Polémica en Comodoro por la posibilidad de que los comercios tengan horario corridoEl titular del gremio de Empleados de Comercio, José González, llegó hasta el intendente Juan Pablo Luque buscando su apoyo. Los empleadores argumentan que hay "hábitos arraigados en la población que harían inviable económicamente facilitar el horario corrido".
Todo comenzó en la Legislatura, en la sesión del 23 de julio. Allí los diputados aprobaron un proyecto impulsado por la diputada mercantil Gabriela de Lucía para establecer el horario corrido en los comercios. Será de 9 a 19.30 y regirá hasta el 31 de diciembre, exceptuando Navidad y Año Nuevo.
"Es un proyecto de ley que vela por la salud y la vida de los trabajadores ya que es uno de los rubros más expuesto con respecto atención al público, teniendo aún algunas locales sin transporte público, y el mismo invita a los municipios adherir", expresó la diputada De Lucía.
De inmediato surgieron voces a favor y en contra de la iniciativa. En Comodoro el martes quedaron claras las posiciones.
Todo ahorro es un aumento
El secretario general del gremio, el histórico José González, se mostró a favor del cambio en el horario, para que sea corrido, y llegó hasta el municipio buscando el apoyo del intendente Juan Pablo Luque.
"Nos había invitado el intendente para conocer nuestra opinión, la cual se la hemos dado, favorable al horario corrido. Vamos a tratar de hacer una reunión en conjunto con la Cámara de Comercio", sostuvo.
El titular del Centro Empleados de Comercio (CEC) expresó que el horario corrido "al trabajador le favorece porque va a pagar dos boletos diarios de colectivo -en lugar de cuatro como en muchos casos-; va a tener menos inconvenientes de contagio en el transporte público; podrá llegar más temprano a su hogar; estar más tiempo con sus familias y todas estas cuestiones que hacen a una nueva normalidad en el sistema de trabajo".
Para González, "ahorrar dos boletos diarios es como un aumento encubierto", considerando que también habría beneficios para las empresas que ahorrarían gastos en energía y seguridad, por ejemplo.
Así está bien
Desde la Cámara de Comercio aseguran que la medida generaría acumulación de clientes entre las 18 y las 19:30, además de que -a su juicio- también acarrearía problemas a los propios trabajadores.
Según le dijo al diario El Patagónico el secretario de la Cámara de Comercio, Alexis Tögel, adherir a la ley significaría que la gente se reúna en las puertas de los comercios, lo que iría contra las medidas sanitarias.
"Creemos que no corresponde adherir a esta ley porque a las 18 comienza el horario fuerte de atención. Teniendo en cuenta que cuando hay actividad petrolera, la mayoría de los que van y vuelven en el día salen a hacer las compras después de las 18, eso congestionaría mucho al público en una franja horaria y sería contraproducente a lo que estamos haciendo", afirmó.
Para el vocero de la Cámara de Comercio local, la medida también generaría complicaciones para los propios empleados, ya que "si en una familia hay dos personas que trabajan en los comercios, tendrían el mismo horario e imposibilidad para hacer sus propias compras; o cuando comiencen las clases se dificultaría enviar los chicos al colegio".
Siempre pensando en el bolsillo del trabajador, Tögel afirma que "otra cuestión es que si bien es verdad que lo que dice el Centro de Empleados de Comercio de que los trabajadores se ahorrarían dos pasajes de colectivo, se podría generar otro gasto más porque tendrían que comprar viandas para comer en el local, por lo cual es mucho más costoso".
Tras señalar que "sabemos que puede ser beneficioso en muchos casos", el directivo indicó que "en cada rubro y en cada sector hay diferencias para llevarlo a cabo".
Asimismo, Tögel destacó que desde la Federación Empresaria de Chubut (FECh) solicitaron que se declare inconstitucional la ley porque "no está dentro de su área de reglamentación el horario".
El titular del gremio de Empleados de Comercio, José González, llegó hasta el intendente Juan Pablo Luque buscando su apoyo. Los empleadores argumentan que hay "hábitos arraigados en la población que harían inviable económicamente facilitar el horario corrido".
Todo comenzó en la Legislatura, en la sesión del 23 de julio. Allí los diputados aprobaron un proyecto impulsado por la diputada mercantil Gabriela de Lucía para establecer el horario corrido en los comercios. Será de 9 a 19.30 y regirá hasta el 31 de diciembre, exceptuando Navidad y Año Nuevo.
"Es un proyecto de ley que vela por la salud y la vida de los trabajadores ya que es uno de los rubros más expuesto con respecto atención al público, teniendo aún algunas locales sin transporte público, y el mismo invita a los municipios adherir", expresó la diputada De Lucía.
De inmediato surgieron voces a favor y en contra de la iniciativa. En Comodoro el martes quedaron claras las posiciones.
Todo ahorro es un aumento
El secretario general del gremio, el histórico José González, se mostró a favor del cambio en el horario, para que sea corrido, y llegó hasta el municipio buscando el apoyo del intendente Juan Pablo Luque.
"Nos había invitado el intendente para conocer nuestra opinión, la cual se la hemos dado, favorable al horario corrido. Vamos a tratar de hacer una reunión en conjunto con la Cámara de Comercio", sostuvo.
El titular del Centro Empleados de Comercio (CEC) expresó que el horario corrido "al trabajador le favorece porque va a pagar dos boletos diarios de colectivo -en lugar de cuatro como en muchos casos-; va a tener menos inconvenientes de contagio en el transporte público; podrá llegar más temprano a su hogar; estar más tiempo con sus familias y todas estas cuestiones que hacen a una nueva normalidad en el sistema de trabajo".
Para González, "ahorrar dos boletos diarios es como un aumento encubierto", considerando que también habría beneficios para las empresas que ahorrarían gastos en energía y seguridad, por ejemplo.
Así está bien
Desde la Cámara de Comercio aseguran que la medida generaría acumulación de clientes entre las 18 y las 19:30, además de que -a su juicio- también acarrearía problemas a los propios trabajadores.
Según le dijo al diario El Patagónico el secretario de la Cámara de Comercio, Alexis Tögel, adherir a la ley significaría que la gente se reúna en las puertas de los comercios, lo que iría contra las medidas sanitarias.
"Creemos que no corresponde adherir a esta ley porque a las 18 comienza el horario fuerte de atención. Teniendo en cuenta que cuando hay actividad petrolera, la mayoría de los que van y vuelven en el día salen a hacer las compras después de las 18, eso congestionaría mucho al público en una franja horaria y sería contraproducente a lo que estamos haciendo", afirmó.
Para el vocero de la Cámara de Comercio local, la medida también generaría complicaciones para los propios empleados, ya que "si en una familia hay dos personas que trabajan en los comercios, tendrían el mismo horario e imposibilidad para hacer sus propias compras; o cuando comiencen las clases se dificultaría enviar los chicos al colegio".
Siempre pensando en el bolsillo del trabajador, Tögel afirma que "otra cuestión es que si bien es verdad que lo que dice el Centro de Empleados de Comercio de que los trabajadores se ahorrarían dos pasajes de colectivo, se podría generar otro gasto más porque tendrían que comprar viandas para comer en el local, por lo cual es mucho más costoso".
Tras señalar que "sabemos que puede ser beneficioso en muchos casos", el directivo indicó que "en cada rubro y en cada sector hay diferencias para llevarlo a cabo".
Asimismo, Tögel destacó que desde la Federación Empresaria de Chubut (FECh) solicitaron que se declare inconstitucional la ley porque "no está dentro de su área de reglamentación el horario".
