Petróleo
Neuquén instalará una torre eólica por cada 10 pozos de shaleAsí lo anticipó el gobernador neuquino, Jorge Sapag.
El aprovechamiento de las enormes existencias de hidrocarburos no convencionales que alberga la provincia traerá aparejado un salto de calidad en la generación energética renovable. En base a los compromisos de perforación asumidos hasta el momento, podrían instalarse 100 molinos en distintos zonas del territorio neuquino.
Neuquén quiere aprovechar el boom de los hidrocarburos no convencionales para obtener energía eólica a gran escala. Un ambicioso plan con esas características fue anunciado a grandes rasgos por el gobernador Jorge Sapag, en el marco del último almuerzo del año del Club del Petróleo, que tuvo lugar este mediodía en el Marriott Hotel.
En diálogo exclusivo con este medio, el mandatario provincial aportó detalles sobre esta innovadora propuesta. “Es un proyecto que hoy está en plena etapa de diseño, al igual que la Red Azul, un sistema de acueductos orientado a suministrar el recurso hídrico a distintas locaciones hidrocarburíferas. La idea es propiciar la construcción de torres aerogeneradoras de 2 megawatts (Mw) cada una en distintos puntos de la provincia”, explicó.
Básicamente, el Gobierno neuquino promoverá la instalación de un molino por cada 10 pozos de recursos no convencionales, cuya perforación demandará alrededor de 100 millones de dólares. “Nuestra intención es que esta propuesta, financiada por las petroleras, se destine esencialmente a abastecer el consumo eléctrico interno de cada yacimiento no convencional, además de proveer energía a otros campos e inyectar el excedente a la red provincial”, precisó.
Puntapié inicial
De a poco, gracias a esta medida, podrán conformarse uno o más parques eólicos en suelo neuquino. “De hecho, Neuquén posee una gran ventaja para que ello ocurra, ya que cuenta con cinco líneas de alta tensión y transporte eléctrico asegurado”, señaló Sapag.
En una primera etapa, afirmó que se perforarán alrededor de 1.000 pozos no convencionales en la provincia. Por ende, podrían montarse unos 100 molinos, que sumarían una capacidad estimada de 200 Mw. “Será clave, en ese sentido, el rol del polo tecnológico que estamos construyendo en Cutral-Có y Plaza Huincul, donde se van a fabricar torres aptas para la aerogeneración, lo que se constituirá en el puntapié inicial de este proyecto”, expresó.
Dicha labor estará a cargo de Invap, cuyo desarrollo científico y técnico deberá ser respaldado por las operadoras. “Con este impulso a la generación de energía limpia y alternativa, apuntamos a consolidar nuestro compromiso con la responsabilidad social y el cuidado ambiental”, aseguró el gobernador.
Según sus palabras, se trata de una alternativa importante cuya concreción tendrá lugar en cuanto se definan las inversiones. “En definitiva, el recurso eólico está. Estamos realizando mediciones en distintas áreas de la provincia y los resultados preliminares son muy buenos”, indicó.
En cuanto al shale, comentó que las perspectivas son cada vez mejores. “No es casual que haya tantos interesados en el rubro y que ya tengamos propuestas de inversión por alrededor de u$s 2.000 millones”, completó.
La mayor restricción
La iniciativa neuquina de atar la explotación de hidrocarburos no tradicionales con la instalación de molinos de torre brindaría respuesta a la principal restricción para el crecimiento del sector eólico en el país: la falta de financiamiento.
A decir de Erico Spinadel, presidente de la Asociación Argentina de Energía Eólica (AAEE) y vicepresidente de la World Wind Energy Association (WWEA), el lanzamiento del plan GENREN, en pleno 2009, pareció constituir la plataforma de despegue del mercado eólico nacional. “Sin embargo, tres años más tarde, el crecimiento previsto sigue haciéndose esperar, principalmente por problemas financieros”, explicó.
A nivel local, los únicos proyectos enmarcados en el GENREN que están en funcionamiento son los que, a través de algún fideicomiso, consiguieron los fondos necesarios para su materialización.
