Política

Las prioridades de Arcioni son habilitar la minería y reducir regalías a Comodoro, que ya está en guardia

La minería no había sido postergada en la agenda, como algunos creyeron, y un funcionario cercano a Arcioni y Cambareri lo dejó en claro de manera brutal. El gobernador y algunos ministros se empezaron a mostrar abiertamente en modo prominero, mientras en Comodoro surge cierto recelo en cuanto a la forma en que desde Rawson se le mostrará a Nación que ya entendieron que no todo es viajar a Buenos Aires y acusar la herencia recibida.

Si con alguien se podría comparar a Mariano Arcioni hasta esta semana era con Raúl Simoncini, el intendente de Comodoro entre 2003 y 2007. Es que compartían ese estilo de esperar que Nación le resolviera todos los entuertos, sea por incapacidad o por comodidad.

"No sabía que yo tenía que hacer el seguimiento; me hubieran avisado", le respondió alguna vez el comodorense que hoy vive en Mar del Plata al ministro Julio de Vido cuando le reprochó demoras en la obra de la doble trocha entre la ciudad petrolera y Caleta Olivia.

En tanto, el comodorense que hoy reside donde esté a salvo de "escraches" culminó su primer gobierno echándole la culpa a Macri de su delicada situación financiera, que lo llevó a pagar haberes en cuotas y en donde recién esta semana pudo completar el aguinaldo de 2019. Todavía se desconoce cuándo se empezará a abonar el mes de diciembre, aunque hay posibilidades de que el viernes 17 se les acredite a los estatales que ganan hasta 40 mil pesos.

Para ello, Arcioni ya empezó a dar pruebas de haber entendido que esta vez deberá poner mucho de su parte para que en Nación lo atiendan. La mayoría de los deberes les resultarán antipáticos a sus coterráneos. ¿Pero qué opción tiene?

Dime cómo lo dices y te diré qué eres

Carlos Relly lo dijo de una manera brutal, pero fue sincero y unas horas después el propio gobernador salió públicamente a ratificar que "lo de la minería" no quedó en el olvido como equivocadamente algunos pudieron creer luego del traspié sufrido por el gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez.

No se autorizarán explotaciones en Esquel, ni se utilizará cianuro sino xantato -una especie de jabón carbonatado también cuestionado por los ambientalistas-, pero en la meseta chubutense ya empiezan a palpitar que la demanda de los jefes comunales liderados por Mario Pichiñan se halla en vías de concreción.

Sumergidos en el olvido, y sin alternativas a la vista generadas por su dirigencia, poco les importa si su economía se reactivará solo un año, o un poco más, y cuál será el saldo final. Lo mismo pasa en el Valle, donde estiman que podrían convertirse en proveedores de insumos mineros y aliviar así sus propias finanzas.

En el pasado reciente, tanto en Trelew como en Madryn mantuvieron latente el tema minero a través de dirigentes políticos y de sindicalistas amigos de la actividad que fueron invitados a San Juan para ver in situ cómo funciona la extracción que genera desconfianza y cuestionamientos en todos los sitios del tercer mundo donde se la lleva a cabo. Como complemento estuvo el aporte económico de Pan American Silver, claro está.

El seudo acontecimiento que presentó a gente haciendo cola para anotarse con el fin de acceder a un puesto en la actividad ayudaron a mantener el tema en agenda, conscientes de que más temprano que tarde las circunstancias obligarían a jugar esta carta que muy probablemente tenga costos políticos y trunque carreras de no pocos que hoy se consideran llamados a grandes epopeyas en Chubut.

Y dale con Comodoro

En tanto, desde Comodoro se elevan voces -unas más serias, otras caricaturescas- a favor de la minería, con el remanido ejemplo propio de haber convivido con una forma de la minería -la extracción petrolera- que ha sido generadora de la riqueza que actualmente convierte a la Cuenca del Golfo San Jorge en la casi exclusiva proveedora de recursos para una provincia en virtual default.

El secretario de Coordinación de Gabinete Carlos Relly lo dijo crudamente: "Vivo en Comodoro Rivadavia, en donde hay miles de agujeros y una contaminación manejada".

No fue lo único que expresó este ex diputado radical que fuera expulsado de su partido por votar justamente una ley vinculada con la minería hace 12 años. También aseguró que "el Estado controla y nosotros podemos controlarlo", lo cual puede ser relativizado, y también dio por hecho que los habitantes de Esquel acompañarán la iniciativa dado que a ellos particularmente no los afectará y además una nueva ley ratificará la prohibición de explotar la minería en esa parte de la provincia.

Toda una declaración de principios macristas de Relly, quien se sinceró cuando fue urgido por un grupo de estatales que le reclamaba cobrar el sueldo del mes pasado y las actualizaciones pendientes de la cláusula gatillo.

