Pichetto, recargado por Macri, impulsa la planta nuclear para Sierra GrandeMiguel Pichetto comenzó su carrera política en Sierra Grande y es uno de los grandes impulsores de que se construya una central nuclear en esa ciudad rionegrina ubicada a 140 kilómetros de Puerto Madryn. El ahora compañero de fórmula de Macri insiste con el argumento de que su pueblo de origen "saldría de la actual depresión" con esa decisión. La obra se haría con capitales chinos. La ley provincial lo prohíbe, pero hace dos años el senador promovió un plebiscito que dijo que sí; aunque votó solo el 20%.
"Es una inversión que superará los 8000 millones de dólares, cinco veces más de lo que significó Hipasam para esta ciudad", expresó en su momento Miguel Angel Pichetto para intentar convencer a los habitantes de Sierra Grande de la importancia de construir allí una central nuclear.
Hipasam era la mina estatal que se desmanteló en los años 90, durante el menemismo, y que fue reactivada durante el kirchnerismo por MCC, empresa de capitales chinos que llegó a emplear a 580 personas en 2007.
La caída del precio del hierro en estos años macristas llevó al cierre de la mina, que hoy solo conserva a 58 operarios en tareas de mantenimiento.
Lo de la central nuclear surgió hace dos años por iniciativa del gobierno nacional que dijo contar con capitales asiáticos. Mauricio Macri estaba decidido a que la quinta planta nuclear del país se montara en la Patagonia, en el sur de Río Negro, a solo 140 kilómetros de Puerto Madryn.
Fuera de la ley
Una ley provincial prohíbe este tipo de iniciativas en Río Negro, por lo que Pichetto, junto al diputado nacional del PRO, Sergio Wiski, y al intendente Nelson Iribarren, hicieron campaña por un plebiscito que les diera respaldo para llevar luego el tema al Superior Tribunal de Justicia.
Puede decirse que fue una de las pocas victorias de Pichetto en las urnas, pero en realidad el resultado de aquel plebiscito del 17 de diciembre de 2017 no es como para inflar mucho el pecho.
Al no ser obligatorio, solo concurrieron a votar 1700 de los 6780 habitantes de la ciudad; apenas el 20%. El 83% de los que fueron a votar se expresaron a favor de la central nuclear, tema sensible en estos momentos en que está de moda la serie Chernobyl.
El hoy candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio pudo exhibir entonces ante quien ahora es su nuevo jefe que compartían intereses. No se sintió tan huérfano de respaldo desde el Gobierno nacional, como le había ocurrido en su reciente pasado.
Tres veces
Pichetto quiso ser gobernador en tres ocasiones durante el kirchnerismo y en todos los casos careció de respaldo desde Nación, donde siempre lo consideraron más un operador de mesa chica que un conductor político.
En 2007 perdió con el radical Miguel Saiz por 46 a 40 por ciento, mientras que en 2015 cayó por 52 a 33% ante Alberto Weretilneck. En 2011 había perdido la interna con Carlos Soria, quien luego sería gobernador durante apenas 20 días.
La última derrota en Río Negro le costó a Pichetto resignar la presidencia del PJ.
No obstante, condujo el bloque de senadores de la oposición llevándolo a apoyar varias decisiones de Macri. Eso hasta que Cristina Kirchner regresó al Senado en 2017. Pichetto creó el bloque Argentina Federal, adonde fueron a parar los dos senadores chubutenses: Mario Pais y Alfredo Luenzo. Ambos se mostraron disgustados con el paso reciente de PIchetto.
Nancy González, en cambio, eligió estar junto a la ex Presidenta en el bloque de Unidad Ciudadana, presidido por el neuquino Marcelo Fuentes.
Miguel Pichetto comenzó su carrera política en Sierra Grande y es uno de los grandes impulsores de que se construya una central nuclear en esa ciudad rionegrina ubicada a 140 kilómetros de Puerto Madryn. El ahora compañero de fórmula de Macri insiste con el argumento de que su pueblo de origen "saldría de la actual depresión" con esa decisión. La obra se haría con capitales chinos. La ley provincial lo prohíbe, pero hace dos años el senador promovió un plebiscito que dijo que sí; aunque votó solo el 20%.
"Es una inversión que superará los 8000 millones de dólares, cinco veces más de lo que significó Hipasam para esta ciudad", expresó en su momento Miguel Angel Pichetto para intentar convencer a los habitantes de Sierra Grande de la importancia de construir allí una central nuclear.
Hipasam era la mina estatal que se desmanteló en los años 90, durante el menemismo, y que fue reactivada durante el kirchnerismo por MCC, empresa de capitales chinos que llegó a emplear a 580 personas en 2007.
La caída del precio del hierro en estos años macristas llevó al cierre de la mina, que hoy solo conserva a 58 operarios en tareas de mantenimiento.
Lo de la central nuclear surgió hace dos años por iniciativa del gobierno nacional que dijo contar con capitales asiáticos. Mauricio Macri estaba decidido a que la quinta planta nuclear del país se montara en la Patagonia, en el sur de Río Negro, a solo 140 kilómetros de Puerto Madryn.
Fuera de la ley
Una ley provincial prohíbe este tipo de iniciativas en Río Negro, por lo que Pichetto, junto al diputado nacional del PRO, Sergio Wiski, y al intendente Nelson Iribarren, hicieron campaña por un plebiscito que les diera respaldo para llevar luego el tema al Superior Tribunal de Justicia.
Puede decirse que fue una de las pocas victorias de Pichetto en las urnas, pero en realidad el resultado de aquel plebiscito del 17 de diciembre de 2017 no es como para inflar mucho el pecho.
Al no ser obligatorio, solo concurrieron a votar 1700 de los 6780 habitantes de la ciudad; apenas el 20%. El 83% de los que fueron a votar se expresaron a favor de la central nuclear, tema sensible en estos momentos en que está de moda la serie Chernobyl.
El hoy candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio pudo exhibir entonces ante quien ahora es su nuevo jefe que compartían intereses. No se sintió tan huérfano de respaldo desde el Gobierno nacional, como le había ocurrido en su reciente pasado.
Tres veces
Pichetto quiso ser gobernador en tres ocasiones durante el kirchnerismo y en todos los casos careció de respaldo desde Nación, donde siempre lo consideraron más un operador de mesa chica que un conductor político.
En 2007 perdió con el radical Miguel Saiz por 46 a 40 por ciento, mientras que en 2015 cayó por 52 a 33% ante Alberto Weretilneck. En 2011 había perdido la interna con Carlos Soria, quien luego sería gobernador durante apenas 20 días.
La última derrota en Río Negro le costó a Pichetto resignar la presidencia del PJ.
No obstante, condujo el bloque de senadores de la oposición llevándolo a apoyar varias decisiones de Macri. Eso hasta que Cristina Kirchner regresó al Senado en 2017. Pichetto creó el bloque Argentina Federal, adonde fueron a parar los dos senadores chubutenses: Mario Pais y Alfredo Luenzo. Ambos se mostraron disgustados con el paso reciente de PIchetto.
Nancy González, en cambio, eligió estar junto a la ex Presidenta en el bloque de Unidad Ciudadana, presidido por el neuquino Marcelo Fuentes.
