Cultura

Cuestionario Proust / Moisés: "Mis héroes en la vida real son los derrotados que lo siguen intentando"

Desde la poesía, el teatro -como autor y director-, el dibujo y la narrativa, Juan Carlos Moisés (Sarmiento, Chubut, 1954) fue construyendo una obra impar que conmueve desde su comprensión del tiempo y el silencio. Moisés suscita sensaciones profundas y perdurables, como Juan José Arreola, quien amaba al lenguaje por sobre todas las cosas y veneraba a quienes mediante la palabra manifiestan el espíritu, desde Isaías a Franz Kafka. Sus cuentos -publicados por Espacio Hudson Ediciones- son engañosamente simples, o en todo caso simples a la manera de Felisberto Hernández o Apollinaire, ya que enseñan la intensidad en cada línea. Que el autor de "La velocidad de la infancia" haya escrito buena parte de su obra en un pequeño pueblo de la Patagonia, no implica que su tentativa pueda circunscribirse a un territorio, porque es universal en sus alcances y extraordinario en sus logros creativos. Afirma que detesta "la falta de justicia, de igualdad de oportunidades y de fraternidad entre las personas" y "la destrucción del medio ambiente"; y que el colmo de la miseria es "que haya chicos que se mueran de hambre, que la droga los destruya".

Moisés es poeta, dramaturgo y artista plástico, y uno de los autores más destacados de su generación. Publicó "Poemas encontrados en un huevo" (1977), "Ese otro buen poema" (1983), "Querido mundo" (1988), "Animal teórico" (2004), "Palabras en juego" (2006), "Museo de varias artes" (2006), "Esta boca es nuestra" (2009), "El jugador de fútbol" (2015) y "Conversación con el pez" (antología, 2017), entre otras obras. En narrativa, editó "Baile del artista rengo" (2012). Como dramaturgo, publicó "Desesperando" (2008) y "Pintura viva, El tragaluz y La oscuridad" (2013). Como ensayista, "Notas sobre poesía: Una lucha desigual con las palabras" (2016). Dirigió el grupo de teatro Los comedidosmediante.

"Me crié bastante salvaje, en la calle, en la chacra de mi abuela, en el potrero. Tuve una infancia muy vital, no tenía apego a nada que se relacionara con los libros. Esa cosa pequeñita que no necesita ni grandes palabras ni una gran distancia para observar, es lo que me ha influido. Tal es así que todo lo que he escrito se ha limitado al entorno cercano, al que podemos medir en metros", recordó Moisés en una entrevista.
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Las respuestas de Moisés

1. ¿Cuál es el colmo de la miseria?

Que haya chicos que se mueran de hambre, que la droga los destruya.

2. ¿Dónde le gustaría vivir?

Como no soy citadino, en cualquier lugar en medio de la naturaleza.

3. ¿Su ideal de felicidad terrenal?

La paz, la justicia en la Tierra, la igualdad (como esto se entienda), la fraternidad entre las personas, la preservación del medio ambiente. Demasiado pedir. Siempre hay que pedir demasiado. Sobre todo, lo imposible.

4. ¿Con cuáles errores es más indulgente?

Con los errores ajenos.

5. ¿Cuál es su personaje histórico preferido?

Alguien capaz de decir: Nunca hagas nada en contra de tu conciencia, incluso si el Estado te lo exige.

6. ¿Un héroe o heroína de ficción?

El Quijote, Ana Karenina.

7. ¿Sus músicos preferidos?

Beethoven, Mozart, The Beatles, Piazzolla, para empezar.

8. ¿Sus directores de cine preferidos?

Fellini, Kurosawa, Hitchcock.

9. ¿A cuáles escritores prefiere?

A los que siempre vuelvo, hoy ya clásicos, entre otros: Chejov, Beckett, Borges, Pessoa, Montale, Pavese, W. C. Williams...

10. ¿Cuál es la cualidad que prefiere en un hombre?

La dignidad.

11. ¿Cuál es la cualidad que prefiere en una mujer?

La dignidad.

12. ¿Cuál deporte prefiere? ¿Practica alguno?

Uno colectivo. Fútbol. Lo practiqué de joven.

13. ¿Sería capaz de matar a alguien?

Dios me libre. No.

14. ¿Cuál es su ocupación preferida?

Me gusta caminar.

15. ¿Quién le hubiera gustado ser?

A mi edad ya es tarde para arrepentirse.

16. ¿Cuál es el rasgo que define su carácter?

La observación.

17. ¿Qué es lo que más aprecia en sus amigos?

La amistad para siempre.

18. ¿Cuál es su principal defecto?

Son una veintena; todos cabeza a cabeza.

19. ¿Cuáles son sus héroes en la vida real?

Los derrotados que lo siguen intentando.

20. ¿Qué es lo que más detesta?

La falta de justicia, de igualdad de oportunidades y de fraternidad entre las personas. La destrucción del medio ambiente.

21. ¿Cuál talento natural le gustaría poseer?

El talento musical.

22. ¿Cree en la supervivencia del alma?

Mmmmmm...

23. ¿Su ideal de felicidad?

De a ratitos, si es posible cada día.

24. ¿Cuál sería su mayor desgracia?

Preferiría no pensarlo.

25. ¿Qué le gustaría ser?

Músico.

26. ¿Qué hábito ajeno no soporta?

Una conducta, más bien: el egoísmo. El propio me desconsuela y me rebela.

27. ¿Qué es lo que más detesta?

La falta de voluntad de convivencia en todos los órdenes.

28. ¿Tiene un lema?

Démonos la paz, inmediatamente.

29. ¿De qué muerte desearía morir?

No he tenido ese deseo.

30. ¿Cómo le gustaría ser recordado?

Por cosas que pudieran servir a los demás.

*El célebre "Cuestionario Proust" no fue formulado por el autor francés, aunque trascendió gracias a su fama. Su amiga Antoinette Faure, hija de Félix Faure -que llegaría a ser presidente de Francia- le hizo llegar las preguntas cuando el escritor tenía solo 13 años, a fines del siglo XIX. Existen distintas versiones. El periodista francés Bernard Pivot lo rescató para su programa de entrevistas a personalidades del mundo de la cultura titulado Apostrophes, que se emitió entre 1975 y 1990, y lo respondieron líderes políticos como el Dalai Lama o François Mitterrand, cineastas como Roman Polanski o François Truffaut e intelectuales como Claude Lévi-Strauss o Pierre Bourdieu. El presentador James Lipton adaptó una versión del cuestionario en 1994 para que sus invitados lo respondieran al final de su programa Inside the Actors Studio. En 1993 la revista Vanity Fair lo incorporó también.