Pueblos originarios

Pueblo indígena Waorani logra histórica victoria contra petroleras en Ecuador

Por Carolina Gutiérrez Argüelles

Una sentencia histórica reconoció los derechos Waorani y protegió la selva amazónica frente a los intentos de extracción petrolera: La selva amazónica no solo es un icónico lugar de riquezas, también es el hogar de pueblos indígenas que la protegen desde hace siglos. Entre ellos, los Waorani de Ecuador lograron una victoria histórica al frenar los intentos de explotación petrolera en su territorio. El caso, respaldado por la justicia, reconoció que nunca fueron consultados de manera libre e informada, como exige la Constitución y el derecho internacional. Este triunfo no solo detuvo planes de extracción en su tierra ancestral, también se convirtió en un precedente global para los derechos indígenas y la defensa del medioambiente.

Una victoria histórica de los Waorani contra las petroleras

El fallo de la Corte de Justicia de Pastaza invalidó el proceso de "consulta", que más parecía un trámite burocrático que un verdadero diálogo intercultural. Los jueces concluyeron que el Estado actuó con engaños, mala fe y sin respetar las estructuras tradicionales de decisión de los Waorani. El resultado: la suspensión indefinida de cualquier licitación sobre el Bloque 22 y la obligación de repetir el proceso bajo estándares internacionales.

Pero lo más importante es que medio millón de acres de selva amazónica quedaron a salvo de la perforación petrolera, al menos por ahora. Esta victoria judicial dejó claro que los derechos de los pueblos originarios no son negociables, y que la Constitución ecuatoriana, junto con tratados internacionales, los protege de forma explícita.

Nemonte Nenquimo, la voz que inspira desde la Amazonía

En medio de este proceso emergió la figura de Nemonte Nenquimo, madre, activista y presidenta del Consejo de Coordinación de la Nacionalidad Waorani (Conconawep). Con apenas 30 y pocos años, lideró la batalla legal y simbólica contra el Estado y las petroleras. Su mensaje fue directo: "El gobierno intentó vender nuestras tierras sin nuestro permiso. Nuestra selva es nuestra vida. Nunca la venderemos".

Su liderazgo trascendió fronteras y en 2020 fue reconocida por la revista Time como una de las 100 personas más influyentes del mundo. Nemonte también reveló que el actor y activista Leonardo DiCaprio visitará su comunidad para apoyar su causa. Según ella, él le dijo que el reto no es solo gritar, sino detener de verdad el cambio climático.

El precedente que cambia el juego en la Amazonía

El fallo de Pastaza no se limita al pueblo Waorani. En 2012, el gobierno ecuatoriano abrió licitaciones para 16 bloques petroleros que cubrían más de 7 millones de acres en la Amazonía sur. Todos esos procesos compartieron las mismas fallas: falta de información, manipulación y ausencia de consentimiento real. Por eso, la sentencia no solo protege a los Waorani, sino que se convierte en un escudo legal para otras nacionalidades indígenas.

Como señaló la abogada María Espinosa, "el Estado no puede imponer su agenda extractiva bajo procesos simulados de consulta". Este caso demuestra que los pueblos amazónicos tienen el conocimiento y la capacidad de gestionar sus territorios mejor que cualquier empresa extractiva. Además, refuerza la idea de que proteger la Amazonía es esencial para frenar el cambio climático.

Una selva en resistencia y un planeta agradecido

Tras la victoria, cientos de Waorani marcharon en Puyo y otras ciudades, celebrando con cantos y danzas. Su mensaje resonó en todo el mundo: "Nuestra vida vale más que el petróleo". La decisión judicial también envió un mensaje directo a gobiernos y corporaciones: el extractivismo tiene límites cuando choca con los derechos humanos y de la naturaleza.

No se trata solo de Ecuador; lo que pasa en Pastaza afecta a todos. La Amazonía es el pulmón del planeta y su conservación impacta directamente en el equilibrio climático global. Sin embargo, líderes Waorani como Oswando Nenquimo advierten que la lucha no termina. El Estado aún podría intentar apelar o buscar nuevas estrategias para abrir la selva a la explotación. Por eso, la resistencia sigue viva y cada victoria es un paso más hacia un futuro donde la Amazonía esté libre de perforaciones.

La historia del pueblo Waorani no es solo un triunfo judicial; es una lección de dignidad y resistencia. Su victoria demuestra que las comunidades pueden detener gigantes cuando defienden lo esencial: la vida, el agua, los bosques y las futuras generaciones. Hoy, el mundo mira hacia Pastaza y se pregunta: ¿qué pasaría si más pueblos defendieran la Tierra con la misma fuerza que los Waorani?

Fuente: Ecoosfera