YPF de salida en Santa Cruz y Vidal apuesta a amortiguar la crisis con los U$S 335 millones Qué condiciones pactaron la petrolera y el Gobierno Provincial por el traspaso de diez yacimientos maduros luego de más de un año de negociaciones, cómo se encuentran las áreas y el rol de Palermo Aike en el trato. La salida de YPF se concretará con el pago de una compensación total de 335 millones de dólares para Santa Cruz, 200 millones para obras de infraestructura y responsabilidad social, y 135 millones para deudas provinciales, incluidos aportes a la Caja de Previsión Social.
Desde comienzos de 2024, YPF inició conversaciones con el gobierno de Santa Cruz para transferirle la explotación de sus yacimientos petroleros convencionales maduros ubicados en el norte de la Provincia. El proceso involucró meses de negociaciones formales. A inicios de abril de este año, se anunció un principio de acuerdo: el presidente de YPF, Horacio Marín, y el gobernador Claudio Vidal pactaron ceder diez áreas petroleras convencionales a la provincia, incluidas cláusulas para un programa de saneamiento ambiental financiado por la empresa.
Ese convenio preliminar quedó sujeto a la aprobación del directorio de YPF y contemplaba la realización de estudios técnicos previos para evaluar cada campo, la contratación de empresas de servicios y el cronograma de acciones para garantizar la transferencia de las concesiones al control provincial.
Finalmente, el pasado 2 de junio se firmó en Buenos Aires la cesión definitiva de estos bloques a FOMICRUZ (la empresa estatal provincial de energía), refrendando el acuerdo. El documento estableció una compensación total de USD 335 millones para Santa Cruz, desglosada en USD 200 millones para obras de infraestructura y responsabilidad social, y USD 135 millones para deudas provinciales, incluidos aportes a la Caja de Previsión Social.
En el acto participaron Vidal y Marín, entre otras autoridades; poco antes, el gobernador sureño había denunciado públicamente que se estaban retirando materiales de los yacimientos sin autorización ni ningún tipo de control, un episodio que subrayó la urgencia de formalizar la transferencia.
Responsabilidades pactadas
El acuerdo alcanzado establece condiciones concretas para la transición. YPF se comprometió a que en un plazo de seis meses financiará un estudio integral -realizado en conjunto con la UBA y el CONICET- para relevar los pasivos ambientales existentes en esos campos. Tras esos 180 días, la petrolera deberá presentar un plan quinquenal de remediación ambiental totalmente a su cargo.
El ministro de Energía santacruceño, Jaime Álvarez, destacó que estas tareas no sólo garantizarán el saneamiento de las zonas afectadas, sino que también generarán empleo local a través de cooperativas y Pymes del sector petrolero. El funcionario estimó que hay aproximadamente 1.000 pozos improductivos requiriendo cierre técnico.
En paralelo, FOMICRUZ asumirá el control operativo inmediato de los yacimientos, quedando facultada para licitarlos a nuevas operadoras, en un plazo estimado de entre 3 y 6 meses tras la publicación de un decreto provincial que ratifique el acuerdo. En ese marco, el ministro Álvarez aseguro que "ya hay manifestaciones de interés por parte de consorcios de empresas nacionales con inversión extranjera, que prometen aportar más de 1.200 millones de dólares en los próximos seis años para reinvertir en estos campos", en los últimos meses, se habló de que compañías como CGC, Roch y Crown Point podrían hacerse cargo de las áreas.
De vuelta al convenio, las autoridades acordaron asimismo garantizar la continuidad laboral de los trabajadores petroleros actuales: se comunicó que YPF mantendrá las fuentes de trabajo vinculadas a estas áreas hasta su cierre administrativo, de modo que los empleados no queden desempleados de manera abrupta. En cuanto a las regalías, Claudio Vidal informó que el monto de 335 millones de dólares será destinado íntegramente a fortalecer las finanzas provinciales.
