En noviembre las facturaciones de los supermercados ubicados en Chubut volvieron a caer y el descenso fue del 4,5%. Mucho se habla de la recuperación económica del país, pero en tierras chubutenses los consumidores cuidan el mango y ajustan sus compras cargando mensualmente menos productos en el changuito.
Después de lo que había una remontada de las ventas en octubre, durante noviembre se volvió a registrar una fuerte baja de las facturaciones en los súper de la provincia de Chubut.
La retracción en las ventas fue del 4,5% y retomó la senda de contracción que se viene dando desde el inicio de la pandemia con facturación por debajo de las subas inflacionarias interanuales.
Debido a que la plata alcanza para cada vez menos en los bolsillos, la totalidad de los rubros más significativos de las ventas tuvieron retrocesos y en especial en el sector de los alimentos; lo que muestra que la recuperación económica nacional, de la tanto se habla con crecimiento del 10% del PBI, no llega al conjunto de la sociedad y eso produce recortes en la cantidad de compras para las capas sociales que siguen padeciendo la crisis económica y la pandemia.
Solamente en tiempos de crisis y fuertes desequilibrios en el poder adquisitivo, como los que se vienen generando con la constante escalada inflacionaria y los sueldos muy atrasados, los consumidores dejan de comprar alimentos porque el dinero no alcanza para llegar a fin de mes.
Las ventas en los alimentos cayeron un 3,8% respecto del mismo mes del año pasado; mientras el rubro de las bebidas retrocedió un 2,7%; el de los lácteos cayó un 6,4%; el de los artículos de limpieza el 14,4% y el de las carnes un 1,4%.
Solamente el sector de los productos electrónicos experimentó noviembre una suba interanual del 8,2%, aunque vale recordar que ese mes se produjeron las ventas promocionales del Black Friday.
