mitad del año pasado, con un aumento de 7,8 puntos porcentuales en el Valle y 7,1% en el petrolero sur provincial.
Desolador panorama de la indigencia
La indigencia chubutense hunde en los bajos fondos de la supervivencia a 12.736 habitantes que no pueden comer ni alimentarse adecuadamente todos los días, a los que el Estado en todas sus vertientes debe asistir para facilitarle la subsistencia alimentaria y de hábitat; aunque muchas veces esa tarea la termina cumpliendo la solidaria caridad social, en ocasiones reconvertida en ONGs o comedores barriales.
Esa cifra correspondiente al segundo semestre del año pasado, se incrementó en 3.092 el número de personas que pueden comer diariamente respecto de la primera mitad del 2018; pero es casi un 50% mayor a los 8.465 indigentes registrados en la provincia en el segundo semestre del 2016. Los indigentes chubutenses se reparten en 6.725 localizados en Comodoro/Rada Tilly y otros 6.011 aferrados a sus miserias en Trelew/Rawson.
Mientras la indigencia de Comodoro/Rada Tilly saltó del 2,3 al 2,9% entre el segundo semestre del 2016 y el mismo período del 2018; en Trelew/Rawson el crecimiento fue mucho más significativo y pasó del 2,5 al 4,3% de la población.
Pérdida del poder adquisitivo
Aunque la faceta laboral será abordada en un artículo posterior, para muchos de los políticos en campaña los problemas de Chubut se resuelven generando empleo, pero los datos estadísticos muestran que los salarios promedios del sector privado chubutenses perdieron 17,3% de su poder adquisitivo desde 2016.
Este dato que se desprende de los relevamientos efectuados por el Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial (Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación) demuestra que la tarea no solamente consiste en generar fuentes de trabajo, sino que los salarios deben mejorar por encima de la inflación para poder llegar a fin de mes.
La depreciación de los salarios privados en Chubut provocó que en el promedio de los últimos años el retroceso fuera de 17,3%; con una pérdida de 9,5% en 2016, una pequeña apreciación de 2,5% en el 2017 y un nuevo derrumbe del poder adquisitivo en el 2018 que significó un retroceso del 10,3%; marcando la pérdida de salarios en los últimos tres años.
El promedio de ingresos privados provinciales fue de 48.323 pesos durante todo el año 2018, con aristas bien diferenciadas en los 18.691 pesos por mes que cobraron en promedio los trabajadores de la ganadería y agricultura (con una pérdida del 19,2%) frente a los 106.643 pesos mensuales que ganaron los obreros petroleros (con una depreciación del 1,8%).
En el medio, los trabajadores de hotelería y restaurantes apenas consiguieron promediar 21.525 pesos por mes (una retracción salarial de 29,9%), los empleados de comercio mayorista y minorista 32.394 pesos mensuales (con una pérdida de 14,8%) y los obreros de la construcción los 40.636 pesos mensuales (con una apreciación del 1,2%).
La canasta familiar llegó en enero a los 38.402 pesos en Comodoro Rivadavia y 35.351 pesos en Trelew y Puerto Madryn (para un grupo familiar de cuatro personas compuesto por dos adultos y dos chicos en edad escolar). Si los salarios provinciales no logran equiparar ese aumento y ganarle a la inflación, la tarea de enfrentar la pobreza y más aún la indigencia será una quimera, pero aún peor es que los políticos en campaña no mencionen estos temas y no tengan propuestas programáticas para encontrar las soluciones.
