Pagliaroni quiere imponer a Menna a senador como precio para cerrar la alianza con el PRO Cruje la interna en la Unión Cívica Radical chubutense a unos días de concretar las conversaciones con sus aliados para afianzar el frente electoral de Juntos por el Cambio de cara a las elecciones legislativas próximas.
En un nuevo capítulo de una interna feroz que protagonizan los correligionarios de Chubut, desde el sector que impulsa a Gustavo Menna como candidato al Senado, encabezado por el diputado provincial Manuel Pagliaroni, amenazan con presionar para que no se concrete la firma del frente electoral que ya tenían previsto para el próximo viernes las recientes autoridades del partido junto a sus pares del PRO y el Polo Social.
Al parecer, el argumento que Pagliaroni expuso internamente sería que "no podemos permitir ir con otro candidato cabeza de lista que no sea Menna", y seguidamente habría manifestado que "agotarían los recursos partidarios" para que el cierre de alianzas no se concrete.
Impugnación
En ese contexto, desde el sector de Cimadevilla presentaron una impugnación a la Convención Radical del pasado sábado, donde fue electo cómo presidente Miguel Ramos. En esa ocasión también se aprobó con el voto de los convencionales la conformación de alianzas para este turno electoral.
Respecto a lista de la discordia, se sabe que Menna estaría en tratativas para que la integren junto a él dos posibles acompañantes: Fabiana Vázquez, actual secretaria de Desarrollo Social de Esquel, o Margarita Green de Trevelin, representando a la Cordillera.
Por otro lado, Mario Cimadevilla evalúa conformar su lista para el Senado con Alejandra Nassif de Esquel, la abogada de Madryn Vanesa Peruzotti y también algún representante del sector de Pablo Martínez, de Comodoro.
Hasta ahora todo indica que la alianza que cuenta con el aval de la Convención, finalmente se desarrollará y que los radicales deberán atravesar las PASO junto con sus aliados del PRO y del Polo Social, que también tienen aspiraciones de llegar al Congreso con candidatos propios.
El alto nivel de negación de un sector del radicalismo provincial los arroja a un lugar que roza lo antidemocrático, apelando a imponer nombres ante el inminente cierre de listas.
Cruje la interna en la Unión Cívica Radical chubutense a unos días de concretar las conversaciones con sus aliados para afianzar el frente electoral de Juntos por el Cambio de cara a las elecciones legislativas próximas.
En un nuevo capítulo de una interna feroz que protagonizan los correligionarios de Chubut, desde el sector que impulsa a Gustavo Menna como candidato al Senado, encabezado por el diputado provincial Manuel Pagliaroni, amenazan con presionar para que no se concrete la firma del frente electoral que ya tenían previsto para el próximo viernes las recientes autoridades del partido junto a sus pares del PRO y el Polo Social.
Al parecer, el argumento que Pagliaroni expuso internamente sería que "no podemos permitir ir con otro candidato cabeza de lista que no sea Menna", y seguidamente habría manifestado que "agotarían los recursos partidarios" para que el cierre de alianzas no se concrete.
Impugnación
En ese contexto, desde el sector de Cimadevilla presentaron una impugnación a la Convención Radical del pasado sábado, donde fue electo cómo presidente Miguel Ramos. En esa ocasión también se aprobó con el voto de los convencionales la conformación de alianzas para este turno electoral.
Respecto a lista de la discordia, se sabe que Menna estaría en tratativas para que la integren junto a él dos posibles acompañantes: Fabiana Vázquez, actual secretaria de Desarrollo Social de Esquel, o Margarita Green de Trevelin, representando a la Cordillera.
Por otro lado, Mario Cimadevilla evalúa conformar su lista para el Senado con Alejandra Nassif de Esquel, la abogada de Madryn Vanesa Peruzotti y también algún representante del sector de Pablo Martínez, de Comodoro.
Hasta ahora todo indica que la alianza que cuenta con el aval de la Convención, finalmente se desarrollará y que los radicales deberán atravesar las PASO junto con sus aliados del PRO y del Polo Social, que también tienen aspiraciones de llegar al Congreso con candidatos propios.
El alto nivel de negación de un sector del radicalismo provincial los arroja a un lugar que roza lo antidemocrático, apelando a imponer nombres ante el inminente cierre de listas.