Además, el gobernador recalcó que "nunca estuvo de acuerdo en que una sola firma concentrara la operación de la mayoría de los yacimientos en la provincia" y que su "decisión política es que nuestros activos no vuelvan a manos de una sola empresa". Con la cesión a FOMICRUZ, Santa Cruz recupera "soberanía sobre nuestras áreas petroleras en la zona norte", subrayó Vidal, lo cual permitirá licitar cada campo por separado y fomentar así la competencia, la producción y el desarrollo de la industria local.
Cuál es el estado de los yacimientos transferidos
Los diez bloques cedidos por YPF se encuentran en el sector norte de la provincia. Se trata de yacimientos maduros y convencionales como Barranca Yankowsky, Cañadón Vasco, Cañadón Yatel, Cerro Piedra-Cerro Guadal Norte, El Guadal-Lomas del Cuy, Los Monos, Pico Truncado-El Cordón, Los Perales-Las Mesetas, Cañadón León-Meseta Espinosa y Cañadón de la Escondida-Las Heras.
Estos campos llevan décadas en explotación y su producción declinó sustancialmente en los últimos años: "son áreas sin (nueva) inversión con notables pérdidas de producción en los últimos años", advirtió Vidal. La caída productiva implicó que varias empresas proveedoras se retiraran o redujeran sus operaciones en la zona, afectando la economía local.
Técnicamente, estos yacimientos operan principalmente con petróleo liviano, junto con algunos volúmenes de gas asociado. Al momento de la entrega, la producción acumulada de la provincia dependía en buena medida de estos campos maduros, pero la extracción diaria era mucho menor que en años previos debido a la falta de inversiones y al declive natural.
De acuerdo a datos para este 2025 de la Secretaria de Energía de Nación, los diez bloques transferidos exhiben realidades operativas críticas. Cerro Piedra - Cerro Guadal Norte registra un declive productivo del 45% en cinco años, con apenas 89 metros cúbicos diarios y 120 pozos por cerrar. Cañadón Vasco y Cañadón Yatel, con producciones de 950 y 780 metros cúbicos diarios respectivamente, presentan la mayor densidad de pozos inactivos (180 cada uno) y contaminación de suelos. Pico Truncado - El Cordón, (510 metros cúbicos), sufre filtraciones en 90 pozos y requiere modernizar su estación de compresión gasífera. Barranca Yankowsky, prácticamente sin explotación, conserva talleres operativos, pero tiene 85 pozos abandonados. La producción agregada de estas áreas se redujo un 40% desde 2020 debido a la falta de inversión en recuperación secundaria, mientras el 70% de las instalaciones necesita actualización tecnológica.
Estudios técnicos señalan que en conjunto estos bloques contienen decenas de millones de barriles equivalentes restantes, aunque lograr su extracción rentable requerirá perforar nuevos pozos e implementar técnicas de recuperación mejorada. La infraestructura heredada incluye cientos de pozos perforados (muchos ya con alta declinación), estaciones de bombeo, oleoductos y caminos secundarios; sin embargo, varios equipos operativos se hallan al límite de su vida útil. Por ello, parte del acuerdo estipula que los próximos licitantes deberán evaluar y optimizar esa infraestructura, así como encarar la clausura controlada de pozos obsoletos.
En este contexto, localidades como Las Heras y Pico Truncado, donde más de la mitad de la economía depende de estos yacimientos, enfrentan riesgos socioeconómicos severos.
En el acto de firma, los funcionarios provinciales también se refirieron a la situación ambiental: Vidal recordó que, históricamente, las operadoras solían abandonar pozos sin sanear el pasivo, "dejaban el pasivo a las provincias". En este caso, aclaró, la empresa nacional "se hará cargo de la remediación ambiental", algo "que no pasaba antes", lo que marca un precedente nacional en cuanto a la responsabilidad de las petroleras sobre su huella ambiental.
Una cuestión de impacto para la economía local
El traspaso de estos campos maduros hacia gestión provincial se proyecta como una inyección de dinamismo para la región norte de Santa Cruz. Según estimaciones oficiales, la reactivación de la explotación debería "sostener y generar un mayor número de puestos genuinos en el sector privado" y aportar más recursos fiscales a través de regalías incrementales.
