Se acerca la asunción de Ignacio Torres y la conflictividad de los trabajadores estatales va en aumento debido a que el gobernador Mariano Arcioni se niega a reabrir las negociaciones salariales con los empleados públicos mientras sigue avanzando con paso arrollador la suba inflacionaria. En los primeros nueve meses todos los estatales jubilados perdieron un 20% del poder adquisitivo, mientras que los docentes sufrieron un deterioro del 29% en los últimos doce meses. Algunos gremios estatales retornaron a los encuentros de unidad y preanuncian acciones de protesta conjuntas para lo que resta del año.
La disparada inflacionaria de los últimos meses reabre la posibilidad que en Chubut se reinstale la conflictividad de los trabajadores estatales en la búsqueda de una recomposición salarial que les permita emparejar las pérdidas que vienen padeciendo en el último año.
El saliente gobernador Mariano Arcioni no ha dado instrucciones a sus ministros para que se reabran las paritarias con los gremios que representan a los empleados públicos, lo que ha generado que con la fuerte suba inflacionaria de agosto y septiembre los bolsillos de los estatales hayan perdido poder de compra.
La administración se niega a reabrir las paritarias aferrándose al 35% de aumento que otorgó en agosto y que consistía en cinco cuotas de 7% mensual, hasta llegar a diciembre. De esa manera quiso desembarazarse del tema salarial, pero en ese mismo mes de agostó estalló la nueva escalada inflacionaria después de la devaluación del peso tras los resultados de las PASO.
Esos porcentajes fueron rechazados por la ATECh por insuficientes y aceptados por la mayoría de los demás gremios estatales. Pero las subas inflacionarias de agosto con el 12% en el IPC Patagonia y del 14% para septiembre desbarataron esos números que ya eran insuficientes al momento de la firma.
La negativa de Arcioni para reabrir las paritarias antes del 10 de diciembre amaga con sembrar de conflictividad la asunción de Torres en menos de 50 días.
20% de pérdida salarial y disparidad
Sin contabilizar el duro impacto que terminará dejando octubre en materia inflacionaria, entre los meses de enero y septiembre el conjunto de los 64.000 empleados públicos y jubilados provinciales perdieron en Chubut el 20% de su poder adquisitivo.
Mientras que si la comparación se hace de manera interanual en septiembre de este año el deterioro de los salarios fue del 8,5%; eso sucede porque en buena parte del año pasado se fueron actualizando trimestralmente los sueldos por inflación, pero ese proceso se fue distanciando y se interrumpió con la disparada actual.
No todos los sectores de los estatales vienen sufriendo el mismo efecto en la depreciación de sus salarios. En el caso de los docentes la pérdida interanual a septiembre fue del 29%, mientras que en los nueve meses de ese 2023 el retraso salarial llegó al 11,5%.
Mientras tanto, el sector de los trabajadores judiciales experimentó una pérdida interanual del 8,8% -mucho menor a la de docentes- y en los primeros nueve meses de este año le ganaron por 0,9% a la suba de precios registrada hasta septiembre.
Gremios reagrupados
Desde el pago de los sueldos en cuotas y especialmente cuando se puso en marcha la Mesa de Unidad Sindical a partir de los conflictos que se iniciaron en 2018, los sindicatos estatales de Chubut no volvieron a articular protestas en la provincia. Cada uno negoció por su cuenta y a la hora reclamar lo hicieron por separado.
Ahora se reactivó una mesa sindical común, a instancias de la ATECh, de la participaron ATE, AMET, SISAP y UPCN. Guillermo Quiroga de ATE había sido una de las principales trabas para que los sindicatos estatales unificaran reclamos, pero ante la presión de las bases por la pérdida salarial y la negativa del gobierno a reabrir las paritarias el sindicalista aceptó sentarse en la misma mesa que el gremialista docente Daniel Murphy.
Curiosamente otros gremios que habitualmente formaban parte de estos reclamos estuvieron ausentes -tal es el casi de Judiciales, SiTraVich, UDA, SiTraEd, SADOP, CTA y CGT- y aún no se sabe cuál será su posicionamiento frente al pedido de reapertura de paritarias.
"Llegamos a un acuerdo de enviarle una nota al Gobernador de la Provincia porque planteamos en común la necesidad y la obligación que tiene el gobierno de discutir un aumento salarial, tal cual se comprometió en su momento", resaltó en el inicio de la conferencia Quiroga y luego añadió que "Hace algún tiempo sentimos que han cortado el diálogo con nosotros y por eso también hacemos notar nuestro descontento".
También resaltó que las entidades sindicales "pretenden mostrar la unidad" en el reclamo, pero a su vez lo que pretenden es que cada gremio mantenga su identidad. "Todos concluimos en que es una necesidad discutir mejoras en lo salarial, por la elevada inflación, y en lo laboral", recalcó.
"La inflación no para y los sueldos siguen siendo los mismos o cada vez más bajos relacionados a la canasta familiar", señaló Murphy y agregó que "Entendemos que estamos cerca de una elección nacional en la que se juegan muchas cosas. Hay sectores que proponen más ajuste, más ataque a los derechos populares. La unidad pasa a ser más imperiosa y más urgente".
"Este gobierno tiene que dar respuestas"
"Este Gobierno Provincial todavía no se va, tiene dos meses más de administración y una responsabilidad. En ese gobernar tienen que dar respuesta a los pedidos de paritarias. La Secretaría de Trabajo incumple sus obligaciones, es por eso que reiteraremos en conjunto la convocatoria urgente a paritarias", enfatizó el dirigente docente.
Este es el panorama que se desarrollará en los próximos 40 días hasta que Torres asuma en Fontana 50, situación que posiblemente vaya a profundizarse si sigue escalando la inflación y los sueldos choquen de frente contra la suba de los precios.
O Arcioni antes de abandonar Rawson para irse al Parlasur o Torres apenas asuma tendrán que encarar el tema paritario, no solo por las pérdidas de este 2023 sino también por las producidas en los dos años de pandemia que jamás fueron recuperadas. De lo contrario la conflictividad estatal puede convertirse en otro legado venenoso de Arcioni a su sucesor.