Carriqueo acusó a Banco Suizo de financiar el fracking en Vaca Muerta: "Hay violaciones a los DDHH y contaminación ambiental"Orlando Carriqueo tenía previsto pronunciar un discurso en la Asamblea General Anual del Banco Nacional Suizo el viernes y explicar por qué el BNS es responsable del sufrimiento que sufre el pueblo mapuche en Argentina. El BNS se negó a permitirle la entrada. Por eso nos cuenta en una entrevista lo que la población suiza necesita saber sobre el negocio del BNS.
Usted viajó desde Argentina hasta Berna para hablar durante solo tres minutos, que quería abordar en la Asamblea General Anual del Banco Nacional Suizo (BNS). Sin embargo, el SNB le negó el acceso el viernes. No estaban autorizados a hablar en la AGM. ¿Cómo te sientes después de esta noticia?
Orlando Carriqueo: No me sorprende. Esperaba que no se nos concediera acceso, a pesar de que teníamos todos los documentos, autorizaciones y firmas pertinentes de la Alianza del Clima.
¿Qué querías decir en la Junta General de Accionistas?
Quería dejar claro a la dirección del BNS, a sus accionistas y, sobre todo, al pueblo suizo: hay sangre en las manos del BNS. Es corresponsable de las violaciones a los derechos humanos, la contaminación ambiental, los daños irreversibles a nuestra naturaleza, el calentamiento global, las enfermedades y la muerte de muchas personas en Argentina.
Sobre la persona
Orlando Carriqueo forma parte de la comunidad mapuche "Elel Quimun". Durante muchos años, ha llamado la atención sobre la discriminación de los mapuches por parte del Estado argentino, así como sobre la contaminación y las violaciones de los derechos humanos por parte de las empresas de fracking en Vaca Muerta. Lo hizo como embajador de la coordinación del Parlamento mapuche-tehuelche, organismo que representa los intereses de 164 comunidades de la provincia argentina de Río Negro.
Las organizaciones ambientalistas "BreakFree" y "Climate Alliance" han invitado a Carriqueo y a otros dos embajadores de Argentina a Suiza para que puedan hablar en la Asamblea General Anual del BNS, entre otras cosas. La "Alianza Climática" le dio a Carriqueo un poder notarial sobre sus acciones del SNB.
¿Cómo puede ser eso?
Tengo que volver por eso. La cuenca de Vaca-Muerta en el norte de la Patagonia, de donde procedo, tiene el segundo mayor yacimiento de shale gas y el cuarto mayor del mundo. Para tener en sus manos este petróleo y gas, las compañías petroleras como Chevron y Shell perforan agujeros en el suelo y rompen la roca de esquisto inyectando una mezcla de agua, arena y productos químicos en ella. Esta técnica se llama fracking.
Eso no suena muy seguro.
Tampoco lo es. Los accidentes ocurren regularmente. El petróleo sube a la superficie o se produce un incendio, destruyendo gran parte de la naturaleza y envenenando nuestros suelos. Las explosiones también ocurren una y otra vez, matando a personas. Con el fracking, las corporaciones también consumen grandes cantidades de nuestra agua dulce, más precisamente: 100 millones de litros de agua potable al mes. Al mismo tiempo, contaminan nuestras aguas subterráneas porque no pueden evitar que sus mezclas tóxicas de arena, agua y productos químicos se filtren en el suelo. El fracking también es regularmente responsable de terremotos.
¿Y qué papel juega el BNS en esta destrucción?
El BNS es uno de los mayores accionistas de empresas multinacionales y europeas que operan fracking en Vaca Muerta. Por lo tanto, ella es cómplice de todo el sufrimiento que nos hacen los mapuche y la naturaleza en Vaca Muerta.
https://datawrapper.dwcdn.net/IWQDl/2/
El BNS y el misterio de sus acciones
El Banco Nacional Suizo es una sociedad anónima independiente encargada por la Confederación de garantizar la estabilidad de los precios en Suiza. Debe garantizar que el franco suizo no se deprecie enormemente (inflación) ni aumente drásticamente su valor (deflación). Lo hace, entre otras cosas, invirtiendo en divisas y activos extranjeros, como el oro o las acciones de empresas.