Además, Vidal enfatizó que los fondos iniciales comprometidos -los 335 millones de compensación- fortalecerán las cuentas públicas provinciales en un momento de tensiones presupuestarias a nivel nacional. El Gobernador ha puesto el foco en que una mayor producción de petróleo convencional aumentará las regalías que recibe Santa Cruz, lo que ayuda a financiar servicios esenciales como salud y educación.
Desde el gobierno provincial se espera también que la gestión de FOMICRUZ, un ente público, agilice las licitaciones al permitir la participación de múltiples operadoras regionales y nacionales, con lo cual se diversificaría la inversión y se reduciría la concentración de la renta petrolera en pocas manos.
Asimismo, el convenio abre la posibilidad de reactivar cadenas de valor locales. Al adjudicarse nuevos operadores, se generarán contratos de servicios (trabajos de perforación, servicios geológicos, transporte) que beneficiarán a cooperativas, Pymes y personal especializado de la provincia. Esta expectativa es realzada por las declaraciones de Alfredo Monchi, ex secretario general del Sindicato Petrolero, quien apoyó públicamente el traspaso al ver en él una oportunidad de conservar los empleos locales frente al repliegue de YPF.
El plan 4x4 de YPF y la apuesta por Palermo Aike
Aunque YPF cedió estos campos, la empresa aclara que no abandona Santa Cruz. En su nueva estrategia "4x4" -que busca maximizar el valor de la compañía enfocándose en recursos no convencionales- YPF confirmó que continuará invirtiendo en la exploración de reservas no convencionales de la cuenca Austral. En concreto, en el mismo acto del 2 de junio se anunció el compromiso de YPF de perforar este año dos pozos en el área La Azucena y uno en Campamento Este, ambos en la formación Palermo Aike. Palermo Aike, con 12.600 km² de superficie, es considerada la segunda formación no convencional más importante del país después de Vaca Muerta, con recursos estimados en unos 10.000 millones de barriles equivalentes.
En sus declaraciones, Marín agradeció al gobierno santacruceño por la "comprensión" durante la negociación y explicó que la maniobra permite que YPF "pueda enfocarse en las áreas no convencionales en el marco de la estrategia 4x4". Es decir, mientras YPF canaliza sus esfuerzos hacia shale oil y tight gas, Santa Cruz asume la responsabilidad de los campos convencionales, buscando extraer el recurso con nuevos operadores y proyectos sostenibles. De este modo, se acentúa el rol de la provincia en la gestión de su propio recurso hidrocarburífero convencional, pero se evita la desconexión total de la petrolera nacional con la región.
Vale recordar que el plan 4x4 de YPF fue lanzado a principios de 2024 con el objetivo de cuadruplicar la valuación de la empresa, potenciando la producción en Vaca Muerta y otros yacimientos no convencionales. En Santa Cruz, la concreción de proyectos en Palermo Aike supone una señal de continuidad de inversiones: el acuerdo indica que YPF perforará esos pozos exploratorios este mismo año, y posteriormente evaluará la viabilidad de su explotación comercial.
Es decir, aunque la presencia operativa de YPF en los campos convencionales del norte santacruceño cesa formalmente, la petrolera seguirá activa en la provincia a través de desarrollos no convencionales.
El traspaso de los yacimientos maduros al Estado provincial marca "un hecho histórico que genera estabilidad y nuevos puestos de trabajo", según Vidal. El gobierno provincial y la empresa estatal FOMICRUZ toman ahora las riendas de estos campos con el desafío de revitalizar la producción y sanar el pasivo ambiental, mientras YPF redirige sus inversiones a proyectos de exploración de alto impacto. El acuerdo, respaldado por la Presidencia de la Nación y los ministerios provinciales, marca un cambio de paradigma en la gestión de los recursos hidrocarburíferos convencionales en Argentina, con Santa Cruz asumiendo un rol protagónico en la explotación de sus campos maduros.
