El inicio de 2023 enciende todas las alarmas posibles respecto de uno de los principales rubros de ingresos que tiene Chubut. Las regalías petroleras siguen retrocediendo como producto de la caída en la producción. Por eso, la suba de este rubro estuvo casi 40% por debajo de la inflación en los meses de febrero y marzo. La ausencia de datos oficiales desde febrero dificulta obtener precisiones, ya que algunos números resultan incompatibles con los que informa Nación. Si la inflación no se detiene y sigue profundizándose el atraso de los ingresos por regalías petroleras, Chubut ingresará en un terreno de extrema debilidad para hacer frente a sus obligaciones mensuales y dejará un panorama financiero extremadamente complejo para el gobierno que asuma en diciembre.
La situación productiva en el rubro petrolero y por consiguiente los ingresos que le quedan a la provincia de Chubut encienden luces rojas para el futuro inmediato, ya que en los meses de febrero y marzo las regalías convertidas a pesos quedaron casi 40 puntos porcentuales por debajo de los altísimos niveles inflacionarios.
Según los datos de la Secretaría de Energía de Nación la provincia recaudó 37,6 millones de dólares en el mes de enero, 33,6 millones en febrero y 36,3 millones en el mes de marzo.
De la sumatoria trimestral surge que Chubut tuvo 6 millones de dólares menos de ingresos a lo largo de los primeros tres meses del año en comparación con igual período del 2022.
Si se tiene en cuenta que los vencimientos de la deuda tomada en dólares se pagan directamente con regalías que no ingresan a Chubut, el panorama se vuelve preocupante para lo que resta del año y genera mayores prevenciones para 2024, cuando ya esté en funciones el próximo gobierno.
Este año se pagará -solamente por el BOCADE que fue emitido por Mario Das Neves y renegociado por el actual ministro de Economía Oscar Antonena- un total de 120 millones de dólares; pero en el 2024 el mismo rubro insumirá 135 millones de dólares.
Si esos valores en dólares se convierten a pesos -según el tipo de cambio oficial- se observa que en enero los ingresos generados por la extracción petrolera llegaron a los 6.853 millones, en febrero a 6.470 millones y en marzo a 7.353 millones de pesos.
Esos números comparados con los mismos meses de 2022 reflejan que en enero las regalías ingresadas fueron apenas 88,1% más altas que las de enero del año pasado, pero la inflación interanual trepó al 98,6%; por lo cual quedaron 10,5% por debajo de la suba de los precios.
Dicha tendencia se viene constatando durante casi todo 2022 y se profundizó en la segunda mitad del año pasado; pero en los meses de febrero y marzo de este 2023 se ahondó mucho más.
Casi 40 puntos atrás de la inflación
En febrero las regalías recaudadas y convertidas a pesos -según el tipo de cambio oficial- subieron apenas 60,8% y quedaron un 39,5% atrás de lo que fue la suba inflacionaria que informó el INDEC, que llegó al 100,3%.
Durante marzo las regalías en moneda nacional subieron tan solo 64,6% y la inflación anualizada fue de 99,4%, eso se tradujo en una diferencia negativa del 34,8%.
Tamaño nivel de deterioro ante la inflación provoca un agujero enorme en las cuentas públicas de Chubut, ya que las regalías representan cerca de un tercio de todos los ingresos del Estado provincial.
De mantenerse la baja productiva de crudo Escalante y de no producirse una devaluación brusca, mucho más marcada que la que se viene dando mes a mes, es de esperar que los números de la provincia se pongan aún más al rojo vivo con vistas a la segunda mitad del año.
Provincia con números diferentes
La Dirección General de Rentas provincial informó, según el último dato disponible, que las regalías petroleras habían ascendido a 7.122 millones de pesos durante febrero.
Esa cifra es diferente a la informada por Nación, más allá de que se deberían sumar las ínfimas regalías gasíferas, aunque estas divergencias se vienen dando desde hace ya bastante tiempo.
En enero la diferencia es menor, pero deja un margen de discrepancia entre lo que informa la Secretaría de Energía y lo que publicaba la DGR.
En base a los datos de la DGR en enero las regalías en pesos subieron 103,9% de manera interanual y fueron 5,3 puntos más altas que la inflación informada por el INDEC.
En febrero el mismo organismo publicó que habían subido 93,3% y se ubicaron 7 puntos porcentuales por debajo de la escalada de los precios.
Aún no se sabe cuáles son los datos de ingresos por las regalías en pesos de marzo ya que la DGR no actualizó la información como lo venía haciendo en la segunda semana de cada mes y eso impide poder cotejar los números con los de la Secretaría de Energía y su conversión a pesos.
A pesar de las diferencias surgidas en base a los datos de ambos organismos la tendencia es relativa similar y mantiene los niveles de impacto negativo, en menor proporción, para las arcas públicas de la provincia.
Falta de información oficial continua
Desde hace más de un año que el gobierno provincial no informa debidamente los números de Chubut y apenas se habían revelado los datos de los tres grandes rubros de ingresos; pero esa secuencia se interrumpió durante el mes pasado y ahora no hay ningún dato oficial sobre lo acontecido en el mes de marzo.
El opaco manejo de la información oficial es una constante de la actual gestión, pero ha sido un mecanismo de manipulación también durante gobiernos anteriores. Hoy en día no se cuenta con ningún dato fidedigno de cómo terminaron las cuentas públicas en 2021 y 2022 en Chubut, ni tampoco hay información disponible de cómo se desenvolvieron los ingresos y los gastos en el primer trimestre de 2023.
Un próximo gobierno asfixiado
Más allá de este panorama confuso que incluye diferencias de información entre Nación y Provincia, lo cierto es que -de seguir profundizándose el atraso de los ingresos por regalías petroleras y si la inflación no se detiene- Chubut ingresará en un terreno de extrema debilidad para hacer frente a sus obligaciones mensuales, que incluyen los salarios estatales y el funcionamiento de los servicios que brinda el Estado.
Las elecciones están en el horizonte cercano y el próximo 30 de julio se abrirán las urnas para saber quién es el próximo gobernador, claro que el vencedor asumirá recién en diciembre y tendrá que afrontar serios problemas de ingresos por la crisis generada por las regalías y por el aumento de los pagos de la deuda en dólares
