El ministro de Educación de la Nación Nicolás Trotta visitó el martes la provincia de Chubut, donde se reunió por separado con el gobernador Mariano Arcioni, los gremios del sector y funcionarios educativos locales. La intención fue "restablecer el diálogo" en medio del sostenido conflicto por atrasos salariales. Sin embargo, ni la guardia policial dispuesta por la administración provinciales pudo evitar el escrache de un grupo de docentes que buscaban hacerle llegar su reclamo por sueldos adeudados al grito de "nos deben tres meses".
Al retirarse de la conferencia de prensa en la que comentó su diálogo con Arcioni y funcionarios provinciales, Trotta fue abordado por un grupo de docentes. Hubo forcejeos, empujones e insultos hacia Trotta, que se vio desbordado.
Arcioni lo respaldó a través de su cuenta de Twitter al asegurar que "la intolerancia y el escrache no pueden ser modelos de un reclamo genuino y sincero, donde el diálogo y el respeto siempre deben prevalecer. Ese fue el espíritu de toda la recorrida del Ministro de Educación de la Nación en nuestra provincia, trabajando juntos por la educación".
La visita del ministro de Educación no había sido contemplada hasta que se visibilizó el reclamo para que "no se olvide de Chubut". Lejos de apaciguar los ánimos, los focos de la visita se los llevó el escrache hacia el ministro.
"Sabemos los problemas que está atravesando Chubut y por eso nos reunimos con todos en un ámbito de discusión horizontal y encontramos vocación de diálogo, que seguirá la semana próxima cuando el gobernador Arcioni se reúna con los dirigentes sindicales", anunció Trotta.
Enumeró que "mantuvimos reuniones con las organizaciones sindicales, con el ministro de Gobierno (José María Grazzini) y Arcioni, tras lo cual se anunció la convocatoria para la semana próxima a todos los sindicatos docentes para establecer el diálogo y establecer un marco de respuestas posibles".
Chubut mantiene un conflicto salarial desde hace más de tres años, por lo que en la suma de los últimos tres ciclos lectivos no se llegó a los 180 días de clases que se pide como mínimo para un solo período.
Desafíos "complejos"
"Tenemos que encontrar la respuesta a desafíos complejos", definió Trotta, quien pidió a los sectores "construir confianza entre todas las partes para desarrollar la agenda común porque todos se mostraron conscientes de la responsabilidad que tenemos y el desafío que todos nuestros niños y maestros y maestras y auxiliares puedan volver a la escuela y en eso hay consenso".
"Me llevo la impresión de que existe voluntad de necesario diálogo, conscientes de la enorme complejidad que rodea a la situación. Y en cada una de las exposiciones que se llevaron adelante por parte de las organizaciones de trabajadores nos expusieron esa mirada", dijo.
Según Trotta, hay que tener "presente que no hay soluciones mágicas de un día para el otro, pero sí tiene que haber un proceso de construcción".
Subrayó que "hay cuestiones positivas más allá de todo lo pendiente, por ejemplo en relación a infraestructura escolar, el acondicionamiento de las escuelas y la elaboración de protocolos".
Perata, "contenta"
Reclamó que "todas las partes tengan una mirada integral de lo que tiene que ser una agenda educativa sin perder de vista que hay un componente de enorme complejidad por el atraso salarial de los distintos rangos, pero las organizaciones (sindicales) no hablan solo de eso sino de orientar el esfuerzo hacia retomar las clases con una presencialidad cuidada".
La ministra de Educación provincial, Florencia Peratta, se manifestó "muy contenta" con la visita del ministro, quien "prestó suma importancia y pudimos mostrarle la calidad humana que tenemos, más allá de los problemas".
En diálogo con Télam, la ministra reconoció que "nos quedamos con la sensación de que el consenso es posible y que podremos estar iniciando el ciclo lectivo el próximo 1° de marzo". (Télam)