Fuente: La Tecla Patagonia
Qué condiciones pactaron la petrolera y el Gobierno Provincial por el traspaso de diez yacimientos maduros luego de más de un año de negociaciones, cómo se encuentran las áreas y el rol de Palermo Aike en el trato. La salida de YPF se concretará con el pago de una compensación total de 335 millones de dólares para Santa Cruz, 200 millones para obras de infraestructura y responsabilidad social, y 135 millones para deudas provinciales, incluidos aportes a la Caja de Previsión Social.
Desde comienzos de 2024, YPF inició conversaciones con el gobierno de Santa Cruz para transferirle la explotación de sus yacimientos petroleros convencionales maduros ubicados en el norte de la Provincia. El proceso involucró meses de negociaciones formales. A inicios de abril de este año, se anunció un principio de acuerdo: el presidente de YPF, Horacio Marín, y el gobernador Claudio Vidal pactaron ceder diez áreas petroleras convencionales a la provincia, incluidas cláusulas para un programa de saneamiento ambiental financiado por la empresa.
Ese convenio preliminar quedó sujeto a la aprobación del directorio de YPF y contemplaba la realización de estudios técnicos previos para evaluar cada campo, la contratación de empresas de servicios y el cronograma de acciones para garantizar la transferencia de las concesiones al control provincial.
Finalmente, el pasado 2 de junio se firmó en Buenos Aires la cesión definitiva de estos bloques a FOMICRUZ (la empresa estatal provincial de energía), refrendando el acuerdo. El documento estableció una compensación total de USD 335 millones para Santa Cruz, desglosada en USD 200 millones para obras de infraestructura y responsabilidad social, y USD 135 millones para deudas provinciales, incluidos aportes a la Caja de Previsión Social.
En el acto participaron Vidal y Marín, entre otras autoridades; poco antes, el gobernador sureño había denunciado públicamente que se estaban retirando materiales de los yacimientos sin autorización ni ningún tipo de control, un episodio que subrayó la urgencia de formalizar la transferencia.
Responsabilidades pactadas
El acuerdo alcanzado establece condiciones concretas para la transición. YPF se comprometió a que en un plazo de seis meses financiará un estudio integral -realizado en conjunto con la UBA y el CONICET- para relevar los pasivos ambientales existentes en esos campos. Tras esos 180 días, la petrolera deberá presentar un plan quinquenal de remediación ambiental totalmente a su cargo.
El ministro de Energía santacruceño, Jaime Álvarez, destacó que estas tareas no sólo garantizarán el saneamiento de las zonas afectadas, sino que también generarán empleo local a través de cooperativas y Pymes del sector petrolero. El funcionario estimó que hay aproximadamente 1.000 pozos improductivos requiriendo cierre técnico.
En paralelo, FOMICRUZ asumirá el control operativo inmediato de los yacimientos, quedando facultada para licitarlos a nuevas operadoras, en un plazo estimado de entre 3 y 6 meses tras la publicación de un decreto provincial que ratifique el acuerdo. En ese marco, el ministro Álvarez aseguro que "ya hay manifestaciones de interés por parte de consorcios de empresas nacionales con inversión extranjera, que prometen aportar más de 1.200 millones de dólares en los próximos seis años para reinvertir en estos campos", en los últimos meses, se habló de que compañías como CGC, Roch y Crown Point podrían hacerse cargo de las áreas.
De vuelta al convenio, las autoridades acordaron asimismo garantizar la continuidad laboral de los trabajadores petroleros actuales: se comunicó que YPF mantendrá las fuentes de trabajo vinculadas a estas áreas hasta su cierre administrativo, de modo que los empleados no queden desempleados de manera abrupta. En cuanto a las regalías, Claudio Vidal informó que el monto de 335 millones de dólares será destinado íntegramente a fortalecer las finanzas provinciales.