Se quieren ganar el aumento

Pero la minería no ha sido lo único reactivado esta semana por la administración de Arcioni. Pendiente aún el aumento salarial que pretendía el gobernador para él mismo y sus funcionarios, no han renunciado al mismo pese a lapidarias encuestas que señalan que no es hora de andar pensando en el bolsillo propio cuando no pueden asegurar un cronograma de pagos a empleados públicos y jubilados locales.

Por si acaso, así como hizo Relly con la minería algunos ministros tratan de hacer méritos. Por ejemplo Eduardo Arzani -Medio Ambiente- se activó con la planta de tratamiento de líquidos cloacales de Rada Tilly, aunque dice que no es de su incumbencia solucionar el tema del camino Perón.

En tanto, Leandro Cavaco ya dejó de pensar en viajes a Barcelona y se puso al frente de un análisis de la reducción de aportes patronales por zona desfavorable, mientras el propio Arcioni recordó este viernes que lo de la Agencia de Recaudación iba en serio, por más que le hayan pedido al abogado Miguel Díaz Vélez que deje de hablar del tema.

Es que el ex candidato a diputado nacional de Cambiemos en 2015 parece ser el elegido para instrumentar métodos de recaudación impositiva en Chubut que aporten fondos genuinos al Tesoro provincial, que hasta ahora solo depende de las regalías petroleras y de la coparticipación de impuestos que cada vez es menor desde que Nación empezó a hacer efectivos los descuentos por anticipos que vienen de la época en que Arcioni empezó el camino de la reelección a comienzos de 2019.

Por entonces, le insinuaba a Macri que podría ser su aliado en las últimas elecciones, antes de que Sergio Massa se sumara al Frente de Todos y cuando era "indistinto" para el gobernador de Chubut si el próximo presidente era el que estaba o Alberto Fernández.

Hace siete meses, Arcioni razonaba igual que el cordobés Juan Schiaretti, con la diferencia de que sus espaldas eran menos anchas.

Arcioni busca un Rodríguez Larreta

El jueves estuvo en Comodoro el ministro de Gobierno, José María Grazzini, quien tiene obviamente mayor volumen político que sus antecesores y por ello está en condiciones de plantear temas que pueden erosionar ciertas relaciones.

Más allá de la gacetilla oficial, es factible que con Juan Pablo Luque -un amigo de larga data- haya conversado sobre el futuro de la minería en Chubut, aunque también de otros temas que podrían afectarle los ingresos a la ciudad petrolera en un futuro no muy lejano.

Ya Arcioni le reprochaba en su momento a Carlos Linares que le reclamara obras siendo que él administraba el municipio más rico de la provincia. En el presupuesto en vigencia el gobernador ratificó su mirada al asignarle a esta ciudad fondos solo para construir un jardín de infantes y el postergado puente a Caleta Córdova, más allá de la insólita afirmación del miércoles de que también proyecta para la ciudad petrolera una escuela en el barrio Abásolo, la 160, que ya funciona allí desde hace más de tres décadas.

En materia de salud, Arcioni destinó a Comodoro una exigua suma para el Hospital Regional y nada al Alvear, como tampoco al nosocomio de Rada Tilly.: tal como informara El Extremo Sur.

Hoy la lupa del ministro de Economía Oscar Antonena se posa sobre los puntos extra que se consiguieron para Comodoro a partir de la Ley de Hidrocarburos sancionada durante los gobiernos de Martín Buzzi en Provincia y de Néstor Di Pierro en la ciudad petrolera.

Una reducción de esta índole debería ser tratada en la Legislatura. Allí la Cuenca del Golfo San Jorge cuenta solamente con siete diputados, cuatro de los cuales responden a Chubut al Frente. Claro que la mitad está conformada por los petroleros Carlos Gómez y Emiliano Mongilardi, quienes difícilmente simpaticen con una posible ley de esta índole.

Por otra parte, se viene dilatando una reunión del Consejo de Responsabilidad Fiscal en la cual podría haber nueva redistribución de ingresos entre los municipios.

Más allá de que ahora le compensen con subsidios al transporte alguna erogación propia, el municipio petrolero se organizó de tal modo que solo el 40% de su presupuesto es para sueldos -la mitad de lo que se le va a Provincia en tal rubro- y eso ya está debidamente registrado en el gobierno nacional, donde el intendente de Comodoro -una de las capitales alternativas que Alberto Fernández designó en campaña- empieza a tener llegada directa a ministros como Martín Guzmán, el mismo que elegantemente les dijo a Arcioni y Antonena que no todo es cuestión de sentarse a esperar los desembolsos de Nación.

En cercanías del Presidente hay comodorenses lúcidos que tienen un pormenorizado registro de lo que ocurrió en la provincia en los últimos años. Son los aliados con los que Luque cuenta para no convertirse en el Rodríguez Larreta de Arcioni.