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Represión, escasez y abandono: La isla de Annobón pidió ser parte de Argentina

En el corazón del Golfo de Guinea, una pequeña isla atraviesa una grave crisis humanitaria, con su población sometida a represión, escasez y abandono internacional. Desde Buenos Aires, su líder político en el exilio denunció esta situación con un pedido inesperado, apelando a la historia compartida, los lazos invisibles del pasado y la urgencia del presente.

Se trata de Annobón, una isla africana de apenas 17 kilómetros cuadrados que hoy pertenece a Guinea Ecuatorial, pero cuya historia remonta a una olvidada conexión con Sudamérica. En una decisión tan simbólica como controvertida, el primer ministro annobonés, Orlando Cartagena Lagar, presentó al Gobierno argentino una solicitud formal para convertirse en estado asociado. El reclamo, con profundas raíces históricas, propone a la Argentina un gesto diplomático inédito: extender su presencia a África y consolidarse como una nación tricontinental.

"Fuimos parte del mismo territorio. Hoy pedimos auxilio a la Argentina, nuestro país hermano", expresó Lagar, quien también lidera un movimiento que proclamó unilateralmente la independencia de Annobón en 2022, sin reconocimiento internacional. En sus declaraciones, alertó sobre "la brutal represión del régimen de Teodoro Obiang", y pidió ayuda humanitaria urgente, asegurando que el dictador "nos está matando lentamente de hambre y contaminando nuestras tierras".

Cómo es la conexión entre Annobon, la isla africana, y el territorio argentino

La conexión entre Annobón y el territorio argentino no es una invención moderna. En 1777, Portugal cedió las islas de Annobón y Fernando Poo a España en el marco de los tratados de San Ildefonso y El Pardo, durante una compleja negociación colonial que también implicó territorios en América del Sur. Así, ambas islas fueron administrativamente incorporadas al Virreinato del Río de la Plata. Desde el puerto de Montevideo partieron tropas hacia África para tomar posesión, aunque los esfuerzos coloniales fueron abandonados poco tiempo después debido a la resistencia local y las enfermedades tropicales.

Aún así, los vínculos persistieron formalmente, y aunque tras la Revolución de Mayo de 1810 la isla quedó fuera del radar rioplatense, no dejó de ser una colonia española hasta bien entrado el siglo XX. Con su independencia en 1968, Annobón pasó a formar parte de Guinea Ecuatorial. Sin embargo, el abandono y la violencia marcaron su historia reciente.

La propuesta actual genera entusiasmo y preocupación a partes iguales. Desde una perspectiva geopolítica, la anexión simbólica de Annobón colocaría a Argentina como un actor con presencia directa en África, ampliando su influencia diplomática y estratégica. Con recursos pesqueros de alto valor, posibles reservas energéticas y una ubicación clave en una de las rutas marítimas más transitadas del planeta, la isla tiene un potencial económico significativo.

Pero el gesto no está exento de riesgos. Ciertas voces advierten que podría tensar las relaciones con Guinea Ecuatorial, que no reconoce la independencia de Annobón, y generar resistencias en el seno de la comunidad internacional. Según el sitio Escenario Mundial, también hay inquietudes sobre el impacto que una intervención de este tipo podría tener en otros frentes diplomáticos sensibles, como la causa Malvinas.

En el plano local, cualquier decisión requeriría el aval del Congreso y un consenso amplio sobre los alcances y objetivos de una posible misión humanitaria o presencia argentina en territorio africano. Incluso se especula con la posibilidad de enviar fuerzas de paz en coordinación con organismos internacionales, en una misión de asistencia humanitaria con anclaje histórico y justificación humanitaria.

Fuente: El Destape