El país

A Ofelia Fernández la repudian en Argentina pero la aplauden en Europa

La legisladora porteña por el Frente de Todos dio un discurso en un acto de Podemos en España, y fue aplaudida por el público. Sin embargo, en Argentina las redes se llenaron de comentarios repudiando a la joven. Las críticas apuntaron a su ideología, su forma de vestir o su estadía en el lujoso Four Seasons de Madrid.

Fernández apostó por un repunte electoral el 14 de noviembre, tras la derrota del oficialismo en las PASO: "Grandes consultoras y analistas dicen que podemos perder votos pero vamos a pelearlo, vamos a hacerlo sorteando trampas judiciales, ataques mediáticos y títulos periodísticos".

"Cuando parece que perdemos votos, estamos ganando derechos", enfatizó. "Y eso es lo que importa, en nuestras pretensiones, al menos la mía, no es vivir de la política los próximos 10 años si no las libertades de los que vienen detrás de mí".

Puso en foco las problemáticas de la juventud, cómo la incertidumbre económica y la ansiedad generalizada. "De esta pandemia los jóvenes salen con más ansiedad, con más depresión, con trastornos alimenticios, con problemas de consumo, y nos tenemos que hacer cargo del acceso a una salud mental, que deberíamos considerar derecho, sobre todo en un momento en el que fue tan hostil la vida", señaló. "Pero además, no hay que individualizar estos problemas ni patologizar, son parte de un malestar colectivo que tiene que ver con una incertidumbre total sobre cual es el futuro en una realidad en la que si cuesta pensar dónde se va a trabajar y dónde se va a vivir en general, más le cuesta a esta franja etaria".

La joven legisladora llamó a dejar de naturalizar la desigualdad: "En todos los reivindicativos hay un común denominador que tiene que ver con que naturalizamos altísimos niveles de desigualdad. En Argentina naturalizamos que hay barrios populares sin acceso a agua potable y barrios privados que tienen lagos artificiales enteros".

"Naturalizamos que las 22 personas más ricas del mundo, todos hombres, concentran más riqueza que todas las mujeres de África juntas", agregó. "Hay un profundo nivel de desigualdad y no podemos permitir que quieran discutir la pobreza sin discutir la riqueza. Eso es una trampa, tenemos que sortearla. Tenemos que pelearnos con el mercado inmobiliario, negar esta idea de que los ricos están ahogados con impuestos cuando son todos evasores, esta idea de que la gente que la pasa mal es porque no hace mérito, si ellos son todos herederos".

En esta línea, propuso "avanzar con el salario universal y con políticas sociales" y "tener el pulso firme con los formadores de precios porque si no la plata que se pone se va a los 15 minutos". "Ellos pretenden que valga más la ganancia del 1% que la vida del 99% restante", apuntó.

Si bien los medios españoles celebraron su discurso, en Argentina se convirtió en tendencia por el caudal de críticas que recibió. Entre ellas, la criticaron por su vestimenta, mientras otros indicaron la hipocresía del "progresismo K" cuando toca hablar sobre distribución de la riqueza.