Política

Milei habilita que toquen Los Palmeras en el Pacto de Mayo, ¿ahora indultará a Lali "depósito"?

¡Ah, eh, eh, ah, yo soy libertario! La banda de cumbia Los Palmeras tocará en Tucumán. De Menem al León, plata pública, sí. El Presidente no paga, pero no cuestiona. ¿Indulto a Lali Depósito?

Santa Fe estará en el Pacto de Mayo blue de Javier Milei no sólo por la presencia del gobernador Maximiliano Pullaro, sino también por la cultura local con la banda de cumbia Los Palmeras. Fiel a su estilo, los músicos santafesinos no rechazaron la propuesta de actuar en un festival político y sumaron un nuevo credo a su carrera camaleónica.

La coherencia de la banda, que tocó con todos, contrasta con la contradicción del presidente Javier Milei, que ha deplorado los gastos del Estado en shows musicales -personalmente y a través de sus voceros, como Manuel Adorni- con tanta vehemencia que, empuñando esa bandera, ha atacado brutalmente a artistas y a gobieros provinciales y municipales, con el pico de violencia descargado sobre Lali Espósito en una entrevista televisiva en la que la llamó "Lali Depósito".

Después de la agresión a la cantante y actriz, que fue repudiada por todo el arco político, el Gobierno intentó explicar que el problema no era ella, sino quién le había pagado. ¿Quién le había pagado? Ricardo Quintela, el gobernador de La Rioja que Milei sindicó como lo peor de la casta despilfarradora de dineros públicos.

A Los Palmeras no les pagará la Nación para que animen la fiestita en la Casa Histórica de Tucumán, sino el gobierno de esa provincia. ¿Milei no cuestiona el despilfarro? En este caso, no. El que despilfarra es Osvaldo Jaldo, el primer peronista bueno de la era libertaria, el que rompió el bloque de Unión por a Patria y armó rancho aparte en la Cámara de Diputados, aliado de la Casa Violeta desde el minuto uno a fuerza de recursos federales teledirigidos al Jardín de la República. Hay plata.

De Colón a Menem

Después de cinco décadas en los escenarios -como los Rolling Stones-, poco parece importarles a los simpáticos hombres de trajes chillones y moño que puedan cuestionarlos por su vasta colaboración en campañas electorales y festivales de municipios o provincias.

Si no les hizo ruido cantar de rojo y blanco en el ascenso de Unión en 1996 y 15 años después entonar "Soy Sabalero" en la previa de la final de la Copa Sudamericana en la que Colón enfrentaba a Independiente del Valle, por qué se avergonzarían de pasear su arte en diferentes escenarios políticos o cambiar la letra para fines electorales. No entran en el viejo dilema "política y arte, cosa aparte".

Quizás una de las primeras andanzas en este nicho fue en 2003, cuando cantaron "Soy menemista", con música y letra adaptada de su hit "El parrandero", que empujaba una tercera presidencia de Carlos Saúl para que saque de la "miseria al pueblo triste y olvidado" y devolverlo a "esa década de gloria". Una limpiada de cara que ni el mismísimo riojano pedía.

En 2015 le pusieron música al Frente Renovador. Oscar Cachi Martínez quería ser gobernador en Santa Fe y un envalentonado Sergio Massa iba por la avenida del medio para la presidencia entre Daniel Scioli y Mauricio Macri. ¿Pero qué quiere la gente? Quiere algo diferente, cantaban con la melodía de "Lo que quiere la Chola". Massa la vio por entonces, pero no era diferente.

Javier Milei, el sabalero

El que sí era diferente era Milei. Luego de convertirse en el precandidato más votado de las PASO presidenciales se cruzó en un aeropuerto a Los Palmeras que venían de Formosa de participar de la Fiesta del Pomelo, evento que auspició el gobierno del peronista Gildo Insfrán.

El líder y cantante de la banda, Cacho Deicas, accedió a cantar con el libertario y su hermana Karina la melodía de Soy Sabalero. Una entonación y emoción corporal al borde de la vergüenza ajena: erraron hasta en el conocido y sencillo coro onomatopéyico Ah, eh, eh, ah. Igualmente el video se volvió viral.

No hay nada de qué ponerse colorados para los históricos músicos por saltar de Menem, al Massa antikirchnerista que iba a meter presa a Cristina, pasar a la amistad fraternal con aquel Miguel Del Sel que aún con gracia quería ser gobernador, y luego Milei. Al contrario, podría decirse que hay un hilo conector en esos perfiles.

