Política

Ley Bases en el Senado: Milei no tiene los votos y busca romper el bloque de los 33 de UxP

Por Mauricio Cantando

El presidente Javier Milei no tiene los votos en el Senado para sancionar el proyecto de reforma fiscal aprobado el martes en Diputados, debido a que los gobernadores patagónicos y otros posibles aliados no respaldan el aumento de los mínimos no imponibles de Ganancias. El Gobierno apuesta a romper Unión por la Patria (UP) para conseguir lo que le falta.

Se trata del capítulo cinco. Si es rechazado, el proyecto volverá a tratarse íntegramente en la cámara baja. El martes a las 14 empezará el debate en comisiones y la vicepresidenta Victoria Villarruel quiere sesionar el jueves 16 para también lograr la sanción de la ley ómnibus.

Lo dicho: para que la reforma fiscal no regrese a la cámara de origen o quede cajoneada en el Congreso, la Casa Rosada necesita votos peronistas. Apuesta a representantes de las provincias del norte. Son las más favorecidas por el reparto de la coparticipación federal, que aumentaría si más personas pagan Ganancias.

En la lista está el catamarqueño Guillermo Andrada, la tucumana Sandra Mendoza, el sanjuanino Sergio Uñac y el trío santiagueño integrado por Claudia Ledesma, Julio Neder y Guillermo Montenegro. Todos responden a sus gobernadores.

Como explicó Letra P, Montenegro oficia de falso opositor: es elegido por la minoría desde 2013, pero responde al gobernador Gerarado Zamora. Sus pares confían en que evitará votar la reversión de Ganancias porque proviene de UPCN.

Reforma fiscal, trabada

UP tiene 33 votos y sin el aporte de parte de esa bancada el Gobierno no puede llegar a los 37 votos necesarios para aprobar la reversión de Ganancias. Necesitaría coordinar abstenciones o ausencias funcionales.

El problema de LLA es que de las 39 bancas restantes seis están ocupadas por referentes de gobernadores patagónicos: dos de Santa Cruz (Natalia Gadano y José María Carambia), dos de Chubut (Edith Terenzi y Andrea Cristina), una de Neuquén (Lucila Crexell) y otra Río Negro (Mónica Silvia).

Hay tres miembros de la UCR que no garantizan su respaldo a la reforma fiscal y a la ley ómnibus: Martín Lousteau, Maximiliano Abad y Pablo Blanco. El pampeano Daniel Kroneberger es otro radical mirado con desconfianza por los libertarios, que confían en que al menos los rebeldes de este bloque se abstengan.

Lousteau está en contra del blanqueo y lo quiere bloquear como sea. Abad, que preside el comité de la UCR bonaerense, prevé convocar a los gobernadores del partido que negociaron la letra chica en Diputados e ignoraron a los representantes de la cámara alta

Este jueves, el correntino Carlos Espínola, de Unidad Federal, anunció que tampoco está dispuesto a avalar la reversión del impuesto quitado por Sergio Massa en campaña. Explicó que no votará diferente a septiembre, cuando el Congreso subió los mínimos. Una postura similar tendría su compañero Edgardo Kueider.

Ante este escenario, en el Gobierno comenzó un pase de facturas por no aceptar aumentar 22% a los mínimos imponibles para la patagonia, una decisión que hubiera trabado la votación.

Quebrar Unión por la Patria

La única solución que tiene el Gobierno es romper UP, donde algunos miembros están comprometidos en aprobar la ley ómnibus y podrían ayudar con la reforma fiscal. Deberían ser garantes de la doble sanción.

Los senadores Uñac y Andrada tienen la presión de las mineras, favorecidas con los beneficios del Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). Los diputados de UP de esas provincias votaron a favor de ese capítulo. El gobernador rionegrino Alberto Weretilneck, con partido propio, necesita los beneficios del Rigi para la construcción de la planta de gas en la provincia. En la Rosada creen que la necesidad de votar este capítulo de la ley ómnibus puede forzar a estos senadores a respaldar la reforma fiscal. Es la idea.

Este jueves estalló la interna catamarqueña: el gobernador Raúl Jalil pidió aprobar la ley ómnibus y, como anticipó Letra P, la senadora Lucía Corpacci lo desobedeció. Andrada no habló.

Guillermo Francos sigue al frente de las negociaciones. Se reunió con el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, quien garantizó tres votos en Diputados. En el Senado sólo puede ofrecer a Sandra Mendoza, quien hasta ahora nunca se desmarcó de UP.

El trío santiagueño tuvo dos ayudas tácitas al Gobierno: no fueron a la sesión que eligió autoridades, el 13 de diciembre; mientras que Montenegro dio cuórum en la sesión preparatoria del 23 de febrero. Con la reversión de Ganancias sería una de las provincias más favorecidas.

Este jueves, el jefe de ese interbloque, José Mayans, lideró un Zoom con sus pares para acercar posiciones y evitar fugas. Hubo asistencia perfecta en la conexión.

"Somos 33 y necesitamos cuatro más. Nada cambió", repetían desde ese bloque, mientras viralizaban en los teléfonos las declaraciones de Corpacci desmarcándose de Jalil.

¿Se cae un voto del PRO?

Los textos finales de la ley ómnibus y la reforma fiscal, con las modificaciones realizadas en el recinto, recién se enviarán al Senado el viernes y de inmediato se convocará a un plenario de comisiones para el martes, al que asistirá el vicejefe de Gabinete, José Rolandi.

También expondrían el secretario de Hacienda, Carlos Guberman; y los secretarios de Energía y Trabajo, Eduardo Rodríguez Chirillo y Julio Cordero. El plan es dictaminar el jueves y sesionar una semana después.

La exposición de los funcionarios servirá para garantizar votos esquivos. Guberman será el encargado de exponer sobre Ganancias.

Si bien el PRO apoyó en forma unánime en Diputados, en el Senado no confirmó que actuará igual Guadalupe Tagliaferri, cercana a Horacio Rodríguez Larreta. La semana pasada, firmó un pedido de sesión especial sobre presupuesto universitario junto a Lousteau.

Estos días, la exfuncionaria del Gobierno de la Ciudad hizo saber a sus pares que hasta no leer los proyectos, tal como quedaron redactados, no definirá una postura. También quiere escuchar a Rolandi

Como explicó Letra P, en el gobierno hay expectativas con la ley ómnibus por los acuerdos que tejió con los gobiernos provinciales que definen el cuórum. Santa Cruz se benefició de un plan de propiedad participada para Yacimientos Carboníferos de Río Turbio (YCRT) y las provincias patagónicas metieron mano en los capítulos de gas y energía. El gran problema es la reforma fiscal y, sobre todo, el capítulo V, que es la reversión de Ganancias.

Fuente: Letra P