Política

La doble sonrisa de Sastre: logró que Beliz se baje y avanza como interlocutor confiable del PJ

En la foto de los cinco dirigentes alrededor de una mesa, Alfredo Beliz no exhibe la mejor sonrisa, de la que sí hace gala en el abrazo con Alberto Fernández y que ilustró el comunicado de su renuncia, señalando que resignó su candidatura a diputado nacional dentro del decaído Frente de Arcioni en aras de la "unidad del peronismo". El frustrado candidato afirmó que "se trata de entender lo que requiere este momento histórico en nuestro país", donde "no es tiempo de dividir, sino de sumar"; aunque no menciona las promesas recibidas sobre el bidet.

Junto con Beliz, alrededor de la mesa en la que se tejió el viernes su renunciamiento hay cuatro dirigentes que dijeron "whisky" a la hora de la foto. Exhibieron sonrisas cortas el candidato a Presidente y el negociador camporista Eduardo Wado de Pedro, y más plenas se vieron en los rostros de Ricardo Sastre y Santiago Igon.

En el caso del diputado nacional que va por la reelección se entiende enseguida el volumen de su sonrisa casi sobradora, porque será el beneficiado directo tras la defección del inefable diputado del Parlasur que en las últimas PASO del partido que gobierna Chubut venció a Máximo Pérez Catán, el preferido de Mariano Arcioni.

Igon obtendrá la reelección como paradigmático modelo de un representante provincial en el Congreso que estuvo más atento a las demandas del sector político al que pertenece que a buscar cualquier tipo de alternativa concreta para que los habitantes de Chubut no padecieran en toda su magnitud las consecuencias de las medidas de ajuste de Mauricio Macri.

Ahora sí, sumando los votos que podría haber obtenido Beliz -que hasta último momento trató sumisamente de ir pegado a la boleta de Alberto F.-, Igon podría conseguir el objetivo de arrastrar hacia la Cámara de Diputados a la ignota Estela Hernández y al médico comodorense Carlos Catalá -quien sí puede exhibir el logro de haber estado entre lo mejor de las gestiones de Di Pierro y Linares en la gestión municipal comodorense, donde se desempeña como secretario de Salud-.

El que ríe último

Dos políticos provinciales no deben haber recibido con agrado la noticia de la defección de Beliz. Uno de ellos es Ignacio Torres, quien ahora ve peligrar la posibilidad de acceder al Congreso y hacerle compañía a Gustavo Menna, el gran derrotado en las elecciones para gobernador.

El otro que frunció el ceño fue Martín Buzzi, el ex ministro de Producción que se preocupaba "de qué va a vivir mi pueblo" antes de convertirse en el heredero de Mario Das Neves y que luego buscó su propio camino, llevado de la mano del grupo Indalo a la Casa Rosada que ocupaba Cristina Kirchner.

Ese gesto no solo le granjeó el repudio perpetuo de su mentor, familiares y allegados más directos, sino también de otros políticos que en 2011 ganaron sus distritos por contar con la bendición de Das Neves.

Uno de ellos fue Ricardo Sastre, el quinto de la foto difundida el viernes tras la confirmación de que Beliz no será candidato. Motivos no le faltan al intendente de Madryn y vicegobernador electo para exhibir su felicidad.

Por un lado, Sastre consiguió lo que no pudo Arcioni, a quien se le dificultaba el diálogo con el candidato a diputado de su espacio justamente porque había apostado por su rival en la interna.

Entonces no podía cumplir con el mandado que le encargaron los dirigentes nacionales del peronismo al que ahora adscribe el escribano que decidió incursionar en política hace cuatro años, luego de haber interactuado con ellos en el pasado en otros menesteres.

Sastre empieza a ser considerado como el hombre fuerte de Chubut ante los ojos de los que seguramente gobernarán el país a partir de diciembre. Para él fue más sencillo dialogar con Beliz porque apoyó su precandidatura, junto a su par de Trelew Adrián Maderna y el dirigente petrolero Jorge Ávila.