No se sabe cuánto dinero invierte el BNS, en qué activos de qué empresas. Ni siquiera está obligado a proporcionar información precisa al Consejo Federal. Cuando Watson le preguntó si el BNS podía confirmar que es uno de los mayores accionistas de las empresas que operan fracking en Vaca Muerta, el BNS dijo: "No podemos comentar sobre inversiones individuales". Esto se debe a que el BNS podría estar en desventaja si otros accionistas supieran en qué empresas tiene participación.
Sin embargo, el BNS señala su Informe de Sostenibilidad, que establece las condiciones en las que excluye a las empresas de su universo de inversión: "Bajo el criterio de ‘daño ambiental sistemáticamente grave', se excluyen las empresas individuales que, por ejemplo, envenenan sistemáticamente masas de agua o paisajes en el curso de su producción, causan daños masivos a la biodiversidad o cuyo modelo de negocio se basa principalmente en la extracción de carbón para la generación de energía. No se excluyen las empresas productoras de carbón para la producción de acero y los conglomerados".
De acuerdo con este criterio de exclusión, el BNS teóricamente no debería tener acciones en empresas de fracking en Vaca Muerta. Sin embargo, esto fue refutado por un estudio basado en inversiones y estimaciones de inversiones de capital reportadas públicamente por el colectivo de investigación WAV en nombre de la Alianza del Clima. Según el acuerdo, el BNS posee una gran participación en las empresas ExxonMobil, Chevron y TotalEnergies, todas las cuales operan fracking en Vaca Muerta.
¿Ha buscado ya contacto directo con el BNS y lo ha confrontado con sus acusaciones?
Sí, hace unos días me reuní con Attilio Zanetti, jefe de análisis económico del BNS, y con Sophie Faber, responsable de la gestión de riesgos globales.
¿Y cuál fue el resultado?
No mucho. Les pregunté si podrían considerar la posibilidad de comprobar en el futuro si las empresas en las que invierten cumplen con la ley, si son culpables de corrupción, contaminación y violaciones de los derechos humanos. Los representantes del BNS dijeron que lo estudiarían. Nada más.
¿Cómo resonó en ti esta respuesta?
Para mí, fue la prueba de que el BNS está cerrando los ojos a la realidad y no quiere asumir su responsabilidad como accionista. Pero podría. Como accionista, puede hacer exigencias. Pero ella no quiere ver lo que se está haciendo con su dinero. Se esconde detrás de las garantías de las empresas de que no son culpables de nada. Hay videos, fotos, estudios científicos, investigaciones que demuestran lo contrario. Esta es información disponible públicamente. No puede ser que el BNS no conozca la destrucción y las violaciones de los derechos humanos causadas por las empresas que financia.
¿Puede explicar a qué se refiere con violaciones de los derechos humanos?
Sí, pero primero hay que entender quién soy y de dónde vengo. No soy activista, no soy política, soy mapuche, parte de la población indígena de Argentina. Hemos vivido durante miles de años en la zona de lo que hoy es Chile y Argentina, practicando la agricultura y la ganadería. Pero desde que los españoles pusieron un pie en América del Sur, nos hemos visto obligados a luchar por el derecho a nuestra tierra, a nuestro sustento. El Estado argentino nos ha expulsado a esta árida zona de Vaca Muerta. No somos un pueblo con un solo gobierno general, sino que estamos formados por muchas comunidades independientes. El Estado les ha otorgado territorios individuales en Vaca Muerta y les ha otorgado autonomía. Nadie estaba interesado en el área de Vaca Muerta hasta entonces. Pero después de averiguar cuánto petróleo y gas natural había bajo nosotros, el estado dio permiso a las compañías petroleras para perforar en nuestros territorios. Sin preguntarnos primero.
Así que los mapuches se defienden.
Claro. Algunas comunidades organizan reiteradamente manifestaciones, a las que el Estado responde con detenciones y violencia, como resultado de lo cual ya han muerto dos mapuches. Otros han emprendido acciones legales. Fallido. Son condiciones similares a las de una dictadura. Son violaciones a los derechos humanos.
Carriqueo en una manifestación en su provincia natal de Río Negro. En la pancarta detrás de él está escrito: "No a la minería en los territorios".imagen: zvg
¿Significa esto que todas las empresas de Vaca Muerta están haciendo fracking ilegalmente?
