Política

Barbato, avaricia y enriquecimiento: por pegarle a una mujer dejó la gerencia de Lotería del Chubut

Carlos Barbato está a punto de ir a juicio por enriquecimiento ilícito. Fue un alto funcionario durante todos los gobiernos de Das Neves y sobrevivió a la purga implementada por Arcioni cuando quedó al frente del Ejecutivo. Curiosamente, recién le aceptaron la renuncia cuando lo denunció una empleada por violencia de género y luego de que el ministro Massoni dijera que también a habían "constatado" lesiones en la mujer pero también en el denunciado Barbato.

El 4 de enero de 2016, Carlos Alberto Barbato anunciaba que presentaría una denuncia contra su antecesor en el cargo, Alberto Vargas, afirmando que había defraudado al Instituto de Asistencia Social (IAS) en 175 millones de pesos durante el gobierno de Martín Buzzi.

Barbato acababa de asumir en el cargo del brazo de Mario Das Neves, con quien estaba desde 2003 cuando se hizo cargo de la gerencia general del organismo que tiene a su cargo la realización del Telebingo, la compra y entrega de premios y diversas contrataciones por montos significativos, así como la relación con las agencias que se distribuyen a lo largo y ancho de la provincia.

Contrataciones directas e incompatibilidades diversas se le reprochaban al escurridizo y ubicuo Vargas, alguien que supo ser secretario privado de Das Neves en su primer mandato hasta verse involucrado en oscuros episodios policiales ocurridos en Comodoro y terminar de perder la confianza con el trigobernador cuando se reveló como abnegado abanderado de la reelección de Buzzi.

Tendrá que justificar

Al parecer Barbato no tenía las manos limpias cuando denunciaba a Vargas, de acuerdo a lo que se conoció en los últimos meses y mientras aguarda la decisión del juez de Garantías, Gustavo Castro, acerca de si le abre una investigación por presunto enriquecimiento ilícito.

Se trata de un delito en donde se invierte la carga de la prueba; es decir que debe ser él quien acredite cómo hizo para acumular tantos bienes con un salario como funcionario público. El último sueldo que se le conoce era de poco más de 100 mil pesos.

Barbato no está solo en la causa que instruyen los fiscales Omar Rodríguez y Alex Williams. También irían a juicio su ex esposa, Erica Griselda Perrone, y su ex chofer, Adrián Quinteros, aunque estos como presuntos "testaferros".

"Desde 2003 a la fecha, el ciudadano Carlos Albero Barbato se viene desempeñando como funcionario público. En fecha 12/12/03 ingresó a la administración pública en el cargo de Gerente General del Instituto de Asistencia Social. Luego, a partir de diciembre del año 2007 ocupó el cargo en el Ministerio de Coordinación de Gabinete. Posteriormente en el periodo 2011-2015 cumplió funciones en la Legislatura de la Provincia de Chubut. Finalmente, por Decreto nro. 27/15, en fecha 11/12/2015 se lo designó en el cargo de presidente del Instituto de Asistencia Social, cargo que ocupó hasta el 5/7/2019, fecha en que por decreto 742/19 se le aceptó la renuncia al cargo aludido", sostienen los fiscales al preguntarse cómo hizo entonces el ex funcionario para adquirir tamaña fortuna.

Además, tienen probado que Erica Perrone siempre fue "ama de casa", hasta julio de este año cuando tuvo la suerte de poder acceder a un puesto en la administración pública con un salario de 31 mil pesos.

Compradores compulsivos

Barbato, su ex esposa y el chofer aparecen involucrados en al menos dos hechos que configurarían delitos. El primero involucra solo al matrimonio y se relaciona con su patrimonio: una casa de dos plantas de Playa Unión valuada en casi 10 millones de pesos, además de automóviles de alta gama y cuatriciclos, entre otros vehículos.

En forma detallada, los fiscales describen que solo en 2016 -el año en que llamativamente denunciaba a Vargas-, Barbato adquirió un Cuatri marca Can-Am, por un monto 232.000 pesos; otro Cuatri marca Gama por un monto de 190.000; un Ford Mondeo por 538.025 y un Ford Fiesta en 302.500 pesos, percibiendo el ex funcionario durante ese año un salario promedio de 76.500 pesos, habiendo comprado vehículos por un monto de 1.262.500 pesos.

En 2017 la pareja compra un lote ubicado en la villa balnearia de Playa Unión por un monto de 200.000 pesos; un Ford Kuga en 786.807 que fue permutado este año por un BMW Modelo 418-X1- 207, modelo 2013 con dominio LZX-548, el cual pertenecía a Rodrigo Lasaga, quien además le entregó una suma de 350.000 pesos.

