Política

Los candidatos enfrentarán el ausentismo, el voto bronca y una logística complicada por el invierno

En los 40 años de democracia, el voto "bronca" prácticamente se duplicó entre los electores de Chubut. Cansancio, hastío y desesperanza se apoderaron de más del 40% del electorado chubutense. En las últimas cuatro elecciones, el ausentismo, el voto blanco y los anulados sumaron más que los partidos que resultaron ganadores en las urnas. La oleada de desencanto que se viene dando en las elecciones provinciales anticipadas, con más de 5 millones de electores que eligieron no votar, podría impactar nuevamente en Chubut y alcanzar un récord.

Las elecciones de este domingo no solamente definirán al gobernador de Chubut, a los legisladores y los intendentes, sino que también mostrarán si el voto bronca sigue creciendo en una provincia donde el rechazo electoral casi se duplicó desde la vuelta de la democracia.

Poder conquistar al electorado parece una tarea extremadamente difícil para los candidatos de los diferentes partidos en el territorio chubutense, ya que el ausentismo, el voto en blanco y los anulados casi se han duplicado en los 40 años de democracia.

En los comicios generales de 2021 se produjo en Chubut el mayor ausentismo de las últimas cuatro décadas, alcanzando al 34,9% del electorado que no fue a votar. Mientras que en las PASO de ese mismo año había sido del 40,5%.

Ambos niveles de ausentismo se posicionaron muy por encima del 25,1% que se registró en el acto electoral del 2001, uno de los peores momentos para el régimen democrático argentino.

Una ola de hastío nacional

En las últimas elecciones provinciales que se han concretado este año un total de 5.272.976 personas decidió no votar, alcanzándose el 31,8% del electorado habilitado para hacerlo que sumó un total de 16.537.729 personas.

Las elecciones en Córdoba Capital tuvieron un 40% de ausentismo y en la provincial había sido del 31,8% del padrón que eligió no votar.

En Santa Fe no votó el 35,5%; el 33,6% en Mendoza; el 41,1% en Chaco; el 31,8% en Río Negro; el 23,8% en Neuquén; el 24,5% en Formosa; 25,2% en Jujuy; el 29,9% en La Rioja; el 28,9 en Misiones; el 30,4% en Salta; el 24,7% en San Juan; el 28,7% en Tierra del Fuego; el 26% en La Pampa; el 33,9% en Corrientes; el 22,3% en San Luis; y el 16,2% en Tucumán.

En las elecciones legislativas del 2021 el mayor ausentismo se registró en Salta con el 36,8%; seguida por Chaco con el 34,2%; Catamarca con el 32,9%; Santa Cruz con el 32,2%; Córdoba con el 32% y en Chubut había sido del 34,9%.

Un rechazo en aumento

El régimen democrático cada vez resuelve menos problemas de los que padece una sociedad que cada vez confía menos en la clase política dirigente y encuentra en el voto bronca una forma de canalizar su descontento y desesperanza.

Ese proceso se extiende claramente al electorado chubutense que en los últimos 40 años ha duplicado su desconexión con las urnas y los políticos.

En 1983 el ausentismo en Chubut había sido del 19,4% y no fueron a votar 28.126 electores; mientras que el voto en blanco fue del 3,5% (5.021 personas) y solamente el 0,8% (1.092 votantes) eligieron anular su sufragio.

Eran tiempos del retorno de la democracia, las ganas de votar después de la dictadura se reflejaban con más de un 80% de participación en el proceso electoral.

Cuatro décadas más tarde la incógnita en Chubut se develará el domingo cuando se cuenten los ausentes y se abran las urnas para contabilizar los votos blanco y nulos, pero en las elecciones del año pasado casi el 41,7% del electorado repudió las elecciones.

En las elecciones legislativas del 2021 un 34,9% del electorado no fue a votar (154.448 personas); el 2,5% votó en blanco (7.077 electores) y el 4,3% anuló su voto (12.332 sufragantes).

En las PASO de ese mismo año el panorama fue aún peor con un 52,2% de voto bronca, con el 40,5% de ausentismo, 7,2 de voto nulo y 4,5% en blanco.

El repudio electoral del 2021 fue el más elevado de los últimos 40 años y sólo fue superado por el catastrófico panorama que se produjo en la debacle del 2001.

Más bronca que esperanza

Los partidos y candidatos triunfadores en las últimas cuatro elecciones sacaron menos votos que el acumulado que congregó el voto bronca.

En el 2021 Juntos por el Cambio triunfó en Chubut con 109.055 votos, pero el voto rechazo y el ausentismo abarcaron 173.857 electores; mientras que en las PASO el ganador, también JxC, tuvo 108.342 votos mientras que el rechazo casi lo duplicó con 208.640 electores.

Salvo en el 2001, cuando el voto repudio más que duplicó a los votos obtenidos por el triunfador de los comicios de Chubut (118.910 contra los 57.674 que conquistó la UCR), desde el 2011 los partidos que resultaron triunfadores en las elecciones chubutenses sacaron menos votos que el sector que no voto, votó en blanco o anuló su sufragio.

Esa tendencia sólo se interrumpió en el 2013 cuando el PACh junto al dasnevismo consiguieron superar al rechazo electoral por casi 52 mil votos (153.395 contra 101.638).

En los últimos diez años los que rechazan las elecciones y no encuentran un candidato o partido que los contengan son amplia mayoría en Chubut, habrá que esperar hasta conocer los resultados de este domingo 30 para saber si este extenso proceso se consolida o se revierte en las urnas.