Política

La historia de una licitación abortada: ¿hay que delegar la recaudación de impuestos en una empresa privada?

El traspié que sufrió el ministro Oscar Antonena resuena en los pasillos de la Casa de Gobierno y el Ministerio de Economía de Chubut. La falta de "transparencia" en los procedimientos implementados para el llamado a licitación que buscaba "privatizar" la recaudación de impuestos provinciales fue objetado por la asesora legal de la Contaduría General. Eso derivó en que el sub Contador General objete la misma. La ausencia de publicidad y la imposibilidad de acceder libremente a los pliegos de condiciones fueron los motivos fundamentales que hicieron caer la licitación. El mecanismo "top secret" implementado por Antonena abrió suspicacias acerca de una convocatoria "direccionada" hacia una empresa en particular.

Antonena debió desmontar el llamado a licitación para "privatizar" la recaudación de impuestos provinciales, con la que viene insistiendo desde hace meses.

Primero buscó una contratación directa, luego abrió una licitación que fue objetada por los funcionarios técnicos de la Contaduría General.

En medio de la veloz marcha atrás del ministro de Economía, El Extremo Sur tuvo acceso a los dictámenes técnicos que lo hicieron recular con la licitación.

Mario Owen, personal de planta permanente de la Contaduría General y en funciones de sub Contador General, fue el encargado de frenar este intento privatista. Su resolución fue demoledora contra la licitación, ya que advirtió en que caso de continuar con la misma iba a dar curso para la intervención de la Fiscalía de Estado.

Owen tomó impulso a partir de un crítico dictamen que elaboró María Castro en su rol de asesora legal de la Contaduría General.

Allí objetó los mecanismos del llamado a licitación y la manipulación de los sobres con los pliegos licitatorios; a los que se les otorgó un carácter de "reservado/secreto" dentro de una licitación pública.

La asesora legal concluyó que la "no publicación de los pliegos y su incorporación en sobres cerrados y lacrados que impiden su conocimiento público ocasionará la nulidad del procedimiento licitatorio". Asimismo, advirtió que de proseguir el procedimiento debería intervenir la Fiscalía de Estado.

Sobre la base de esas argumentaciones de la asesora legal es que el sub Contador Owen elaboró un dictamen en esa misma dirección que terminó acorralando a Antonena hasta hacerlo retroceder.

Objetando la "publicidad y libre concurrencia" de los oferentes a los pliegos licitatorios, Owen socavó la licitación del ministro de Economía y le adviertió que "No es el titular de la Jurisdicción quien debe llevar adelante el proceso de selección del co-contratante".

Así concluyó que el proceso debía ser declarado nulo.

Con el fin de desactivar sospechas de secretismo intencional y direccionamiento de la licitación que podrían conducirlo a un ámbito judicial, Antonena optó por dar marcha atrás con la privatización de la recaudación de los impuestos provinciales. Habrá que ver si archivó definitivamente su plan de contar con una empresa privada para recaudar los tributos que su propio gobierno debería hacer más eficiente para lograr una mayor cantidad de ingresos para la provincia de Chubut.