Política

Coronavirus y caos: ¿Quién es responsable de que en Trelew y Rada Tilly no cumplan con el aislamiento?

El mensaje del presidente Alberto Fernández fue claro el último jueves cuando mencionó cómo deben administrarse las regiones del país donde circula el virus en forma comunitaria. Incluso mencionó a la ciudad de Trelew. Sin embargo, en la ciudad del Valle todo sigue como estaba, y el último fin de semana se presenciaron escenas fuera del protocolo de los cuidados a que obliga la pandemia. En Rada Tilly, en tanto, ya se registraron 5 casos en apenas tres días.

El nuevo decreto nacional que rige desde el lunes 8 de junio hace referencia explícita al departamento Rawson de la provincia de Chubut, que alcanza a la ciudad capital y a las localidades de Trelew y Playa Unión.

La norma establece la continuidad de la cuarentena estricta en las localidades comprendidas en estos departamentos, aunque se aclara allí que "cada Provincia tiene la potestad de flexibilizarla en caso de localidades incluidas que se mantengan aisladas y no cuenten con transmisión comunitaria del virus". Sería el caso de Rawson y Playa Unión; no de Trelew.

En la ciudad que gobierna Adrián Maderna se reportó el primer caso el jueves 30 de abril. Unos días más tarde apareció el segundo, vinculado con el del comerciante de 69 años que se había paseado por clínicas sin medida alguna de prevención y que aún permanece internado en terapia intensiva. Nunca se estableció quién lo contagió.

En el reporte diario del Ministerio de Salud que conduce el cada vez más vilipendiado Fabián Puratich, a ambos casos ya se los da por "recuperados", aunque aún deben lidiar con los desencadenados a partir del martes 26 de mayo, que son 12 en total.

Un caso para Sam Spade o Philip Marlowe

Todo comenzó con el taxista de 46 años que obligó a la clausura de una parada. Un par de días más tarde se reportaron tres casos vinculados y el sábado 30 de mayo hubo otros dos, aunque ya aquí uno de ellos presentaba una fuente de contagio distinta. Un joven con todos los síntomas declaró haber estado con alguien que venía de una zona de circulación de la Covid 19, a quien hasta ahora no se individualizó.

Hay que aclarar que tampoco se estableció cómo el taxista contrajo el virus, por lo cual hasta el fin de semana anterior ya había en Trelew tres nexos distintos que no estaban identificados.

Mientras se descontaba que la ciudad retrocedería de fase en virtud de los 6 casos en 5 días, la semana pasada comenzó prácticamente sin alteraciones. Solo se le pusieron límites a las reuniones familiares y a las salidas de esparcimiento.

El martes 2 de junio se conoció un nuevo caso; el de un menor hijo de un policía cuyo nexo tampoco está identificado. Dos días más tarde se conocieron tres casos vinculados con él -uno de ellos un nene de 1 año y medio de edad- y el sábado 6 otro par, supuestamente relacionados con el hijo del policía.

A esta altura resulta complicado seguir el hilo de los contagios porque ya comienza a haber reticencia con respecto a las precisiones de parte de quienes parecen no tenerlas, sumado a la crisis desatada el fin de semana con las asambleas y amenazas de renuncias por parte de autoridades sanitarias a raíz de que los que iban a ser los primeros terminan siendo los últimos a la hora de cobrar sus salarios de hace dos meses.

En tanto, como en la canción de Serrat, Puratich se hace presente en las asambleas y ajeno a los reproches para que se defina como "trabajador o funcionario", está a un tris de levantar el puño izquierdo y llamar "camaradas" a los que ningunea el mismo gobierno que él integra como ministro.

La ciudad está tranquila

Con 12 casos de Covid 19 en igual cantidad de días -sumados a que existen al menos cuatro fuentes de contagio no identificadas- no debería haber sorprendido entonces la mención del presidente Alberto Fernández de la ciudad de Trelew como zona de circulación del virus. Lo que sí debería sorprender -y por qué no alarmar- es que en la ciudad que gobierna Adrián Maderna todo haya seguido como era entonces.

En las redes no fueron pocos los vecinos de esa ciudad que este fin de semana se preguntaban si era más peligroso salir a correr por zonas descampadas -lo cual no puede hacerse- que asistir a las ferias símil "saladitas" que se habilitaron sábado y domingo, donde ajena a todo protocolo la gente tocaba productos y prendas e incluso se llegaba a probar estas últimas.

No es ajena a esta situación la falta de autoridad de Mariano Arcioni, acentuada desde que se le juntaron dos masas salariales sin pagar y se le rompió el bloque de diputados, yéndose más de la mitad a tomar otro aire.

Tres de los disidentes responden políticamente a Adrián Maderna, el intendente de Trelew, la ciudad patagónica que más padeció las políticas neoliberales de Mauricio Macri.