No. Hay que tener en cuenta que Vaca Muerta abarca un área tan grande como toda Suiza. No toda esta tierra nos pertenece a los mapuche. Además, también hay comunidades que permitieron que las compañías petroleras perforaran en sus tierras. Se les prometió empleo, infraestructura, prosperidad.
¿Y al menos se cumplió esta promesa?
No. La primera perforación tuvo lugar en 2011. Desde entonces, solo he observado una cosa: terremotos constantes que dejan grietas en nuestros hogares, agua que se está volviendo escasa y apenas suficiente para nuestra agricultura y animales, vastas áreas que se han vuelto infértiles, personas y animales que se enferman por aguas subterráneas contaminadas, de repente tienen problemas para respirar, contraen malformaciones genéticas, contraen cáncer, mueren. Todo por culpa del fracking.
En su opinión, ¿esto también convierte a Suiza en una potencia colonial?
Sí. Pero no culpo al pueblo suizo. No puedes estar informado de todo. Pero esa es exactamente la razón por la que quería hablar en la Asamblea General Anual del BNS. Esperaba poder llegar al menos a la población suiza. Porque podría provocar un cambio. Podría ejercer presión sobre el BNS y los políticos. O incluso lanzar una iniciativa popular que prohíba al BNS realizar inversiones en empresas que desprecian a las personas y al medio ambiente.
Así es como el BNS toma una posición
Barbara Janom Steiner, presidenta del BNS, comentó sobre las acusaciones de la Alianza del Clima en la Asamblea General Anual de la siguiente manera: "Es cierto que la Alianza del Clima tiene invitados de América del Sur aquí. Estas personas intercambiaron puntos de vista con una delegación del BNS. Les dijimos el 11 de abril, durante el debate entre la Alianza del Clima y el Presidente de la Junta Directiva y yo, cuáles son las condiciones de admisión a nuestra Asamblea General. Estas dos personas no son accionistas. No se inscriben en el registro de ficheros. Tampoco representan legítimamente a su organización. La Ley de Bancos Nacionales establece directrices claras sobre quién es admitido en la Junta General Anual. Seguiremos haciéndolo en el futuro". (Se encuentra en la grabación de la Junta General de Accionistas del 26 de abril de 2024, a partir del minuto 1:38:20)
Orlando Carriqueo tenía previsto pronunciar un discurso en la Asamblea General Anual del Banco Nacional Suizo el viernes y explicar por qué el BNS es responsable del sufrimiento que sufre el pueblo mapuche en Argentina. El BNS se negó a permitirle la entrada. Por eso nos cuenta en una entrevista lo que la población suiza necesita saber sobre el negocio del BNS.
Usted viajó desde Argentina hasta Berna para hablar durante solo tres minutos, que quería abordar en la Asamblea General Anual del Banco Nacional Suizo (BNS). Sin embargo, el SNB le negó el acceso el viernes. No estaban autorizados a hablar en la AGM. ¿Cómo te sientes después de esta noticia?
Orlando Carriqueo: No me sorprende. Esperaba que no se nos concediera acceso, a pesar de que teníamos todos los documentos, autorizaciones y firmas pertinentes de la Alianza del Clima.
¿Qué querías decir en la Junta General de Accionistas?
Quería dejar claro a la dirección del BNS, a sus accionistas y, sobre todo, al pueblo suizo: hay sangre en las manos del BNS. Es corresponsable de las violaciones a los derechos humanos, la contaminación ambiental, los daños irreversibles a nuestra naturaleza, el calentamiento global, las enfermedades y la muerte de muchas personas en Argentina.
Sobre la persona
Orlando Carriqueo forma parte de la comunidad mapuche "Elel Quimun". Durante muchos años, ha llamado la atención sobre la discriminación de los mapuches por parte del Estado argentino, así como sobre la contaminación y las violaciones de los derechos humanos por parte de las empresas de fracking en Vaca Muerta. Lo hizo como embajador de la coordinación del Parlamento mapuche-tehuelche, organismo que representa los intereses de 164 comunidades de la provincia argentina de Río Negro.
Las organizaciones ambientalistas "BreakFree" y "Climate Alliance" han invitado a Carriqueo y a otros dos embajadores de Argentina a Suiza para que puedan hablar en la Asamblea General Anual del BNS, entre otras cosas. La "Alianza Climática" le dio a Carriqueo un poder notarial sobre sus acciones del SNB.