Otro hilo vinculante es que Massa quedó tercero, Menem se bajó del ballotage y Del Sel perdió dos veces. Hasta Colón perdió aquel partido. Milei ganó, pero, con calma mileístas.

Vale aclarar que no se suben a cualquier dirigente que requiere jingle o arma una fiesta popular. Después de tantos años de carrera no necesitan, gracias a Dios y al "Bombón Asesino", cantar en la inauguración de un tinglado deportivo en un pueblo perdido. Se dan el lujo de poder elegir. Como cuando inauguraron la Villa Deportiva de Puerto General San Martín, o simplemente polideportivo municipal, con el intendente Carlos De Grandis y el exgobernador Omar Perotti.

Por supuesto que todo tiene un límite en la vida: nada de kirchnerismo. En 2008 cocinaron con una canción a Cristina Fernández. ¿Para qué la votaste? y hoy estás llorando porque te engañaste/ ¿para qué le creías? todas las mentiras que ella te decía / El pueblo entero ahora está enojado/ con esa reina que no cumplió. Dos estrofas más y se les escapaba un "yegua".

Tampoco parecen conectar con el progresismo moderno de la otra vereda del tradicionalismo de la ciudad de Santa Fe que habitan. "Los partidos políticos tienen que hacerse a un segundo plano y venir personas que tengan ganas de hacer cosas", proyectó en 2022 en la mesa de Mirtha Legrand el acordeonista y productor Marcos Camino. Luego, reprochó de la nada: "Siempre tuvimos que trabajar, nunca recibimos lo que ahora recibe la gente".

Con el socialismo santafesino también hicieron muy buenas migas. Tampoco se iban a perder la época dulce del Frente Progresista. En 2018, el por entonces gobernador Miguel Lifschitz, exploraba su trascendencia nacional y armó un recital de Los Palmeras en el Obelisco junto con la Filarmónica Provincial. La famosa cumbia santafesina juntó a 150 mil personas en el prime time porteño. Muchos, rosarinos incluidos, tomaron como novedad "La Suavecita", una canción de 1986.

De Miguel Del Sel a Javier Milei, los santafesinos abrazan figuras de la política

De Miguel Del Sel a Javier Milei, los santafesinos abrazan figuras de la política

Quizás con el único político con el que se pelearon directamente fue con el radical José Corral cuando era intendente de la ciudad de Santa Fe y candidato a gobernador de Juntos por el Cambio. El motivo: no les autorizó que hagan en la Costanera el espectáculo con la Sinfónica que era organizado por el entonces gobernador Lifschitz.

Se trata de un fenómeno popular que se hizo de abajo. Hace más de una década, cuando se dejaron de lado los pruritos contra la cumbia por pertenecer esencialmente a las clases populares y pasó a incluirse en otros ámbitos -no sin cierta frivolidad-, Los Palmeras dieron el salto hacia la masividad y transversalidad. Tienen toda una maquinaria aceitada, con Marcos Camino a la cabeza, que hasta les significó giras por Europa y Estados Unidos. The Palmers Live in New York, qué tal.

Jaldo, el anfitrión

El que los contrata esta vez no es el gobierno nacional sino el gobernador tucumano Osvaldo Jaldo que aprovechará el Día de la Independencia para realizar un show musical con artistas el domingo 7, en la previa a la firma del Pacto de Mayo. Una ofrenda del tucumano que mete toda la carne al asador para que el Presidente no quede pedaleando sin gente.

Curiosamente, Casa Rosada no emitió opinión alguna pese a que en febrero el presidente Milei había criticado a los gobernadores e intendentes que destinaban fondos públicos para eventos culturales e ironizó a la artista Lali Espósito al llamarla "Lali Depósito". Parece que con Los Palmeras no encontró rima. Se trata de una contratación que, según averiguó Letra P de dos fuentes al tanto de estos eventos, no baja de los 50 millones de pesos. Merecidos 50 millones en el caso de los santafesinos.

Ni peronistas, ni menemistas, ni mileístas, Los Palmeras son palmeristas. Saben aprovechar las oportunidades. Milei es el último político al que abrazaron en una larga tradición de fe que puede ser controversial. Quizás no conozcan a Dios porque a cualquier santo le hacen un show.

Fuente: Letra P