Quien conducirá la Legislatura de Chubut dentro de un par de meses siempre se ha mostrado como un dirigente abierto al diálogo que ha sabido conservar en estos años con no pocos funcionarios del macrismo, como Rogelio Frigerio (n) y Guillermo Dietrich.

Resulta evidente que en su ciudad se concentraron muchos intereses del gobierno nacional, como el desarrollo de parques eólicos que motivaron la presencia del propio Macri en un par de oportunidades.

Días de furia

Pese a las penurias económicas generales -que por ejemplo alcanzaron largamente a Maderna, quien vio con impotencia cómo su ciudad pasaba a ser la que tenía más pobres y desocupados en la Patagonia-, el segundo gobierno como intendente de Puerto Madryn fue mucho más aliviado para Sastre. Sobre todo a partir de la muerte de Das Neves, el 31 de octubre de 2017.

El ahora negociador privilegiado ante el peronismo nacional se abrió en su momento del kirchnerismo junto a Das Neves, dándole vida al partido PROVECh. Se sabe que a través de esa "creación" se buscaba en la pasada década alcanzar una mayoría parlamentaria de dos tercios en la Legislatura. Esa mayoría fue imprescindible por ejemplo para eyectar al procurador Eduardo Samamé, un ex diputado provincial de la UCR que se dedicó a analizar con celo excesivo cada movimiento de Das Neves.

Sastre fue diputado provincial por el PROVECh, aunque llegó por primera vez a la intendencia de Puerto Madryn a través del ahora olvidado Modelo Chubut que hizo a Buzzi gobernador.

La ciudad del Golfo se convirtió en su momento en el bastión por excelencia del dasnevismo, al que Buzzi tuvo a pan y agua durante mucho tiempo, granjeándose el encono de Sastre y Luis Tarrío. Tarrío fue el hombre al que se debió apelar en la Secretaría de Hacienda para que mantuviera las cuentas ordenadas dentro de lo posible con recursos propios, ya que la coparticipación provincial solía llegar con demoras y descuentos.

Cosecharás tu siembra

Ahora Buzzi padece la gestión de Sastre, que posibilitó el renunciamiento de Beliz. Su boleta como candidato a intendente de Comodoro se recortó al máximo. Él tampoco pudo conseguir ir pegado a Alberto Fernández, pese a los mensajes que envió a través del canal de noticias C5N y a aquel abordaje que le hizo en el estudio de la emisora logrando que el presidenciable pidiera a los comodorenses que lo avalaran con el voto.

Ni con ese respaldo pudo llegar a los dos dígitos. En las PASO del 11 de agosto quedó detrás de Juan Pablo Luque, Guillermo Almirón, Ana Romero y los votos en blanco.

Sin embargo, Buzzi hizo cuentas y creyó que mejorando un poco su performance podría alcanzar al menos una banca en el Concejo Deliberante. No le importaron las pullas por aspirar a ello luego de haber sido intendente y gobernador. Aún es joven y cree que tiene un largo futuro si permanece en la escena política, y evalúa que el Concejo comodorense le permitirá lucirse; aunque sea como un intelectual que da testimonio de la pobreza argumentativa de sus pares.

Además, siempre contará con el respaldo del sindicato petrolero y de Cristóbal López; a quien lealmente visitó más de una vez en el penal de Ezeiza a diferencia de muchos que se beneficiaron de la caja y la influencia del empresario y luego lo desconocieron como Judas.

Con la decisión de Beliz no solo corre riesgo su última aspiración, sino que si Buzzi finalmente se presenta podría hacer posible que llegue al Concejo el representante de alguna fuerza no prevista. Gastón Fuentealba, por ejemplo.

El atleta es el candidato del Polo Social, pero tiene el plus de ir pegado en boleta larga a la candidatura presidencial de Roberto Lavagna que en las PASO quedó detrás de Buzzi.

Lo más probable, es que en las próximas horas Buzzi también anuncie que no se presentará en las elecciones del 27 de octubre. Si lo hace, dirá también que primero está la Patria y segundo el movimiento; ése al que llegó de la mano de Di Pierro durante la gestión municipal de Marcelo Guinle en el último lustro del siglo pasado.