¿Cómo puede ser eso?
Tengo que volver por eso. La cuenca de Vaca-Muerta en el norte de la Patagonia, de donde procedo, tiene el segundo mayor yacimiento de shale gas y el cuarto mayor del mundo. Para tener en sus manos este petróleo y gas, las compañías petroleras como Chevron y Shell perforan agujeros en el suelo y rompen la roca de esquisto inyectando una mezcla de agua, arena y productos químicos en ella. Esta técnica se llama fracking.
Eso no suena muy seguro.
Tampoco lo es. Los accidentes ocurren regularmente. El petróleo sube a la superficie o se produce un incendio, destruyendo gran parte de la naturaleza y envenenando nuestros suelos. Las explosiones también ocurren una y otra vez, matando a personas. Con el fracking, las corporaciones también consumen grandes cantidades de nuestra agua dulce, más precisamente: 100 millones de litros de agua potable al mes. Al mismo tiempo, contaminan nuestras aguas subterráneas porque no pueden evitar que sus mezclas tóxicas de arena, agua y productos químicos se filtren en el suelo. El fracking también es regularmente responsable de terremotos.
¿Y qué papel juega el BNS en esta destrucción?
El BNS es uno de los mayores accionistas de empresas multinacionales y europeas que operan fracking en Vaca Muerta. Por lo tanto, ella es cómplice de todo el sufrimiento que nos hacen los mapuche y la naturaleza en Vaca Muerta.
https://datawrapper.dwcdn.net/IWQDl/2/
El BNS y el misterio de sus acciones
El Banco Nacional Suizo es una sociedad anónima independiente encargada por la Confederación de garantizar la estabilidad de los precios en Suiza. Debe garantizar que el franco suizo no se deprecie enormemente (inflación) ni aumente drásticamente su valor (deflación). Lo hace, entre otras cosas, invirtiendo en divisas y activos extranjeros, como el oro o las acciones de empresas.
No se sabe cuánto dinero invierte el BNS, en qué activos de qué empresas. Ni siquiera está obligado a proporcionar información precisa al Consejo Federal. Cuando Watson le preguntó si el BNS podía confirmar que es uno de los mayores accionistas de las empresas que operan fracking en Vaca Muerta, el BNS dijo: "No podemos comentar sobre inversiones individuales". Esto se debe a que el BNS podría estar en desventaja si otros accionistas supieran en qué empresas tiene participación.
Sin embargo, el BNS señala su Informe de Sostenibilidad, que establece las condiciones en las que excluye a las empresas de su universo de inversión: "Bajo el criterio de ‘daño ambiental sistemáticamente grave', se excluyen las empresas individuales que, por ejemplo, envenenan sistemáticamente masas de agua o paisajes en el curso de su producción, causan daños masivos a la biodiversidad o cuyo modelo de negocio se basa principalmente en la extracción de carbón para la generación de energía. No se excluyen las empresas productoras de carbón para la producción de acero y los conglomerados".
De acuerdo con este criterio de exclusión, el BNS teóricamente no debería tener acciones en empresas de fracking en Vaca Muerta. Sin embargo, esto fue refutado por un estudio basado en inversiones y estimaciones de inversiones de capital reportadas públicamente por el colectivo de investigación WAV en nombre de la Alianza del Clima. Según el acuerdo, el BNS posee una gran participación en las empresas ExxonMobil, Chevron y TotalEnergies, todas las cuales operan fracking en Vaca Muerta.
¿Ha buscado ya contacto directo con el BNS y lo ha confrontado con sus acusaciones?
Sí, hace unos días me reuní con Attilio Zanetti, jefe de análisis económico del BNS, y con Sophie Faber, responsable de la gestión de riesgos globales.
¿Y cuál fue el resultado?
No mucho. Les pregunté si podrían considerar la posibilidad de comprobar en el futuro si las empresas en las que invierten cumplen con la ley, si son culpables de corrupción, contaminación y violaciones de los derechos humanos. Los representantes del BNS dijeron que lo estudiarían. Nada más.
¿Cómo resonó en ti esta respuesta?