Hace dos años, la pareja compró una camioneta marca Chevrolet, modelo S10 modelo 2017, que registró a su nombre y que fue pagada con dinero en efectivo por un monto de 545.000 pesos. Cabe destacar que el sueldo promedio del nombrado en 2017, según las constancias obrantes, era de 88.103 pesos.

En febrero de 2019 Barbato adquiere un vehículo tipo todo terreno denominado UTV, marca Artic Cat, de 700 centímetros cúbicos, en la firma que giraba bajo la razón social "El Trébol Motos", por el cual abonó un total de 450.000 pesos en efectivo.

En mayo adquirió una camioneta marca Chevrolet modelo S10, año 2017, por 566.000 pesos, siendo su titular anterior Guillermo Martín González.

En abril último, Erica Perrone compró una camioneta Marca Nissan, modelo Murano, año 2013, dominio NDT-410, abonando un monto de 590.000 pesos con dinero en efectivo.

A seguro lo llevaron preso

El segundo hecho que involucra a la pareja también incluye a su ex chofer, Quinteros, ya que pusieron a su nombre uno de sus vehículos y luego lo llevaron a firmar un poder para que la pareja pudiera cobrar el seguro correspondiente a un accidente que protagonizó su hijo Laureano.

El 23 de agosto de 2018, Barbato adquirió un Audi dominio LHV-731 cuyo titular era José Carlos Barcelona. Dicha operación se materializó en el domicilio de Barbato y Perrone, Soler 1643 del Barrio Cooperativa de Trelew.

El vendedor recibió a cambio en parte de pago un cuatri marca Can-am y 180.000 pesos en efectivo.

"A los fines de mantener oculta la operación de compra-venta, y que dicho rodado no aparezca dentro del patrimonio de Barbato, el nombrado se valió de Adrián Quinteros como persona interpósita, quien en fecha 23 de agosto del mismo año inscribió dicho rodado a su nombre, otorgando en idéntica fecha autorización para conducir el vehículo aludido a Carlos Barbato, Erica Perrone y el hijo de ambos, Laureano Barbato", expusieron los fiscales.

Un hecho que ocurrió ocho meses después develaría otro costado del ex funcionario: su codicia. El 23 de abril de este año dicho vehículo era conducido por su hijo Laureano cuando sufrió una colisión con destrucción total.

En consecuencia, siendo que el titular del vehículo era Adrián Quinteros, con fecha 28/05/2019, ante el escribano público Nicolás Caucich, el empleado provincial de Barbato firmó un poder especial a favor de Erica Perrone "para que actuando en su nombre y representación, con las más amplias facultades que fueran necesarias y exigibles, realice los siguientes actos: cobre y perciba de la compañía de seguros Rivadavia la indemnización de 528.000 pesos, correspondiente a la cobertura amparada por póliza de la compañía".

La compañía aludida informó que en fecha 11 de junio de 2019 se efectuó un pago a Erica Perrone por la suma de 528.000 pesos.

"De lo expuesto surge que Barbato ideó dicha ingeniería jurídica para incorporar bienes a su patrimonio sin que pueda ser detectado por los órganos de control. Para dicha adquisición apreciable e injustificable, acudió a la colaboración de testaferros, como es el caso de Quinteros, a fin de que figure como titular del rodado en el registro de la propiedad del automotor. A su vez nuevamente se sirvió de su pareja Erica Perrone, quien prestó su nombre a fin de materializar el cobro indemnizatorio el cual finalmente ingresó al patrimonio del ex funcionario y de la nombrada", concluyen los fiscales.

La lectura de Massoni

La investigación que pretenden llevar a juicio los fiscales que ya consiguieron su propósito con la banda que conformaba la denominada causa "Embrujo" pondría de manifiesto nuevamente la falla total de los controles estatales respecto de quienes lo integran.

Barbato fue uno de los sobrevivientes de la purga dasnevista instrumentada por Arcioni y solo dejó su gobierno cuando una empleada de Lotería lo denunció por violencia de género luego de un confuso episodio ocurrido a mediados de junio último en Corcovado, en vísperas de una nueva edición del Telebingo.

En esa oportunidad quien salió a dar las explicaciones oficiales del caso fue el inefable Federico Massoni, quien como ministro Coordinador dijo: "tenemos constatado que hubo lesiones en la mujer y en Barbato".