Además, el gobernador recalcó que "nunca estuvo de acuerdo en que una sola firma concentrara la operación de la mayoría de los yacimientos en la provincia" y que su "decisión política es que nuestros activos no vuelvan a manos de una sola empresa". Con la cesión a FOMICRUZ, Santa Cruz recupera "soberanía sobre nuestras áreas petroleras en la zona norte", subrayó Vidal, lo cual permitirá licitar cada campo por separado y fomentar así la competencia, la producción y el desarrollo de la industria local.
Cuál es el estado de los yacimientos transferidos
Los diez bloques cedidos por YPF se encuentran en el sector norte de la provincia. Se trata de yacimientos maduros y convencionales como Barranca Yankowsky, Cañadón Vasco, Cañadón Yatel, Cerro Piedra-Cerro Guadal Norte, El Guadal-Lomas del Cuy, Los Monos, Pico Truncado-El Cordón, Los Perales-Las Mesetas, Cañadón León-Meseta Espinosa y Cañadón de la Escondida-Las Heras.
Estos campos llevan décadas en explotación y su producción declinó sustancialmente en los últimos años: "son áreas sin (nueva) inversión con notables pérdidas de producción en los últimos años", advirtió Vidal. La caída productiva implicó que varias empresas proveedoras se retiraran o redujeran sus operaciones en la zona, afectando la economía local.
Técnicamente, estos yacimientos operan principalmente con petróleo liviano, junto con algunos volúmenes de gas asociado. Al momento de la entrega, la producción acumulada de la provincia dependía en buena medida de estos campos maduros, pero la extracción diaria era mucho menor que en años previos debido a la falta de inversiones y al declive natural.
De acuerdo a datos para este 2025 de la Secretaria de Energía de Nación, los diez bloques transferidos exhiben realidades operativas críticas. Cerro Piedra - Cerro Guadal Norte registra un declive productivo del 45% en cinco años, con apenas 89 metros cúbicos diarios y 120 pozos por cerrar. Cañadón Vasco y Cañadón Yatel, con producciones de 950 y 780 metros cúbicos diarios respectivamente, presentan la mayor densidad de pozos inactivos (180 cada uno) y contaminación de suelos. Pico Truncado - El Cordón, (510 metros cúbicos), sufre filtraciones en 90 pozos y requiere modernizar su estación de compresión gasífera. Barranca Yankowsky, prácticamente sin explotación, conserva talleres operativos, pero tiene 85 pozos abandonados. La producción agregada de estas áreas se redujo un 40% desde 2020 debido a la falta de inversión en recuperación secundaria, mientras el 70% de las instalaciones necesita actualización tecnológica.
Estudios técnicos señalan que en conjunto estos bloques contienen decenas de millones de barriles equivalentes restantes, aunque lograr su extracción rentable requerirá perforar nuevos pozos e implementar técnicas de recuperación mejorada. La infraestructura heredada incluye cientos de pozos perforados (muchos ya con alta declinación), estaciones de bombeo, oleoductos y caminos secundarios; sin embargo, varios equipos operativos se hallan al límite de su vida útil. Por ello, parte del acuerdo estipula que los próximos licitantes deberán evaluar y optimizar esa infraestructura, así como encarar la clausura controlada de pozos obsoletos.
En este contexto, localidades como Las Heras y Pico Truncado, donde más de la mitad de la economía depende de estos yacimientos, enfrentan riesgos socioeconómicos severos.
En el acto de firma, los funcionarios provinciales también se refirieron a la situación ambiental: Vidal recordó que, históricamente, las operadoras solían abandonar pozos sin sanear el pasivo, "dejaban el pasivo a las provincias". En este caso, aclaró, la empresa nacional "se hará cargo de la remediación ambiental", algo "que no pasaba antes", lo que marca un precedente nacional en cuanto a la responsabilidad de las petroleras sobre su huella ambiental.
Una cuestión de impacto para la economía local
El traspaso de estos campos maduros hacia gestión provincial se proyecta como una inyección de dinamismo para la región norte de Santa Cruz. Según estimaciones oficiales, la reactivación de la explotación debería "sostener y generar un mayor número de puestos genuinos en el sector privado" y aportar más recursos fiscales a través de regalías incrementales.