Pobreza y desempleo crecieron exponencialmente en esa ciudad en el último lustro y mientras dirigentes radicales se suman con entusiasmo a culpar al Coronavirus de todos los males, Arcioni suscribe por conveniencia propia. Después de todo, él también dejó hacer y hasta analizó la idea de hacer una alianza con Macri cuando a éste aún lo sustentaba el relato.

Antón Pirulero, cada cual atienda su juego

Puntualmente, puede decirse que a medida que pasaba la cuarentena todo se volvía más permisivo en las ciudades más importantes de Chubut, donde quizás un punto de inflexión fue aquel fallo de la jueza Mirta Moreno haciendo lugar a los habeas corpus en contra de la violación de derechos constitucionales.

Desde entonces, el ánimo de Federico Massoni y los hermanos Gómez ya no fue igual. No se podía salir a cazar a quienes "carancheaban", ni retenerlos en los centros de detención que aún añora el jefe de Policía.

Además, el ministro de Seguridad se mostraba entusiasta con la idea de volver al gimnasio el lunes 1, lo cual no prosperó a raíz de la proliferación de infectados. Mientras su vínculo con el gobernador ya no se muestra muy sólido, el pedido de juicio político que sobre él pesa precipitaría su salida en cuestión de días. Tampoco hay que olvidar aquel sonado operativo "humo luminoso" del martes 19 de mayo que dejó herido a un importante aliado y sostén de Arcioni.

En paralelo, la autoridad que puertas adentro exhibía un gobernador sin casos de Coronavirus se precipitó ante la ola de contagios en el Valle y la rebeldía del intendente de Madryn, Gustavo Sastre, que decidió mantener abiertos los comercios en su ciudad entre el miércoles 27 de mayo y el martes 2 de junio. Mientras tanto, sus pares de Trelew, Gaiman, 28 de Julio, Pirámides y Rawson aceptaban la medida dispuesta por el gobernador luego de escuchar a su ministro de Salud.

Aunque hoy parezca lejano, aquello tuvo lugar luego del caso del taxista, que arrastraría la ola de una docena de contagios en similar cantidad de días.

A menos de dos semanas de esta medida que pocos deben recordar ante la cantidad de acontecimientos que se desatan diariamente en la provincia, muchos menos deben poder establecer si se cumplió fehacientemente. Lo más probable es que no. Oficialmente, ningún funcionario provincial expresó nada al respecto, ni siquiera para comunicar que la medida se levantaba.

El anuncio conjunto de aquella noche del 26 de mayo entre Arcioni y Maderna en Rawson -luego de haber estado ambos en Comodoro ese día- fue una medida discutida porque el intendente se negaba a cualquier restricción, pero al final pesó más el criterio del gobernador, aunque solo durara un suspiro.

La decisión de Gustavo Sastre de limitar solo reuniones familiares y salidas recreativas, permitiendo las comerciales, alentó al resto de autoridades municipales de la zona a atender su propio juego, ante la pasividad de un Arcioni que por esas horas priorizaba la realización de la sesión legislativa para avalar el crédito que le permitiera pagar parte de los haberes atrasados en la administración pública.

A río revuelto, gana el más decidido

A esta altura es más que evidente que ni en Trelew, ni en Rada Tilly, se está cumpliendo con lo que establece el decreto nacional para zonas donde circula el virus o se multiplican los casos en cortos periodos.

Este último es el caso de la villa balnearia que gobierna el macrista Luis Emilio Juncos. Allí se reportó el primer caso el viernes 5 de junio: un hombre de 53 años que "repatrió" a su hijo de la Ciudad de Buenos Aires en el último vuelo que hasta ahora arribó a Comodoro Rivadavia, el del domingo 24 de mayo.

Un día más tarde se difundieron los contagios de su esposa, hijo y nuera, por lo que sumaron cuatro casos en dos días, que pasarían a cinco con el confirmado el domingo.

Mientras se busca a los pasajeros que compartieron aquel vuelo, el número de infectados podría crecer en las próximas horas, ayudado por el relajamiento exhibido por no pocos ciudadanos que creen que el virus perdió fuerza, cuando no se permiten directamente dudar de los reportes oficiales; como reflejan las redes.

Rada Tilly había diseñado un cronograma de aperturas que no modificó, ni piensa hacerlo. En la villa balnearia solo falta el regreso de las clases para retomar la normalidad.

Como quedó claro cuando se anunció el pase a fase 3 de cuarentena el 27 de abril, para flexibilizar actividades debe existir un protocolo elaborado por los municipios. En el caso de Trelew resulta claro que no se cumple.

Sin embargo, es el Gobierno provincial el que debe aprobar las medidas que elevan los intendentes, además de verificar que se correspondan con lo que realmente ocurre en cada ciudad con la circulación del virus. Así como al principio la cuarentena fue una aliada de Arcioni, en las últimas dos semanas se ha convertido en otro escollo para su errática política de gobierno.