Después de un año casi completo de facturaciones por encima de los niveles inflacionarios, los supermercados de Chubut tuvieron en Chubut una caída del 4,8%. La constante remarcación de los precios y una retracción en el consumo generó el primer impacto en las ventas.
Los datos publicados por el INDEC reflejaron un retroceso en las facturaciones de los súper localizados en la provincia de Chubut durante el mes de mayo, como consecuencia de la permanente remarcación de precios y la contracción en los castigados bolsillos de los chubutenses.
El total de las facturas concretadas durante mayo fue un 103,5% mayor a las del mismo mes del año pasado, mientras que la inflación interanual del IPC Patagonia se ubicó en el 108,3%. La diferencia entre lo facturado y la suba de los precios arrojó el 4,8% de retroceso.
Primera caída del 2023
La caída de mayo fue la primera del 2023 y la más significativa de los últimos doce meses, ya que solamente se había producido un retroceso no muy significativo en diciembre del año pasado.
Después de una disparada alcista de importancia en enero, el más alto de un largo ciclo, de manera consecutiva y constante los niveles de facturación fueron retrocediendo hasta llegar al valor negativo de mayo.
Se gasta menos en más compras
La gran diferencia interanual que pudo observarse en mayo fue que la venta promedio por cada operación fue de 6.047 pesos y solamente creció el 75,2% respecto del mismo mes del 2022; lo que demuestra que en cada compra promedio se gastó un 33% menos que la abultadísima suba de los precios.
Los consumidores hacen más compras mensuales, pero por montos menores en cada vez que concurren al supermercado y el promedio por cada compra facturada refleja que se gastó mucho menos de manera interanual.
El proceso muestra que ya no se hacen grandes compras mensuales y que se asiste muchas veces al súper para comprar lo necesario en función de la altura del mes y la capacidad de compra.