Además, Vidal enfatizó que los fondos iniciales comprometidos -los 335 millones de compensación- fortalecerán las cuentas públicas provinciales en un momento de tensiones presupuestarias a nivel nacional. El Gobernador ha puesto el foco en que una mayor producción de petróleo convencional aumentará las regalías que recibe Santa Cruz, lo que ayuda a financiar servicios esenciales como salud y educación.
Desde el gobierno provincial se espera también que la gestión de FOMICRUZ, un ente público, agilice las licitaciones al permitir la participación de múltiples operadoras regionales y nacionales, con lo cual se diversificaría la inversión y se reduciría la concentración de la renta petrolera en pocas manos.
Asimismo, el convenio abre la posibilidad de reactivar cadenas de valor locales. Al adjudicarse nuevos operadores, se generarán contratos de servicios (trabajos de perforación, servicios geológicos, transporte) que beneficiarán a cooperativas, Pymes y personal especializado de la provincia. Esta expectativa es realzada por las declaraciones de Alfredo Monchi, ex secretario general del Sindicato Petrolero, quien apoyó públicamente el traspaso al ver en él una oportunidad de conservar los empleos locales frente al repliegue de YPF.
El plan 4x4 de YPF y la apuesta por Palermo Aike
Aunque YPF cedió estos campos, la empresa aclara que no abandona Santa Cruz. En su nueva estrategia "4x4" -que busca maximizar el valor de la compañía enfocándose en recursos no convencionales- YPF confirmó que continuará invirtiendo en la exploración de reservas no convencionales de la cuenca Austral. En concreto, en el mismo acto del 2 de junio se anunció el compromiso de YPF de perforar este año dos pozos en el área La Azucena y uno en Campamento Este, ambos en la formación Palermo Aike. Palermo Aike, con 12.600 km² de superficie, es considerada la segunda formación no convencional más importante del país después de Vaca Muerta, con recursos estimados en unos 10.000 millones de barriles equivalentes.
En sus declaraciones, Marín agradeció al gobierno santacruceño por la "comprensión" durante la negociación y explicó que la maniobra permite que YPF "pueda enfocarse en las áreas no convencionales en el marco de la estrategia 4x4". Es decir, mientras YPF canaliza sus esfuerzos hacia shale oil y tight gas, Santa Cruz asume la responsabilidad de los campos convencionales, buscando extraer el recurso con nuevos operadores y proyectos sostenibles. De este modo, se acentúa el rol de la provincia en la gestión de su propio recurso hidrocarburífero convencional, pero se evita la desconexión total de la petrolera nacional con la región.
Vale recordar que el plan 4x4 de YPF fue lanzado a principios de 2024 con el objetivo de cuadruplicar la valuación de la empresa, potenciando la producción en Vaca Muerta y otros yacimientos no convencionales. En Santa Cruz, la concreción de proyectos en Palermo Aike supone una señal de continuidad de inversiones: el acuerdo indica que YPF perforará esos pozos exploratorios este mismo año, y posteriormente evaluará la viabilidad de su explotación comercial.
Es decir, aunque la presencia operativa de YPF en los campos convencionales del norte santacruceño cesa formalmente, la petrolera seguirá activa en la provincia a través de desarrollos no convencionales.
El traspaso de los yacimientos maduros al Estado provincial marca "un hecho histórico que genera estabilidad y nuevos puestos de trabajo", según Vidal. El gobierno provincial y la empresa estatal FOMICRUZ toman ahora las riendas de estos campos con el desafío de revitalizar la producción y sanar el pasivo ambiental, mientras YPF redirige sus inversiones a proyectos de exploración de alto impacto. El acuerdo, respaldado por la Presidencia de la Nación y los ministerios provinciales, marca un cambio de paradigma en la gestión de los recursos hidrocarburíferos convencionales en Argentina, con Santa Cruz asumiendo un rol protagónico en la explotación de sus campos maduros.
Fuente: La Tecla Patagonia