Minería

Autogestión o muerte

Por Alfredo Grande

Mientras a las espaldas del pueblo se imponía una sesión ilegítima, se gestaba y consolidaba la lucha del pueblo chubutense. Las diferentes comunidades nos fuimos organizando y al unísono gritamos "¡No es no! El agua no se vende, se defiende".

"Mientras a las espaldas del pueblo se imponía una sesión ilegítima, se gestaba y consolidaba la lucha del pueblo chubutense. Las diferentes comunidades nos fuimos organizando y al unísono gritamos NO ES NO. EL AGUA NO SE VENDE, SE DEFIENDE. El colectivo fue creciendo como una ola...siete días de lucha que se suman a más de 20 años que el pueblo se opone al arrebato de quienes quieren vender la tierra y sus recursos, que tenemos el gusto de servirnos y no servil como aquellos que se arrodillan ante los saqueos de las "grandes" y no tan grandes empresas. Día a día miles fuimos sumándonos a recorrer las calles de cada localidad de la provincia. Hoy, luego de la aprobación del rechazo de lo que siempre fue rechazado y nunca tendría que haber sido aprobado, seguimos en las calles buscando una salida política a este proceso popular que ya iniciado, fue intensificándose y consolidándose con el correr de los días. No van a colmar nuestra paciencia porque el pueblo ya decidió y vamos a seguir estando en las calles cada vez que unos pocos traicionen la decisión de unos muchos".

Este texto fue escrito por Mayra Bovcon nacida y residente en la provincia de Chubut. Psicóloga residente de la residencia interdisciplinaria en salud mental comunitaria de Chubut y coordinadora del Área de Psicoanálisis Implicado del Comahue. He dicho muchas veces que lo reactivo es intenso y efímero. Puede ser una victoria, una derrota o un fracaso. Lo más difícil es pasar de lo reactivo a lo propositivo. En mis términos, pasar de la queja (individual) a la protesta (colectiva) y al combate (individualizando al enemigo de clase) A mi criterio, eso es lo que el heroico pueblo chubutense tiene que decidir. La derogación de la infame ley es el final o es el comienzo. Hoy el nombre de la Bestia es Arcioni. Pero la Bestia tiene muchos nombres y siempre inventa nombres nuevos. Por eso toda lucha es permanente o deja de ser lucha para ser capturada por los consensos. Por ahora, al pueblo de Chubut la historia los absolverá. Y más allá de los mecanismos de la democracia directa, la autogestión de la vida es la única forma de enfrentar la sentencia de muerte de todas las formas de la cultura represora.