Para mí, fue la prueba de que el BNS está cerrando los ojos a la realidad y no quiere asumir su responsabilidad como accionista. Pero podría. Como accionista, puede hacer exigencias. Pero ella no quiere ver lo que se está haciendo con su dinero. Se esconde detrás de las garantías de las empresas de que no son culpables de nada. Hay videos, fotos, estudios científicos, investigaciones que demuestran lo contrario. Esta es información disponible públicamente. No puede ser que el BNS no conozca la destrucción y las violaciones de los derechos humanos causadas por las empresas que financia.
¿Puede explicar a qué se refiere con violaciones de los derechos humanos?
Sí, pero primero hay que entender quién soy y de dónde vengo. No soy activista, no soy política, soy mapuche, parte de la población indígena de Argentina. Hemos vivido durante miles de años en la zona de lo que hoy es Chile y Argentina, practicando la agricultura y la ganadería. Pero desde que los españoles pusieron un pie en América del Sur, nos hemos visto obligados a luchar por el derecho a nuestra tierra, a nuestro sustento. El Estado argentino nos ha expulsado a esta árida zona de Vaca Muerta. No somos un pueblo con un solo gobierno general, sino que estamos formados por muchas comunidades independientes. El Estado les ha otorgado territorios individuales en Vaca Muerta y les ha otorgado autonomía. Nadie estaba interesado en el área de Vaca Muerta hasta entonces. Pero después de averiguar cuánto petróleo y gas natural había bajo nosotros, el estado dio permiso a las compañías petroleras para perforar en nuestros territorios. Sin preguntarnos primero.
Así que los mapuches se defienden.
Claro. Algunas comunidades organizan reiteradamente manifestaciones, a las que el Estado responde con detenciones y violencia, como resultado de lo cual ya han muerto dos mapuches. Otros han emprendido acciones legales. Fallido. Son condiciones similares a las de una dictadura. Son violaciones a los derechos humanos.
Carriqueo en una manifestación en su provincia natal de Río Negro. En la pancarta detrás de él está escrito: "No a la minería en los territorios".imagen: zvg
¿Significa esto que todas las empresas de Vaca Muerta están haciendo fracking ilegalmente?
No. Hay que tener en cuenta que Vaca Muerta abarca un área tan grande como toda Suiza. No toda esta tierra nos pertenece a los mapuche. Además, también hay comunidades que permitieron que las compañías petroleras perforaran en sus tierras. Se les prometió empleo, infraestructura, prosperidad.
¿Y al menos se cumplió esta promesa?
No. La primera perforación tuvo lugar en 2011. Desde entonces, solo he observado una cosa: terremotos constantes que dejan grietas en nuestros hogares, agua que se está volviendo escasa y apenas suficiente para nuestra agricultura y animales, vastas áreas que se han vuelto infértiles, personas y animales que se enferman por aguas subterráneas contaminadas, de repente tienen problemas para respirar, contraen malformaciones genéticas, contraen cáncer, mueren. Todo por culpa del fracking.
En su opinión, ¿esto también convierte a Suiza en una potencia colonial?
Sí. Pero no culpo al pueblo suizo. No puedes estar informado de todo. Pero esa es exactamente la razón por la que quería hablar en la Asamblea General Anual del BNS. Esperaba poder llegar al menos a la población suiza. Porque podría provocar un cambio. Podría ejercer presión sobre el BNS y los políticos. O incluso lanzar una iniciativa popular que prohíba al BNS realizar inversiones en empresas que desprecian a las personas y al medio ambiente.
Así es como el BNS toma una posición
Barbara Janom Steiner, presidenta del BNS, comentó sobre las acusaciones de la Alianza del Clima en la Asamblea General Anual de la siguiente manera: "Es cierto que la Alianza del Clima tiene invitados de América del Sur aquí. Estas personas intercambiaron puntos de vista con una delegación del BNS. Les dijimos el 11 de abril, durante el debate entre la Alianza del Clima y el Presidente de la Junta Directiva y yo, cuáles son las condiciones de admisión a nuestra Asamblea General. Estas dos personas no son accionistas. No se inscriben en el registro de ficheros. Tampoco representan legítimamente a su organización. La Ley de Bancos Nacionales establece directrices claras sobre quién es admitido en la Junta General Anual. Seguiremos haciéndolo en el futuro". (Se encuentra en la grabación de la Junta General de Accionistas del 26 de abril de 2024, a partir del minuto 1:38:20)
