Opinión

Frantz Fanon en Burdeos y Sergio Massa en la Rural

Por Rodolfo García

Frantz Fanon tenía razón cuando escribió en el año 1956: La vida imaginaria no es aislable de la vida real: es el mundo concreto, objetivo, el que alimenta constantemente, el que permite, el que legitima, funda lo imaginario. La consciencia imaginaria y por supuesto lo imaginario no son posibles sino en la medida en que lo real nos pertenece.

Siempre creímos que las circunstancias externas determinan nuestro estado interior. La ciencia ha descubierto lo contrario: la mente determina la experiencia exterior. Nuestros pensamientos alteran constantemente nuestra realidad. No hay que subestimar el poder de nuestros pensamientos porque ellos son capaces de alterar la realidad circundante.

En los años ´70, el Che Guevara y los militantes revolucionarios apostaron por dichos conceptos cuando fundaron sus vanguardias revolucionarias y lucharon por la construcción del Hombre Nuevo.

Los escritores de ficción también, porque la construcción literaria se basa de manera simultánea en el mundo real y en el mundo imaginario y ambos no son necesariamente antagónicos y hasta pueden llegar a complementarse. La realidad y la ficción se necesitan entre sí; no se puede tener una sin la otra.

Lo imaginario siempre estuvo presente en el arte y en la política revolucionaria; ellos ven un mundo donde otros no ven nada.

Hasta los turistas, sin saberlo, legitiman las palabras de Fanon cuando van a Verona a visitar la cripta vacía de Julieta Capuleto.

Miles de turistas van todos los años a Italia tras los pasos de la historia de amor mejor narrada por Shakespeare: Romeo y Julieta. En una imponente iglesia franciscana del año 1230 se encuentra la tumba de Julieta. Allí, los turistas disfrutan y hablan persiguiendo al guía hasta que llegan al final del recorrido bajando por una escalera. El sarcófago está en una cara subterránea y es un rectángulo de mármol abierto, pero vacío. Vacío. Es un recorrido tras los pasos de personajes que nunca existieron en la vida real.

También legitiman las palabras de Frantz Fanon el discurso totalmente imaginario y vacío que desarrolló el superministro y candidato presidencial Sergio Massa el día martes 24 de julio en la Exposición Rural de Palermo, el que dio Cristina K. en el mes de abril del corriente año en el Teatro Argentino de La Plata y el que están brindando la mayoría de los candidatos presidenciales. No le están hablando a la Argentina real. Por eso, Frantz Fanon tenía razón: además de filósofo y político, era médico psiquiatra. Sus palabras provienen de una ponencia realizada durante un Congreso de Salud Mental realizado en Burdeos en 1956.