Política

Issa Pfister: "Invertimos más de $180 millones en la pandemia, y en abril asistimos a 15.000 familias"

Entrevista de Marcelo García.

Germán Issa Pfister, secretario de Economía de la Municipalidad de Comodoro Rivadavia, fue el responsable de las cuentas del municipio más grande de Chubut durante la gestión de Carlos Linares -que finalizó con un superávit de unos $2.000 millones sobre un presupuesto anual de $12 mil millones- y se convirtió en miembro clave del gabinete de Juan Pablo Luque en esta triple crisis causada por la pandemia, la situación petrolera y la caída de la demanda. En diálogo exclusivo con El Extremo Sur, remarcó que el Municipio "lleva invertidos cerca casi $180 millones en la pandemia, incluyendo ayuda social, salud, apoyo a las Pymes e inversiones en hospitales". "La salida fácil hubiese sido decir que esos gastos son de competencia provincial", afirma, para destacar que "el intendente nunca quiso enfocar de quién era la responsabilidad de los problemas sino encarar las soluciones con nuestros recursos".

- ¿Cómo están las cuentas públicas del Municipio frente a la doble crisis generada por la pandemia y la baje del precio del petróleo?

- Tal como decís se trata de una crisis de efectos dobles o triples, porque no se trata solamente de la pandemia sino también de la generada en la situación petrolera y la baja de la demanda. Si no hubiese pasado nada de la pandemia también estaríamos viviendo una crisis de la economía local; esa combinación de crisis general y la particular del sector petrolero complica la situación de la ciudad y el Municipio.

- ¿Se debe tener en cuenta un tercer ítem de crisis como la económica que se viene arrastrando desde 2018 y a la que se sumaron los recortes en obra pública y subsidios durante el anterior Gobierno nacional de Mauricio Macri?

- Eso es así. Independientemente de eso la situación del Municipio es buena, aunque estamos en un estado de alerta y preocupación. En la gestión del temporal en la gestión anterior fue más fácil medir las consecuencias; en este caso la variable indefinida del tiempo hace más compleja las proyecciones.

- ¿Cuánto han bajado los ingresos municipales?

- Tenemos una reducción aproximada interanual del 35% y eso va variando de acuerdo a cada impuesto, aunque en el caso de las regalías es aún mayor. El Municipio puede soportar esta baja de ingresos por dos meses y hasta por tres meses; aunque no podemos soportar una baja del 35% de los ingresos durante un largo período de tiempo. Poder soportar esta crisis va a depender de cuánto se extienda, pero tengo claro que a nosotros nos encontró con bastante fortaleza. Me preocupó mucho que a principios de julio a medidas que se abren comercios y se autorizan más actividades el panorama de la primera mitad del mes está bajando entre un 10 y 15% entre quincenas. Si se empeora lo que ya viene siendo un nivel malo de recaudación, las cosas se van a complicar mucho más aún.

- ¿En qué se basa esa fortaleza municipal?

- Actuamos rápido cuando se inició la emergencia. Automáticamente hicimos un stop, redefinimos prioridades y se trazaron tres grandes rubros. La asistencia y ayuda social a quienes se vieron más perjudicados cuando fue la cuarentena total. La asistencia sanitaria, haciendo mucho hincapié en la situación de la provincia, comprando el equipamiento para la detección por PCR y reactivos, los insumos de bioseguridad o los respiradores. La tercera pata de este esquema fue la ayuda a las Pymes locales, ya que se decidió destinar 60 millones de pesos en créditos en préstamos blandos con una tasa del 12% anual y seguramente lo incrementaremos, reducciones y eximiciones impositivas, prórroga de plazo de vencimiento de Ingresos Brutos y otras medidas adicionales. Además, estamos haciendo un análisis profundo en cada uno de los gastos del Municipio, para hacer eficientes los gastos y determinar cuestiones prioritarias.

- ¿De cuánto son los plazos fijos?

- Yo siempre los reparto en tres sectores. Teníamos alrededor de 2.000 millones de pesos totales, de los cuales 1.000 millones están calzados con la obra pública y son los que están sosteniendo esa actividad en la actualidad. Entre 500 y 600 millones los teníamos disponibles para alguna urgencia que pudiera surgir y la otra mitad era para modificaciones presupuestarias que se hicieron y se irán ejecutando en la mitad del año. Si tenemos un presupuesto anual de 12.000 millones, teníamos los fondos correspondientes a dos meses.

