La generación de empleo privado en la Patagonia ingresó sobre el final de 2022 en un proceso de profundo estancamiento, y en diciembre comenzó a retroceder. En la primera mitad del año pasado se mantuvo estancado y en la segunda parte pegó un pequeño salto alcista que luego se volvió a congelar. En Chubut concluyó con 3,5% de aumento respecto de 2021 y del 6,1% ante 2020, pero quedó 1,7% por abajo de 2015; cuando estuvo en sus niveles más altos.
Los datos del SIPA (Sistema Integrado Previsional Argentino), dependiente del Ministerio de Trabajo de Nación reflejaron que el empleo privado en la Patagonia se estancó en la segunda mitad del año y comenzó a declinar en diciembre.
El proceso de creación de puestos de trabajo se dividió en dos tramos. En la primera parte del 2022 se continuó con el proceso alcista, pero a un ritmo muy lento; mientras que en la segunda parte se quedó estancado y con un pequeño retroceso sobre el final del año.
Si bien los números de 2022 mostraron una clara recuperación respecto de los pandémicos años 2020 y 2021, las cifras muestran una disparidad profunda al interior de la región patagónica en torno de la recuperación del empleo en el sector privado.
En conjunto la Patagonia quedó un 6,1% por encima de los niveles registrados en el 2021 y un 11,3% respecto de los que se habían contabilizado en 2021; mientras que si se los compara globalmente con los de 2015 quedaron por primera vez 1,7% por arriba del mejor momento de la última década.
Esa realidad fue extremadamente dispar en la región. Por ejemplo, Neuquén es claramente el motor de creación de empleo privado gracias al impulso de Vaca Muerta, quedando 10,1% por encima del 2021, el 18,5% del 2020 y un 15% positivo respecto del 2015.
Chubut quedó relativamente equilibrada con 2015 manteniendo aún 1,7% menos de empleo, pero consiguió estar 3,5% por encima de 2021 y un 6,1% del2020.
Santa Cruz y Tierra de Fuego son las provincias más afectadas de manera negativa por el proceso. En tierras santacruceñas se han perdido 5,9% de puestos de trabajo respecto de 2015 y las fueguinas 9,2%. Finalmente, en Río Negro igualó las cifras que se contabilizaron en el 2015.