Fuente: El Inversor Online
El aprovechamiento de las enormes existencias de hidrocarburos no convencionales que alberga la provincia traerá aparejado un salto de calidad en la generación energética renovable. En base a los compromisos de perforación asumidos hasta el momento, podrían instalarse 100 molinos en distintos zonas del territorio neuquino.
Neuquén quiere aprovechar el boom de los hidrocarburos no convencionales para obtener energía eólica a gran escala. Un ambicioso plan con esas características fue anunciado a grandes rasgos por el gobernador Jorge Sapag, en el marco del último almuerzo del año del Club del Petróleo, que tuvo lugar este mediodía en el Marriott Hotel.
En diálogo exclusivo con este medio, el mandatario provincial aportó detalles sobre esta innovadora propuesta. “Es un proyecto que hoy está en plena etapa de diseño, al igual que la Red Azul, un sistema de acueductos orientado a suministrar el recurso hídrico a distintas locaciones hidrocarburíferas. La idea es propiciar la construcción de torres aerogeneradoras de 2 megawatts (Mw) cada una en distintos puntos de la provincia”, explicó.
Básicamente, el Gobierno neuquino promoverá la instalación de un molino por cada 10 pozos de recursos no convencionales, cuya perforación demandará alrededor de 100 millones de dólares. “Nuestra intención es que esta propuesta, financiada por las petroleras, se destine esencialmente a abastecer el consumo eléctrico interno de cada yacimiento no convencional, además de proveer energía a otros campos e inyectar el excedente a la red provincial”, precisó.
Puntapié inicial
De a poco, gracias a esta medida, podrán conformarse uno o más parques eólicos en suelo neuquino. “De hecho, Neuquén posee una gran ventaja para que ello ocurra, ya que cuenta con cinco líneas de alta tensión y transporte eléctrico asegurado”, señaló Sapag.
En una primera etapa, afirmó que se perforarán alrededor de 1.000 pozos no convencionales en la provincia. Por ende, podrían montarse unos 100 molinos, que sumarían una capacidad estimada de 200 Mw. “Será clave, en ese sentido, el rol del polo tecnológico que estamos construyendo en Cutral-Có y Plaza Huincul, donde se van a fabricar torres aptas para la aerogeneración, lo que se constituirá en el puntapié inicial de este proyecto”, expresó.
Dicha labor estará a cargo de Invap, cuyo desarrollo científico y técnico deberá ser respaldado por las operadoras. “Con este impulso a la generación de energía limpia y alternativa, apuntamos a consolidar nuestro compromiso con la responsabilidad social y el cuidado ambiental”, aseguró el gobernador.
Según sus palabras, se trata de una alternativa importante cuya concreción tendrá lugar en cuanto se definan las inversiones. “En definitiva, el recurso eólico está. Estamos realizando mediciones en distintas áreas de la provincia y los resultados preliminares son muy buenos”, indicó.
En cuanto al shale, comentó que las perspectivas son cada vez mejores. “No es casual que haya tantos interesados en el rubro y que ya tengamos propuestas de inversión por alrededor de u$s 2.000 millones”, completó.
La mayor restricción
La iniciativa neuquina de atar la explotación de hidrocarburos no tradicionales con la instalación de molinos de torre brindaría respuesta a la principal restricción para el crecimiento del sector eólico en el país: la falta de financiamiento.
A decir de Erico Spinadel, presidente de la Asociación Argentina de Energía Eólica (AAEE) y vicepresidente de la World Wind Energy Association (WWEA), el lanzamiento del plan GENREN, en pleno 2009, pareció constituir la plataforma de despegue del mercado eólico nacional. “Sin embargo, tres años más tarde, el crecimiento previsto sigue haciéndose esperar, principalmente por problemas financieros”, explicó.
A nivel local, los únicos proyectos enmarcados en el GENREN que están en funcionamiento son los que, a través de algún fideicomiso, consiguieron los fondos necesarios para su materialización.
Fuente: El Inversor Online