- ¿Qué rol jugaron los plazos fijos que posee el Municipio en este escenario?

- Hoy ese respaldo financiero de la gestión anterior nos está ayudando para tener los sueldos pagados al día y haber cancelado los aguinaldos en tiempo y forma, además de no deberle a los proveedores de servicios y de obra pública. También hemos podido cumplir con el contrato de recolección de residuos y con el de transporte público, a pesar de que la Provincia no ha cumplido en lo más mínimo y lo hemos podido soportar con recursos propios. Hoy estamos en una situación de tranquilidad respecto a la economía y las finanzas del Municipio, pero estamos en alerta por las bajas que seguimos teniendo.

- ¿Cuántos fondos se llevan invertidos por la pandemia?

- Entre las tres líneas, que incluyen la social, salud y apoyo a las Pymes, debemos estar cerca de los 180 millones de pesos. El ítem de las exenciones impositivas y prórrogas de impuestos es difícil de cuantificar. No son gastos, pero sí ingresos que vamos a dejar de tener.

- ¿La mayoría fue destinada al tema de la Salud?

- Hay que tener en cuenta que 60 millones de pesos fueron destinados al apoyo de la Pymes, otro tanto a la Salud y un tercio similar para la ayuda social.

- ¿Cómo se han achicado las regalías petroleras?

- En enero y febrero recibimos 120 millones de pesos en concepto de regalías petroleras; en el mes de junio recibimos solamente 60 millones.

- ¿Qué se redujo más, las regalías o la recaudación de impuestos municipales?

- Las regalías han caído un 50% aproximadamente y los impuestos en el rubro comercial otro porcentaje similar.

- ¿Qué ingreso espera que se recupere más prontamente?

- Me parece que hoy podríamos estar recuperando más rápidamente las regalías que los demás impuestos. Quizás hace un par de meses no se veía así, pero quizás va a mejor marcha la recuperación de la actividad petrolera que los demás rubros.

- ¿En los ingresos generados por el petróleo las expectativas están puestas en el impacto del barril criollo o en la recuperación incipiente de la actividad en la ciudad y la región?

- Hoy no se trata de un problema de precio -ya que el barril ronda por encima de los 40 dólares- sino más bien de actividad por la caída de la demanda mundial del crudo. Claramente son las dos variables más importantes. El tipo de cambio nos acompaña con sus pequeñas alzas, pero hoy la mayor incidencia está dada por el nivel de actividad a partir de los anuncios de PAE (Pan American Energy) y el paulatino aumento de la demanda a nivel mundial.

- ¿Van a tener paciencia con el sector comercial para el cobro de impuestos?

- Nosotros sabemos claramente quiénes son los contribuyentes de cada actividad que pueden pagar y quienes son los no que pueden, especialmente por los efectos de la situación actual. Tenemos que ser justos con los que siempre pagan y ahora no pueden cumplir, pero no ser contemplativos con los que pueden pagar.

- Hay sectores a los que la cuarentena no los ha perjudicado como a la mayoría, en especial los del ámbito alimenticio. Quizás han vendido más que en la pre pandemia. ¿Se les piensa pedir un esfuerzo tributario extra o especial?

- Es un muy buen tema, que inclusive está bajo análisis. Uno trata de buscar el equilibrio ya que hoy el Estado tiene que estar más presente que exigiendo. Es un tema a analizar para conseguir una redistribución entre los que están mejor y los que la están pasando realmente mal; pero por lo menos requiere un análisis.

- ¿Hay algún formato que se esté analizando?

- Por ahora no.

- ¿Cuáles son las responsabilidades que asumió el Municipio frente a la pandemia pero que en realidad le correspondían a la Provincia?

- Hay dos cuestiones. Una de gastos y utilización de recursos que nosotros no íbamos a escatimar cuando se puso en juego la salud de la gente. No hubo ninguna cuestión que se nos haya pedido, ni en equipamiento de bioseguridad para el personal de salud o los respiradores. Fue una decisión del intendente, que ahora nos pidió que compráramos seis respiradores más y lo haremos con fondos municipales, totalizando 12 respiradores adquiridos. A eso se le deben sumar los 8 millones de pesos para el arreglo del Hospital Alvear o las inversiones que estamos concretando en el Hospital Regional. La salida fácil hubiese sido decir que esos gastos son de competencia provincial y sin embargo se tomó la decisión firme de acompañar con fondos propios. Hay una sola ventanilla para atender la asistencia social y ahí tampoco escatimamos recursos, aunque muchas de esas cuestiones son de competencia propia y otras salimos a solucionarlas producto de la necesidad.

