Patagonia

Todos a los botes: la Patagonia registró 7,4% de inflación en marzo y acumula 57,3% en un año

El 7,4% de inflación en marzo y 57,3% acumulado en un año constituyen una verdadera catástrofe para los sueldos y la vida cotidiana en la Patagonia. Ahora van a esgrimir la coartada de que la guerra en Ucrania fue la que disparó los precios, pero la verdad es que 2022 es el quinto año consecutivo con subas de precios por encima del 30% y hasta del 50% anual. Si bien puede considerárselo un consumo especial, la suba de las cuotas en las escuelas privadas fue de 42,9% solamente en marzo; mientras que el récord en los alimentos lo protagonizaron el pan con 11,7% y la carne con 11,5%.

Vivir con este ritmo de suba de precios es un desquicio. No tiene ninguna lógica ni mucho menos justificación en un país que produce alimentos e hidrocarburos. Claro que los aprovechadores de siempre no tienen límites a la hora de apropiarse de los pocos pesos que duran en los bolsillos cada vez menos días del mes.


El INDEC informó que la inflación de la Patagonia fue de 7,4% en marzo pasado, superó claramente al 6,7% nacional y se transformó en el índice más elevado desde 2002, superando incluso al 6,6% que había generado el macrismo en medio de la crisis desatada en septiembre del 2018.

16.7% de aumento en tres meses

El acumulado anual de los precios patagónicos fue de 16,7% solamente en los primeros tres meses del 2022 y a lo largo de los últimos doce meses trepó al 57,3%.

Con cinco años consecutivos de precios subiendo por encima del 30%, llegando a superar ampliamente el 50% en los últimos tres años, la vida se hace casi imposible y le peor parece que aún estuviera por venir.

Solamente en marzo las escuelas privadas aumentaron sus cuotas 42,9%; mientras que en el rubro de los alimentos el pan subió un 11,7% y la carne un 11,5%.

Por detrás se ubicaron las subas de las prendas de vestir 9,9%; los alquileres, servicios públicos y combustibles con 9%; las verduras 8,6%; el azúcar 8,2%; y las bebidas alcohólicas 7,9%.

En el acumulado de los últimos doce meses los precios que volaron por los aires fueron la adquisición de vehículos con 81,4%; el calzado 80,5%; la ropa 74%; las bebidas con alcohol 71,8%; y todos los alimentos se incrementaron en promedio un 59,8%.