Patagonia

Sierra Grande vive un boom de inversiones y alza de precios por el oleoducto Vaca Muerta Sur

 Por Ariel Boffelli 

Sierra Grande, localidad de Río Negro que sufrió la prometida revolución productiva de Carlos Menem, vio esfumarse la instalación de una central nuclear y se desilusionó con el hidrógeno verde de Arabela Carreras, se esperanza ahora una vez más por el efecto del oleoducto Vaca Muerta sur y la proyección de un puerto de GNL para exportar energía al mundo.

Los cambios, advierten diversas voces de las fuerzas vivas de la comunidad, se expresan en un incesante montaje de empresas, el desarrollo de obras de infraestructura financiadas por el gobierno de Alberto Weretilneck y la expectativa de participación de las pymes para brindarles servicios a los gigantes que intervienen en la construcción del ducto.

Sin despreciar el tan ansiado nuevo tiempo, el progreso arrastra consigo un inevitable incremento del costo de vida y aumentos en otros rubros en una localidad con una demanda habitacional disparada ante la fiebre del petróleo y el gas. En ese marco comienza a traccionar un centro urbano relegado que observa, en esta obra, la última oportunidad para revivir los tiempos de gloria que brindaba la desaparecida minera Hipasam, cuando la ciudad marcaba el andar de la región.

Río Negro y Vaca Muerta, claves del futuro

Ese espíritu reina entre las autoridades municipales, que aguardan las buenas nuevas del desarrollo. "Hay mucha expectativa desde la audiencia pública. En Sierra Grande hay esperanza", le respondió a Letra P la intendenta Roxana Fernández (Juntos Somos Río Negro), sumando el valor de oficialismo rionegrino al proyecto que fundará un nuevo polo energético en las costas del mar patagónico.

La prueba del sentimiento unánime se hizo tangible para la población tras el avistamiento de las primeras máquinas de la empresa de construcciones y servicios Milicic, que armó base en las costas del Golfo San Matías. O en la compra de un viejo tinglado a demoler en el casco urbano, por parte del Sindicato de Petroleros Jerárquicos de Río Negro, Neuquén y La Pampa para construir oficinas. Cada novedad hizo cambiar el semblante de una población descreída de los anuncios rimbombantes de los sucesivos gobiernos.

La tendencia a incrementar los negocios energéticos influye en la localidad. Además de Milicic, firma vinculada a la minería, al oil and gas e infraestructura, con una amplia cartera de servicios para YPF, aparecieron representantes de sociedades españolas como Técnicas Reunidas (TR), a cargo del desarrollo portuario.

TR tiene a cargo los servicios de "ingeniería, adquisición y gestión de la construcción, bajo un contrato de tipo EPCm, para una terminal de almacenamiento y distribución de hidrocarburos en Punta Colorada". Según el informe financiero, TR cerró esta etapa por una cifra "que asciende a 420 millones de euros". Para darle vigor a esta enorme obra, ingenieros de los centros de la compañía en Madrid, Argentina y Chile llegarán a Sierra Grande.

Fuentes vinculadas al municipio insinuaron que, en ese contexto, aguardan una oleada de contratación de mano de obra local para una porción del segundo tramo, que une Allen y Punta Colorada, en los 437 kilómetros de la colocación de caños. Según información oficial, el total de la construcción demandará más de 10 mil caños para que se exporte al mundo lo que se extrae de la cuenca neuquina. En alguna intervención habrá espacio para el clúster serrano.

La necesidad de cerrar filas

En los albores de este proyecto, cuando no había alcanzado a concluirse la primera etapa del oleoducto, los precios de los inmuebles se dispararon. El anuncio -finalmente trunco- de que la petrolera malaya Petronas iba a desembolsar una inversión histórica en GNL, aceleró la tendencia alcista del mercado inmobiliario. No sólo Sierra Grande elevó los costos, el balneario Playas Doradas (ubicado a 35 kilómetros) multiplicó hasta cinco veces el precio de sus lotes. Lo que se dice una "fiebre del oro negro" lejos de los yacimientos en Neuquén.

Mientras las trasnacionales avanzaron sobre esa porción de la Patagonia, el empresariado local trató de blindarse. Cámaras de comerciantes de Sierra Grande intensificaron contactos con las organizaciones de Puerto Madryn, en Chubut. Los movimientos revelan el temor de quedarse fuera de un negocio sustancial para el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas separadas por apenas 140 kilómetros.

"Hay expectativas de formar parte del negocio. Golpeamos puertas todo el tiempo, buscamos una alternativa y brindamos información que sea útil para todos los empresarios locales", le aseguró a Letra P Brian Contreras, dueño de una empresa dedicada al movimiento de suelos, servicios y montajes.

Desde la Cámara de Empresas y Emprendedores de Sierra Grande, Contreras acompaña a sus colegas. "El espíritu de la cámara básicamente es priorizar a los proyectos locales y difundir los medios asociativos para quienes lleguen a invertir", sumó el emprendedor.

Cuando la obra finalice en el epílogo de 2026, según pronostica YPF, existirá una planta permanente de casi 1.500 personas que demandará enorme cantidad de servicios locales de insumos, viandas y transporte. El pico de la demanda será en el desarrollo del oleoducto en los próximos meses.

Conflicto por la mano de obra con YPF

Parte del proceso necesitará de la mano de obra, que debe ser rionegrina. Al menos eso planteó Weretilneck en la apertura de sesiones ordinarias, pocos días después de un conflicto a cielo abierto entre la UOCRA y la UTE conformada por Techint y Sacde, los pulpos propiedad de Paolo Rocca y Marcelo Mindlin, ante la presencia de mano de obra foránea en el obrador que se armó en la localidad de Chichinales, en el Alto Valle rionegrino.

"El reclamo y la reivindicación de que el proyecto Vaca Muerta sur debe dejar beneficios a Río Negro no es de ahora. Estos proyectos son sueños, utopías y cambios", advirtió el mandatario provincial el pasado 1 de marzo. Antes, por redes sociales, había amenazado que no se iba a mover un caño hasta que contrataran trabajadores de la bolsa laboral que maneja el sindicato. El gobernador puso en discusión el cobro de un canon fijo del 1% de lo que se transporta.

"Vamos a garantizar que los rionegrinos tengan prioridad en la contratación y que se cumpla con el convenio colectivo", acompañó Damián Miller, referente de los obreros de la construcción de la región atlántica, ante la consulta de Letra P.

En su capacidad operativa máxima, el oleoducto incrementará de forma notable la salida del petróleo en Vaca Muerta. Se duplicará gracias a la inversión que, tan solo en su primera etapa, superó los 190 millones de dólares. Los números actuales y a futuro acompañan a Sierra Grande, que renueva una vez más su esperanza de abandonar el ostracismo.

Fuente: Letra P