- ¿Llegará la hora de pasarle factura al Gobierno provincial?

- Ese es un tema que definirá Juan Pablo (Luque), pero no lo puso arriba de la mesa en ningún momento. Cuando empezó la pandemia me llamó y me dijo que me iba a hacer requerimientos y que le dijera qué se podía y que no. Valoro mucho la actitud del intendente de no estar viendo de quién era la responsabilidad de estos problemas, sino que encaramos las soluciones que podíamos y se destinaron todos los recursos que hacían falta para disminuir las consecuencias que se hubieran producido si no hubiésemos estado presentes.

- El ministro Antonena decía la semana pasada que no iba a dar aumentos para los empleados públicos y que no se harían negociaciones paritarias. ¿Eso mismo sucederá en Comodoro con los municipales?

- Hablar de un aumento salarial paritario es de una irresponsabilidad enorme, porque los recursos están en baja y no se sabe por cuánto tiempo se va extender la emergencia sanitaria. Lo mismo sucede en el sector privado. Hoy la prioridad debe ser mantener las fuentes de trabajo, y en eso tenemos que trabajar todos para que no se pierdan empleos. El Municipio como empleador no escapa a las generales de la ley. Los gremios son muy responsables y tenemos una relación madura y responsable, habiendo cerrado una muy buena paritaria el año pasado con el adicional de los pases a planta. Este es un momento en que no se puede y cuando se pueda lo haremos; sin ponerle fecha. Hoy estamos en una situación de austeridad y defendemos el trabajo que hace el personal municipal. De movida no hemos instrumentado reducciones salariales, salvo para el personal político; tampoco estamos pagando de manera escalonada. El aguinaldo lo pagamos a mediados de junio y en una sola cuota.

- ¿Cómo se conjuga esa austeridad que afectará la capacidad de compra de los salarios si la inflación rondaría el 40% anual?

- Tenemos la expectativa de que la inflación de este año sea menor a ese porcentaje, más allá de que hoy ronda en esa cifra que menciona. Después veremos que los aumentos que no se puedan dar este año los analizaremos para el año que viene, para que no vea resentido el poder adquisitivo de los municipales. Lamentablemente en los momentos de crisis se producen estas consecuencias para el sector asalariado.

- ¿Cuáles serán los ejes económicos y productivos para la salida de la pandemia en Comodoro?

- Nosotros veníamos trabajando en un programa serio de diversificación productiva, con el polo tecnológico y la perspectiva a 10 años en el sector del turismo, también considerando el tema pesquero y la diversificación. Tenemos que trabajar en serio, más allá de lo que significa el sector petrolero para Comodoro, apuntando a la diversificación y la ampliación del producto de nuestra ciudad.

- ¿Se espera un fuerte crecimiento de la desocupación en la ciudad?

- No. Sinceramente creo que el sector petrolero influye mucho, tanto de manera directa como indirecta, pero tengo expectativas de que no tengamos un impacto muy grande.

- ¿Cómo se movió la demanda social en los barrios más necesitados?

- Tuvimos un incremento que se multiplicó casi por 7 u 8 en los primeros meses del aislamiento total. Muchos de los que generan sus recursos en el día a día y nunca habían requerido ayuda municipal. Llegamos a asistir en abril a casi 15.000 familias. Aunque ahora estamos retornando a los niveles previos al aislamiento, quizás no volvamos a esos niveles. Hoy estamos en más del doble de la demanda que teníamos antes de la pandemia.

- ¿Se avanzó respecto de lo que había que reparar y mejorar producto del temporal?

- Las obras hídricas que iban a venir del Gobierno nacional y nunca llegaron las estamos licitando con presupuesto propio como el pluvial de 90 millones de pesos, junto a algunas cuestiones de reservorios de las que ahora se haría cargo este nuevo Gobierno nacional.

- Quedaron algunas familias varadas en los trailers del Barrio Laprida.

- La semana pasada inauguramos algunas soluciones habitacionales que pudimos darle a esta gente y algunos todavía están esperando las viviendas que se comprometió a construir Provincia.